Latinoamérica acuerda un bloque regional sin EE.UU.
| Miércoles 24 febrero, 2010
Latinoamérica acuerda un bloque regional sin EE.UU.
En Caracas, el año entrante, o en Chile, en 2012, se firmarán los estatutos del nuevo organismo
La creación de una Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños sin presencia de EE.UU. y Canadá marcó la Cumbre del Grupo de Río clausurada ayer en México con muestras de desavenencias internas, pese al mensaje oficial de unidad.
Los mandatarios reunidos durante dos días en el balneario de Playa del Carmen, en el Caribe mexicano, aprobaron un total de diez declaraciones entre las que destaca la puesta en marcha del nuevo organismo “como un espacio regional propio que una a todos los estados”, explicó Felipe Calderón, presidente mexicano.
La intención de los participantes es que esta entidad, en la que se pondrán a trabajar para que esté conformada en las cumbres de Venezuela (2011) o Chile (2012), asuma el “patrimonio” del Grupo de Río y la Cumbre de América Latina y el Caribe (CALC).
El presidente anfitrión afirmó que “en tanto no culmine el proceso de constitución de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños” se mantendrán el Grupo de Río y la CALC de forma unificada con sus respectivos métodos de trabajo, prácticas y procedimientos a fin de asegurar el cumplimiento de sus mandatos.
En sus intervenciones de ayer, los mandatarios de Cuba, Raúl Castro, y Brasil, Luiz Inácio Lula Da Silva, coincidieron en el carácter “histórico” del acuerdo y, mientras el primero afirmó que ya “no tendría sentido” dilatar el proceso, el segundo destacó que servirá para conquistar su “personalidad como región”.
Pero el discurso de unidad estuvo a punto de romperse tras el nuevo enfrentamiento verbal de los presidentes de Colombia, Álvaro Uribe, y Venezuela, Hugo Chávez, que marcó la jornada inaugural.
El acalorado incidente se inició cuando Uribe equiparó la congelación de las relaciones comerciales entre Colombia y Venezuela con el bloqueo que Estados Unidos mantiene sobre Cuba.
Uribe le espetó “¡sea varón!”, a lo que Chávez respondió con un “¡Vete al carajo!”, palabras que inmediatamente acapararon la atención de los medios de comunicación y los foros de Internet.
Este suceso fue analizado ayer por Evo Morales, mandatario boliviano, para quien fue Uribe quien provocó a Chávez con una intervención “sorpresiva” que a su juicio significa que “los agentes de Estados Unidos vienen a intentar empantanar” la creación de la nueva organización.
Precisamente ayer se anunció que Leonel Fernández, mandatario de República Dominicana, presidirá el llamado Grupo de Amigos de Venezuela y Colombia para mediar en las diferencias entre ambos países puestas de manifiesto una vez más en el almuerzo celebrado en el lujoso hotel Grand Velas de la Riviera Maya mexicana.
Horas después de este hecho, Uribe acercó posturas con otro país vecino, Ecuador, con cuyo presidente, Rafael Correa, ratificó la voluntad de avanzar en la normalización de relaciones casi dos años después del bombardeo colombiano de un campamento guerrillero en territorio de Ecuador que provocó la ruptura entre ambos Gobiernos.
Entre el resto de resoluciones aprobadas en la Cumbre de la Unidad destacan la declaración de solidaridad con Haití, la que pide poner fin al bloqueo de Estados Unidos sobre Cuba y la que defiende los derechos de Argentina sobre las Islas Malvinas frente al Reino Unido.
El discurso más crítico de la jornada de clausura vino de Oscar Arias, presidente saliente de Costa Rica, quien lamentó que los países latinoamericanos sean “escleróticos e hipertrofiados” y criticó que Honduras no fuera invitado a la Cumbre por seguir fuera de la Organización de Estados Americanos (OEA).
A juicio de Arias, “es lamentable” que en la cumbre, llamada la de “la unidad” de América Latina y el Caribe, “se reúnan países que se arman los unos contra los otros”.
