La legión resultó un fiasco
Gaetano Pandolfo gpandolfo@larepublica.net | Lunes 28 marzo, 2011
La legión resultó un fiasco
Selección Nacional no fue capaz ni de sostener un 2-0 en la segunda parte
Con solo dos caras del campeonato nacional, Dave Myrie y Randall Brenes, una tricolor repleta de legionarios, que se supone, representan lo mejor futbolísticamente del país, apenas pudo empatar a dos goles contra la selección de China, en el juego inaugural del Estadio Nacional.
El flojo desempeñó del equipo nacional fue el punto gris de una noche maravillosa, porque a los chinos hay que abonarles su espíritu de lucha, sacrificio, vocación de juego, lo que les permitió deshacer una desventaja de 0-2 al final del primer tiempo, para salir al final con un decoroso empate a dos tantos y además, demostrar sobre la grama, ser un equipo superior al anfitrión.
En el primer tiempo, Costa Rica recargó el juego sobre el sector derecho, donde Cristian Bolaños se convirtió en protagonista y se echó al equipo al hombro; sin embargo, sus incursiones no terminaron en nada, por malos servicios o la anticipación de los zagueros chinos, incluyendo a su sombra Ma Chong (5). Por el sector izquierdo del ataque criollo, Bryan Oviedo y Randall Brenes eran simples espectadores y le tocó a Esteban Alvarado parar en seco un taponazo de Zhang Che (13).
En un tiro de esquina que cobró Bolaños, en el segundo palo Chiqui devolvió de cabeza al corazón del área y Michael Umaña, también de cabeza remató desviado.
Para entonces, ya la afición silbaba prematuramente al equipo de todos, lo que causó el reclamo en los vestuarios, al final del encuentro del técnico Ricardo La Volpe.
“No somos una potencia mundial; apenas nos juntamos hace tres días; ¿qué querían los aficionados, tres goles en quince minutos? El rival también juega”, dijo molesto el argentino.
Ahora, quien pudo pasar a la historia como anotador del primer gol en el Estadio Nacional fue el chino Lang Zheg (14), quien rasó de cabeza un centro y la bola pasó a milímetros del vertical de mano derecha de Alvarado y enseguida fue Jiang Quing (21) quien no cerró centro de la mejor figura de la visita, Yanhg Hao (7) y el que no los hace, los ve hacer.
Después de que Alvaro Saborío se descolgó por la derecha y se puso cara a cara con el portero Yang Zhi, el ariete remató a bocajarro al primer palo y el portero desvió, cuando Chiqui Brenes solo esperaba el pase de “Sabo” para pasar a la historia. Enseguida, Michael Barrantes filtró preciso a Saborío, balón con ventaja y Alvaro venció la salida de Zhi y con remate de zurda rodado en el minuto 39 logró el 1-0 y el primer gol en el nuevo coliseo.
Cuatro minutos después, de nuevo Barrantes metió a Oviedo, quien cruzó un zurdazo que repelió Zhi y el rebote, en la raya trágica lo impulsó a la red el Chiqui Brenes para el 2-0.
China descontó con gol de vestuario; tiro de esquina de Hao y el recién ingresado Gao Lin, madruga arriba a los centrales Marshall y Umaña y al portero Alvarado que se quedó estático y de cabeza, apenas picando puso el 1-2.
Se entra a una segunda parte inoperante y confusa; Costa Rica no se junta, no aparece, no coordina, juega mejor o menos mal el rival, se dan muchas variantes que descomponen más a los dos equipos y en tiempo de reposición en un pase largo, el ariete Wei Chao le gana la posesión de la bola a Marshall y se la pasa al verdugo Gao Lin, quien viene endiablado y este le rompe las tenazas a Esteban Alvarado con el empate a dos.
Gaetano Pandolfo
gpandolfo@larepublica.net
Selección Nacional no fue capaz ni de sostener un 2-0 en la segunda parte
Con solo dos caras del campeonato nacional, Dave Myrie y Randall Brenes, una tricolor repleta de legionarios, que se supone, representan lo mejor futbolísticamente del país, apenas pudo empatar a dos goles contra la selección de China, en el juego inaugural del Estadio Nacional.El flojo desempeñó del equipo nacional fue el punto gris de una noche maravillosa, porque a los chinos hay que abonarles su espíritu de lucha, sacrificio, vocación de juego, lo que les permitió deshacer una desventaja de 0-2 al final del primer tiempo, para salir al final con un decoroso empate a dos tantos y además, demostrar sobre la grama, ser un equipo superior al anfitrión.
En el primer tiempo, Costa Rica recargó el juego sobre el sector derecho, donde Cristian Bolaños se convirtió en protagonista y se echó al equipo al hombro; sin embargo, sus incursiones no terminaron en nada, por malos servicios o la anticipación de los zagueros chinos, incluyendo a su sombra Ma Chong (5). Por el sector izquierdo del ataque criollo, Bryan Oviedo y Randall Brenes eran simples espectadores y le tocó a Esteban Alvarado parar en seco un taponazo de Zhang Che (13).
En un tiro de esquina que cobró Bolaños, en el segundo palo Chiqui devolvió de cabeza al corazón del área y Michael Umaña, también de cabeza remató desviado.
Para entonces, ya la afición silbaba prematuramente al equipo de todos, lo que causó el reclamo en los vestuarios, al final del encuentro del técnico Ricardo La Volpe.
“No somos una potencia mundial; apenas nos juntamos hace tres días; ¿qué querían los aficionados, tres goles en quince minutos? El rival también juega”, dijo molesto el argentino.
Ahora, quien pudo pasar a la historia como anotador del primer gol en el Estadio Nacional fue el chino Lang Zheg (14), quien rasó de cabeza un centro y la bola pasó a milímetros del vertical de mano derecha de Alvarado y enseguida fue Jiang Quing (21) quien no cerró centro de la mejor figura de la visita, Yanhg Hao (7) y el que no los hace, los ve hacer.
Después de que Alvaro Saborío se descolgó por la derecha y se puso cara a cara con el portero Yang Zhi, el ariete remató a bocajarro al primer palo y el portero desvió, cuando Chiqui Brenes solo esperaba el pase de “Sabo” para pasar a la historia. Enseguida, Michael Barrantes filtró preciso a Saborío, balón con ventaja y Alvaro venció la salida de Zhi y con remate de zurda rodado en el minuto 39 logró el 1-0 y el primer gol en el nuevo coliseo.
Cuatro minutos después, de nuevo Barrantes metió a Oviedo, quien cruzó un zurdazo que repelió Zhi y el rebote, en la raya trágica lo impulsó a la red el Chiqui Brenes para el 2-0.
China descontó con gol de vestuario; tiro de esquina de Hao y el recién ingresado Gao Lin, madruga arriba a los centrales Marshall y Umaña y al portero Alvarado que se quedó estático y de cabeza, apenas picando puso el 1-2.
Se entra a una segunda parte inoperante y confusa; Costa Rica no se junta, no aparece, no coordina, juega mejor o menos mal el rival, se dan muchas variantes que descomponen más a los dos equipos y en tiempo de reposición en un pase largo, el ariete Wei Chao le gana la posesión de la bola a Marshall y se la pasa al verdugo Gao Lin, quien viene endiablado y este le rompe las tenazas a Esteban Alvarado con el empate a dos.
Gaetano Pandolfo
gpandolfo@larepublica.net