"Golpe mortal para el inversionista"
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Lunes 05 abril, 2010
“Golpe mortal para el inversionista”
Una nueva medida impulsada por el Banco Central para imponer un encaje a fondos de inversión podría afectar gravemente a la industria
Fabio Rosch
frosch@larepublica.net
Los participantes en fondos de inversión y la industria en general podrían recibir un golpe en sus rendimientos e inversiones de aprobarse una propuesta del Banco Central de Costa Rica (BCCR) para encajar estas figuras a través de una modificación de las Regulaciones de Política Monetaria.
El primer impacto sería que los inversionistas solo podrían invertir el 85% de sus recursos, por lo que no aprovecharían al máximo sus oportunidades de inversión, ya que tendrían que depositar un porcentaje en el BCCR.
Cabe resaltar que el monto que se deja de encaje no gana intereses, de ahí el segundo golpe, ya que dejarían de percibir una tasa de rendimiento sobre ese dinero.
“Sería un golpe mortal para el inversionista y para el desarrollo del mercado de capitales ya que los fondos son indispensables para este mercado y si aquí nos quedamos sin fondos de inversión, que se han venido desarrollando a duras penas, el futuro que le esperaría al mercado de capitales es muy oscuro”, expresó Lanzo Luconi, presidente de la Cámara Nacional de Sociedades de Fondos de Inversión.
Lo que planea el Banco Central es incluir las operaciones de captación de los fondos de inversión de dinero, ingreso y crecimiento como operaciones que puedan someterse a requerimiento de encaje y aplicarles esta obligación de forma gradual.
La tasa de encaje se aplicaría gradualmente en un periodo de cinco meses empezando en un 3% en agosto de este año e incrementaría mes a mes para terminar en un 15% en diciembre.
La incongruencia de esta medida es el hecho de que los fondos de inversión no prestan dinero ni participan en actividad de intermediación financiera, sino que son aportes privados de inversionistas que buscan rendimientos mayores a las tasas pagadas por depositar el dinero.
“Los fondos de inversión son inversionistas no intermediarios financieros, entonces nos inclinamos a pensar que hay un error del BCCR pues se están confundiendo las figuras que deben ser y no sujetas de encaje”, añadió Luconi.
Según un comunicado del BCCR estos instrumentos han favorecido un cambio en las preferencias de los agentes económicos, trasladándose de activos financieros encajados hacia otros no encajados, lo que reduce el control de la liquidez por parte del ente y crea distorsiones en el mercado financiero.
“Este encaje no tiene razón de ser y no está en función de fortalecer la seguridad ni de los inversionistas ni de las SAFI (Sociedades Administradoras de Fondos de Inversión), ni de promover la eficiencia en la administración de los recursos. Una norma de este tipo lo que va a hacer es entorpecer la gestión de los fondos y va a pesar sobre la reputación de Costa Rica y de nuestro mercado de capitales”, comentó Adriana Rodríguez, analista de ACOBO.
El encaje es una herramienta de la política monetaria utilizada por el BCCR que se impone a entidades que realizan la captación y préstamo de recursos, para tener cierto control sobre la cantidad de dinero en el mercado y mantener un porcentaje de garantía.
Con el fin de lograr un mejor control de la inflación, el Banco Central consideró necesario ordenar la administración de la liquidez de la economía, para facilitar el funcionamiento del mecanismo de transmisión de la política monetaria. Con la medida el ente procura mejorar el control monetario, explicó Roy González, gerente general del BCCR.
Una nueva medida impulsada por el Banco Central para imponer un encaje a fondos de inversión podría afectar gravemente a la industria
Fabio Rosch
frosch@larepublica.net
Los participantes en fondos de inversión y la industria en general podrían recibir un golpe en sus rendimientos e inversiones de aprobarse una propuesta del Banco Central de Costa Rica (BCCR) para encajar estas figuras a través de una modificación de las Regulaciones de Política Monetaria.
El primer impacto sería que los inversionistas solo podrían invertir el 85% de sus recursos, por lo que no aprovecharían al máximo sus oportunidades de inversión, ya que tendrían que depositar un porcentaje en el BCCR.
Cabe resaltar que el monto que se deja de encaje no gana intereses, de ahí el segundo golpe, ya que dejarían de percibir una tasa de rendimiento sobre ese dinero.
“Sería un golpe mortal para el inversionista y para el desarrollo del mercado de capitales ya que los fondos son indispensables para este mercado y si aquí nos quedamos sin fondos de inversión, que se han venido desarrollando a duras penas, el futuro que le esperaría al mercado de capitales es muy oscuro”, expresó Lanzo Luconi, presidente de la Cámara Nacional de Sociedades de Fondos de Inversión.
Lo que planea el Banco Central es incluir las operaciones de captación de los fondos de inversión de dinero, ingreso y crecimiento como operaciones que puedan someterse a requerimiento de encaje y aplicarles esta obligación de forma gradual.
La tasa de encaje se aplicaría gradualmente en un periodo de cinco meses empezando en un 3% en agosto de este año e incrementaría mes a mes para terminar en un 15% en diciembre.
La incongruencia de esta medida es el hecho de que los fondos de inversión no prestan dinero ni participan en actividad de intermediación financiera, sino que son aportes privados de inversionistas que buscan rendimientos mayores a las tasas pagadas por depositar el dinero.
“Los fondos de inversión son inversionistas no intermediarios financieros, entonces nos inclinamos a pensar que hay un error del BCCR pues se están confundiendo las figuras que deben ser y no sujetas de encaje”, añadió Luconi.
Según un comunicado del BCCR estos instrumentos han favorecido un cambio en las preferencias de los agentes económicos, trasladándose de activos financieros encajados hacia otros no encajados, lo que reduce el control de la liquidez por parte del ente y crea distorsiones en el mercado financiero.
“Este encaje no tiene razón de ser y no está en función de fortalecer la seguridad ni de los inversionistas ni de las SAFI (Sociedades Administradoras de Fondos de Inversión), ni de promover la eficiencia en la administración de los recursos. Una norma de este tipo lo que va a hacer es entorpecer la gestión de los fondos y va a pesar sobre la reputación de Costa Rica y de nuestro mercado de capitales”, comentó Adriana Rodríguez, analista de ACOBO.
El encaje es una herramienta de la política monetaria utilizada por el BCCR que se impone a entidades que realizan la captación y préstamo de recursos, para tener cierto control sobre la cantidad de dinero en el mercado y mantener un porcentaje de garantía.
Con el fin de lograr un mejor control de la inflación, el Banco Central consideró necesario ordenar la administración de la liquidez de la economía, para facilitar el funcionamiento del mecanismo de transmisión de la política monetaria. Con la medida el ente procura mejorar el control monetario, explicó Roy González, gerente general del BCCR.