México
EFE
En Caracas, el año entrante, o en Chile, en 2012, se firmarán los estatutos del nuevo organismo
La creación de una Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños sin presencia de EE.UU. y Canadá marcó la Cumbre del Grupo de Río clausurada ayer en México con muestras de desavenencias internas, pese al mensaje oficial de unidad.
Los mandatarios reunidos durante dos días en el balneario de Playa del Carmen, en el Caribe mexicano, aprobaron un total de diez declaraciones entre las que destaca la puesta en marcha del nuevo organismo “como un espacio regional propio que una a todos los estados”, explicó Felipe Calderón, presidente mexicano.
La intención de los participantes es que esta entidad, en la que se pondrán a trabajar para que esté conformada en las cumbres de Venezuela (2011) o Chile (2012), asuma el “patrimonio” del Grupo de Río y la Cumbre de América Latina y el Caribe (CALC).
El presidente anfitrión afirmó que “en tanto no culmine el proceso de constitución de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños” se mantendrán el Grupo de Río y la CALC de forma unificada con sus respectivos métodos de trabajo, prácticas y procedimientos a fin de asegurar el cumplimiento de sus mandatos.
En sus intervenciones de ayer, los mandatarios de Cuba, Raúl Castro, y Brasil, Luiz Inácio Lula Da Silva, coincidieron en el carácter “histórico” del acuerdo y, mientras el primero afirmó que ya “no tendría sentido” dilatar el proceso, el segundo destacó que servirá para conquistar su “personalidad como región”.
Pero el discurso de unidad estuvo a punto de romperse tras el nuevo enfrentamiento verbal de los presidentes de Colombia, Álvaro Uribe, y Venezuela, Hugo Chávez, que marcó la jornada inaugural.
El acalorado incidente se inició cuando Uribe equiparó la congelación de las relaciones comerciales entre Colombia y Venezuela con el bloqueo que Estados Unidos mantiene sobre Cuba.
Uribe le espetó “¡sea varón!”, a lo que Chávez respondió con un “¡Vete al carajo!”, palabras que inmediatamente acapararon la atención de los medios de comunicación y los foros de Internet.
Este suceso fue analizado ayer por Evo Morales, mandatario boliviano, para quien fue Uribe quien provocó a Chávez con una intervención “sorpresiva” que a su juicio significa que “los agentes de Estados Unidos vienen a intentar empantanar” la creación de la nueva organización.
Precisamente ayer se anunció que Leonel Fernández, mandatario de República Dominicana, presidirá el llamado Grupo de Amigos de Venezuela y Colombia para mediar en las diferencias entre ambos países puestas de manifiesto una vez más en el almuerzo celebrado en el lujoso hotel Grand Velas de la Riviera Maya mexicana.
Horas después de este hecho, Uribe acercó posturas con otro país vecino, Ecuador, con cuyo presidente, Rafael Correa, ratificó la voluntad de avanzar en la normalización de relaciones casi dos años después del bombardeo colombiano de un campamento guerrillero en territorio de Ecuador que provocó la ruptura entre ambos Gobiernos.
Entre el resto de resoluciones aprobadas en la Cumbre de la Unidad destacan la declaración de solidaridad con Haití, la que pide poner fin al bloqueo de Estados Unidos sobre Cuba y la que defiende los derechos de Argentina sobre las Islas Malvinas frente al Reino Unido.
El discurso más crítico de la jornada de clausura vino de Oscar Arias, presidente saliente de Costa Rica, quien lamentó que los países latinoamericanos sean “escleróticos e hipertrofiados” y criticó que Honduras no fuera invitado a la Cumbre por seguir fuera de la Organización de Estados Americanos (OEA).
A juicio de Arias, “es lamentable” que en la cumbre, llamada la de “la unidad” de América Latina y el Caribe, “se reúnan países que se arman los unos contra los otros”.
México
EFE