Las chicas al poder
| Sábado 17 noviembre, 2007
Las chicas al poder
Britney Spears y Kylie Minogue encabezan la oleada de lanzamientos de discos de las múltiples pretendientes al título de princesa del pop
Mark Beech
Bloomberg
Las Spice Girls, Britney Spears y Kylie Minogue están enfundándose en sus mejores vestidos de fiesta, listas para poner a las chicas de nuevo en la cima de las listas de éxitos de música pop.
Minogue, de 39 años, está celebrando el final de sus problemas de salud y produciendo su música más sonora. Pero Spears, de 25 años, podría sonar todavía más fuerte.
Las Spice están reviviendo el “girlpower”, una frase que ahora parece más un chiste de noche de chicas que un pronunciamiento de intenciones feministas. Su álbum de grandes éxitos se venderá a través de las tiendas Victoria’s Secret en Estados Unidos. Las Spice, cuyas edades combinadas suman 146 años, empiezan una gira mundial en Canadá el próximo mes.
Por su parte, las contendientes más jóvenes, Girls Aloud, se están preparando para eclipsar a las ganadoras del show televisivo de talentos Joss Stone, Leona Lewis y Nelly Clarkson, cuyo CD sigue siendo el mejor de su género este año.
Avril Lavigne y las Sugababes están probando ser un éxito entre los muchachos, aunque Rihanna y Robyn están también compitiendo por la corona de la reina del baile.
La lista de invitadas a la fiesta incluye a fiesteras (Nelly Furtado, Gwen Stefani y Christina Aguilera), y nuevas caras (Amerie, Kate Nash, Lilly Allen). Está la reina de la disco, aunque ya no sea muy joven (Madonna tiene un nuevo contrato y regresará con un disco en 2008). Está la buena (P.L. Harvey) y las malas (Courtney Love y Pink).
Para algunos, puede sonar como una fiesta infernal. La mitad de estas estrellas han estado tan ocupadas acaparando titulares en la prensa con escándalos que no pueden tener mucho tiempo para componer canciones. ¿Sus discos deberían ser basura? Cierto.
Falso. Algunas de ellas tienen talento, y las que no siguen siendo un gran negocio, con sus propias líneas de ropa, anteojos oscuros, perfumes y zapatos. Un mal disco podría arruinar la imagen de la marca. Ellas pueden pagar los mejores compositores, músicos, mercadólogos y asesores de Relaciones Públicas. Además, se tienen a sí mismas.
Tanto Spears como Minogue contrataron a Bloodshy & Avant, el equipo ganador del Grammy por el álbum de Britney: “Toxic”. Ambos discos se recargan en la onda disco, y ninguno revela mucho sobre sus problemas personales: el cáncer de Kylie, y el divorcio, batalla legal y rapado de Britney.
El título del nuevo disco “X” de Kylie ha sido ligado a su ex novio Michael Hutchence – cuya banda INXS grabó también un álbum con el nombre “X” que incluía una canción sobre Minogue –.
Este es el décimo álbum de Kylie, aunque hay poca innovación en él en comparación con su último material lanzado al mercado hace cinco año. Minogue se aleja de la melancolía para lanzarse a la pista de baile con la pieza “2 Hearts” a la vanguardia. Aunque Kylie nunca ha sido tan popular en Estados Unidos como en Gran Bretaña y Australia, este es un disco lleno de atractivos que ocasionalmente tiene reminiscencia de su mejor material hasta la fecha: el álbum “Fever” de 2001.
Las expectativas son bastante menores para Britney. Siempre lista para enfiestarse más allá de la llamada del deber, llega con su nuevo CD, “Blackout” (SonyBMG). Su confusa presentación en los MTV Music Awards fue una salida en falso, porque el sencillo “Gimme More” no es la canción más pegajosa del álbum.
En la canción “Piece of Me” el ritmo tecno se suelda con una ingeniosa letra con alusiones a la prensa de espectáculos.
