Guanacaste y Limón son vitales en votaciones ajustadas
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Sábado 06 febrero, 2010
Guanacaste y Limón son vitales en votaciones ajustadas
En elecciones cerradas, tanto la provincia de Guanacaste como la de Limón han sido determinantes para levantar la diferencia a favor de quien termina las justas como presidente electo.
Este fenómeno se ha reiterado en las últimas dos votaciones, en las cuales Abel Pacheco y Oscar Arias llegaron al asiento presidencial con un escaso margen a su favor.
Por ejemplo, en las últimas elecciones, el Partido Acción Ciudadana ganó en San José, Alajuela y Heredia; pero Guanacaste, Limón y Cartago levantaron al partido que se encuentra en el poder.
Guanacaste levantó a Oscar Arias cuando Ottón Solís ganó la Gran Area Metropolitana (GAM). Previamente, Limón había resucitado a Miguel Angel Rodríguez cuando los resultados de la GAM eran muy parejos.
Tradicionalmente, las provincias del Valle Central denotan empates técnicos. Es por ello que las regiones fuera de la GAM destacan como las llamadas a “desempatar”.
El trabajo de campaña en aquellas regiones es distinto. La afectación común en ellas es la pobreza y falta de oportunidades laborales.
Por ello, las reuniones cantonales, el acercamiento directo de los candidatos con los habitantes y los comités de distritos y cantones resultan trascendentales, ya que la provincia usualmente vota en una misma dirección y es capaz de inclinar la decisión presidencial a favor o en contra de una figura.
Los partidos políticos entienden el fenómeno, y es por eso que desde Liberación Nacional hasta los minoritarios han invertido en unidades logísticas que permitan crear una “red comunal”.
“Son provincias muy afectadas en términos de pobreza. El partido con la oferta más interesante puede justificar el hecho de que los pobladores definan decisiones de voto muy similares entre sí, contrario a lo que se ve en Alajuela, donde prevalece la dispersión”, indicó Nuria Marín, analista política.
Es difícil prever el giro que tomarán los ciudadanos de estas zonas (Guanacaste y Limón).
Este fenómeno puede determinar también la mayoría en la composición del Congreso.
San José y Alajuela por ejemplo, llegan a cierres muy parejos e incluso con empates, pero los márgenes de diferencia en las costas pueden dar un giro a la composición del Congreso, explica Carlos Carranza, politólogo de la Universidad Nacional.
La fuerza de este fenómeno podría disiparse si los votantes de la Gran Area Metropolitana deciden consolidar su voto a favor de un mismo candidato.
Daniel Chacón
dchacon@larepublica.net
En elecciones cerradas, tanto la provincia de Guanacaste como la de Limón han sido determinantes para levantar la diferencia a favor de quien termina las justas como presidente electo.
Este fenómeno se ha reiterado en las últimas dos votaciones, en las cuales Abel Pacheco y Oscar Arias llegaron al asiento presidencial con un escaso margen a su favor.
Por ejemplo, en las últimas elecciones, el Partido Acción Ciudadana ganó en San José, Alajuela y Heredia; pero Guanacaste, Limón y Cartago levantaron al partido que se encuentra en el poder.
Guanacaste levantó a Oscar Arias cuando Ottón Solís ganó la Gran Area Metropolitana (GAM). Previamente, Limón había resucitado a Miguel Angel Rodríguez cuando los resultados de la GAM eran muy parejos.
Tradicionalmente, las provincias del Valle Central denotan empates técnicos. Es por ello que las regiones fuera de la GAM destacan como las llamadas a “desempatar”.
El trabajo de campaña en aquellas regiones es distinto. La afectación común en ellas es la pobreza y falta de oportunidades laborales.
Por ello, las reuniones cantonales, el acercamiento directo de los candidatos con los habitantes y los comités de distritos y cantones resultan trascendentales, ya que la provincia usualmente vota en una misma dirección y es capaz de inclinar la decisión presidencial a favor o en contra de una figura.
Los partidos políticos entienden el fenómeno, y es por eso que desde Liberación Nacional hasta los minoritarios han invertido en unidades logísticas que permitan crear una “red comunal”.
“Son provincias muy afectadas en términos de pobreza. El partido con la oferta más interesante puede justificar el hecho de que los pobladores definan decisiones de voto muy similares entre sí, contrario a lo que se ve en Alajuela, donde prevalece la dispersión”, indicó Nuria Marín, analista política.
Es difícil prever el giro que tomarán los ciudadanos de estas zonas (Guanacaste y Limón).
Este fenómeno puede determinar también la mayoría en la composición del Congreso.
San José y Alajuela por ejemplo, llegan a cierres muy parejos e incluso con empates, pero los márgenes de diferencia en las costas pueden dar un giro a la composición del Congreso, explica Carlos Carranza, politólogo de la Universidad Nacional.
La fuerza de este fenómeno podría disiparse si los votantes de la Gran Area Metropolitana deciden consolidar su voto a favor de un mismo candidato.
Daniel Chacón
dchacon@larepublica.net