Golpes son realidades
Luis Fernado Rojas lrojas@larepublica.net | Sábado 13 agosto, 2011
Golpes son realidades
Jason Dufner y Keegan Bradley líderes; Tiger Woods para la casa
En lo que fue uno de los torneos más desastrosos de su carrera golfística, Tiger Woods se despidió el viernes del PGA Championship que se juega en Atlanta, sin gloria, y con la pena de haber jugado como uno de tantos competidores, excesivamente lejano del Woods de la leyenda.
El “Tigre”, que el jueves golpeó siete arriba del par, el viernes tuvo otro mal día sumando tres golpes más y terminando su participación con 150 golpes y un +10 que en nada rima con su historial.
Tuvo de nuevo Tiger dos dobles bogeys en su recorrido; en total cinco en dos días, algo que el estadounidense no lo imaginó ni en su peor pesadilla.
Los líderes son los estadounidenses Jason Dufner y Keegan Bradley, ambos con -5, y este último con la mejor jornada del día al cerrar con seis golpes por debajo del par de la cancha.
Para el joven ganador del US Open, Rory McIlroy, la lesión en su mano derecha le siguió pasando la factura y cerró con tres arriba del par de la cancha, con un bogey triple en el hoyo 17, aunque al menos le bastó para pasar el corte, que estuvo en +4, y seguir en competencia.
La alegría para Latinoamérica la da el venezolano Jhonattan Vegas, quien el primer día igualó el par de la cancha y este viernes tiró dos abajo del par ubicándose entre los 13 mejores del torneo.
Con respecto al número uno del mundo, el inglés Luke Donald, terminó su recorrido con 71 golpes, tras una jornada de altibajos, muchos pares y un doble bogey en el hoyo 2.
El estadounidense Steve Stricker, líder el jueves y quien estuvo a un golpe de la tarjeta más baja de la historia de los majors, se desinfló el viernes con cinco bogeys, aunque al final cerró con un total de -3, gracias a su gran primera jornada, lo que le deja con vida.
Luis Rojas
lrojas@larepublica.net
Jason Dufner y Keegan Bradley líderes; Tiger Woods para la casa
En lo que fue uno de los torneos más desastrosos de su carrera golfística, Tiger Woods se despidió el viernes del PGA Championship que se juega en Atlanta, sin gloria, y con la pena de haber jugado como uno de tantos competidores, excesivamente lejano del Woods de la leyenda.
El “Tigre”, que el jueves golpeó siete arriba del par, el viernes tuvo otro mal día sumando tres golpes más y terminando su participación con 150 golpes y un +10 que en nada rima con su historial.
Tuvo de nuevo Tiger dos dobles bogeys en su recorrido; en total cinco en dos días, algo que el estadounidense no lo imaginó ni en su peor pesadilla.
Los líderes son los estadounidenses Jason Dufner y Keegan Bradley, ambos con -5, y este último con la mejor jornada del día al cerrar con seis golpes por debajo del par de la cancha.
Para el joven ganador del US Open, Rory McIlroy, la lesión en su mano derecha le siguió pasando la factura y cerró con tres arriba del par de la cancha, con un bogey triple en el hoyo 17, aunque al menos le bastó para pasar el corte, que estuvo en +4, y seguir en competencia.
La alegría para Latinoamérica la da el venezolano Jhonattan Vegas, quien el primer día igualó el par de la cancha y este viernes tiró dos abajo del par ubicándose entre los 13 mejores del torneo.
Con respecto al número uno del mundo, el inglés Luke Donald, terminó su recorrido con 71 golpes, tras una jornada de altibajos, muchos pares y un doble bogey en el hoyo 2.
El estadounidense Steve Stricker, líder el jueves y quien estuvo a un golpe de la tarjeta más baja de la historia de los majors, se desinfló el viernes con cinco bogeys, aunque al final cerró con un total de -3, gracias a su gran primera jornada, lo que le deja con vida.
Luis Rojas
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