Britney Spears y Kylie Minogue encabezan la oleada de lanzamientos de discos de las múltiples pretendientes al título de princesa del pop
Mark Beech
Bloomberg
Las Spice Girls, Britney Spears y Kylie Minogue están enfundándose en sus mejores vestidos de fiesta, listas para poner a las chicas de nuevo en la cima de las listas de éxitos de música pop.
Minogue, de 39 años, está celebrando el final de sus problemas de salud y produciendo su música más sonora. Pero Spears, de 25 años, podría sonar todavía más fuerte.
Las Spice están reviviendo el “girlpower”, una frase que ahora parece más un chiste de noche de chicas que un pronunciamiento de intenciones feministas. Su álbum de grandes éxitos se venderá a través de las tiendas Victoria’s Secret en Estados Unidos. Las Spice, cuyas edades combinadas suman 146 años, empiezan una gira mundial en Canadá el próximo mes.
Por su parte, las contendientes más jóvenes, Girls Aloud, se están preparando para eclipsar a las ganadoras del show televisivo de talentos Joss Stone, Leona Lewis y Nelly Clarkson, cuyo CD sigue siendo el mejor de su género este año.
Avril Lavigne y las Sugababes están probando ser un éxito entre los muchachos, aunque Rihanna y Robyn están también compitiendo por la corona de la reina del baile.
La lista de invitadas a la fiesta incluye a fiesteras (Nelly Furtado, Gwen Stefani y Christina Aguilera), y nuevas caras (Amerie, Kate Nash, Lilly Allen). Está la reina de la disco, aunque ya no sea muy joven (Madonna tiene un nuevo contrato y regresará con un disco en 2008). Está la buena (P.L. Harvey) y las malas (Courtney Love y Pink).
Para algunos, puede sonar como una fiesta infernal. La mitad de estas estrellas han estado tan ocupadas acaparando titulares en la prensa con escándalos que no pueden tener mucho tiempo para componer canciones. ¿Sus discos deberían ser basura? Cierto.
Falso. Algunas de ellas tienen talento, y las que no siguen siendo un gran negocio, con sus propias líneas de ropa, anteojos oscuros, perfumes y zapatos. Un mal disco podría arruinar la imagen de la marca. Ellas pueden pagar los mejores compositores, músicos, mercadólogos y asesores de Relaciones Públicas. Además, se tienen a sí mismas.
Tanto Spears como Minogue contrataron a Bloodshy & Avant, el equipo ganador del Grammy por el álbum de Britney: “Toxic”. Ambos discos se recargan en la onda disco, y ninguno revela mucho sobre sus problemas personales: el cáncer de Kylie, y el divorcio, batalla legal y rapado de Britney.
El título del nuevo disco “X” de Kylie ha sido ligado a su ex novio Michael Hutchence – cuya banda INXS grabó también un álbum con el nombre “X” que incluía una canción sobre Minogue –.
Este es el décimo álbum de Kylie, aunque hay poca innovación en él en comparación con su último material lanzado al mercado hace cinco año. Minogue se aleja de la melancolía para lanzarse a la pista de baile con la pieza “2 Hearts” a la vanguardia. Aunque Kylie nunca ha sido tan popular en Estados Unidos como en Gran Bretaña y Australia, este es un disco lleno de atractivos que ocasionalmente tiene reminiscencia de su mejor material hasta la fecha: el álbum “Fever” de 2001.
Las expectativas son bastante menores para Britney. Siempre lista para enfiestarse más allá de la llamada del deber, llega con su nuevo CD, “Blackout” (SonyBMG). Su confusa presentación en los MTV Music Awards fue una salida en falso, porque el sencillo “Gimme More” no es la canción más pegajosa del álbum.
En la canción “Piece of Me” el ritmo tecno se suelda con una ingeniosa letra con alusiones a la prensa de espectáculos.