Final incierta
| Sábado 01 agosto, 2009
Final incierta
Doña Vilma Ibarra, en su columna, escribió un artículo titulado ”Elecciones 2010”, en el que mezcló la coyuntura político-electoral y una final de fútbol. Según su comprensión, doña Vilma dice que estamos ante una final entre PLN y PAC. Con el sincero reconocimiento que tengo por los conocimientos políticos de doña Vilma, debo discrepar de sus conocimientos futbolísticos, ya que confunde las pretemporadas que concluyeron el PLN y el PAC, que son tan solo procesos de preparación internos sin efecto clasificatorio, con semifinales, que sí tienen tales efectos.
Lo que el PLN y el PAC acaban de definir es solo su alineación. El campeonato no ha empezado como para asegurar cuáles serán los equipos finalistas en 2010.
En el fútbol y en la política, lo único cierto es lo que ya pasó. Si no que lo diga el Saprissa, a quien todos dábamos como hexacampeón. O que lo diga don Johnny Araya, a quien las encuestas, salvo las últimas, lo daban como ganador.
Doña Vilma ya excluyó a los demás equipos, sin tener en cuenta las complejas variantes que se dan a lo largo de un campeonato de fútbol o de una campaña electoral.
No se pregunta doña Vilma qué pasaría si don Rafael Angel Calderón es declarado inocente de los cargos que se le imputan. O cuál será el desempeño de un equipo nuevo, como el Alianza Patriótica, si decide alinear a un Figueres, en este caso a don Mariano. Doña Vilma, tan creyente en las encuestas, ignora la más reciente de UNIMER, en el sentido de que aún el 54% de los electores no ha tomado ninguna decisión para febrero próximo.
Debo suponer que, para presagiar tan temprano cuáles equipos ocuparán el primero y el segundo lugar, parte de dos espejismos que, a fuerza de creérselos, tratan de pasar como verdad política.
Estos espejismos son el resultado de las elecciones de 2006, en donde el PAC ganó el subcampeonato con una alineación facilitada coyunturalmente por el PUSC, así como el resultado del referéndum del TLC, que se ha querido interpretar que los votos del no, fueron votos del PAC. Craso error.
No debería estar tan segura, desde ahora, cuáles equipos van a ocupar los puestos de honor, por ejemplo, en las elecciones para alcaldes el PLN ocupó el primer lugar y el PUSC el segundo, con grandes diferencias entre ellos e insalvables diferencias frente a los demás, incluyendo al PAC.
Menos aún cuando en esta pretemporada, mientras el PAC logró una votación menor a los 24 mil electores, el PUSC en distritales llevó a votar más de 100 mil personas y que Berrocal, tercero y último en la liza del PLN, recibió casi tantos votos como don Ottón en el PAC.
No creo que se tengan aún los elementos para saber quiénes ganarán oro y plata en este torneo electoral. Aunque el PLN ha hecho la mejor pretemporada, hay equipos que suben su curva de rendimiento a la hora buena, en tanto que otros, que venían muy bien, se derrumban.
* Gerardo Vargas Rojas
Doña Vilma Ibarra, en su columna, escribió un artículo titulado ”Elecciones 2010”, en el que mezcló la coyuntura político-electoral y una final de fútbol. Según su comprensión, doña Vilma dice que estamos ante una final entre PLN y PAC. Con el sincero reconocimiento que tengo por los conocimientos políticos de doña Vilma, debo discrepar de sus conocimientos futbolísticos, ya que confunde las pretemporadas que concluyeron el PLN y el PAC, que son tan solo procesos de preparación internos sin efecto clasificatorio, con semifinales, que sí tienen tales efectos.
Lo que el PLN y el PAC acaban de definir es solo su alineación. El campeonato no ha empezado como para asegurar cuáles serán los equipos finalistas en 2010.
En el fútbol y en la política, lo único cierto es lo que ya pasó. Si no que lo diga el Saprissa, a quien todos dábamos como hexacampeón. O que lo diga don Johnny Araya, a quien las encuestas, salvo las últimas, lo daban como ganador.
Doña Vilma ya excluyó a los demás equipos, sin tener en cuenta las complejas variantes que se dan a lo largo de un campeonato de fútbol o de una campaña electoral.
No se pregunta doña Vilma qué pasaría si don Rafael Angel Calderón es declarado inocente de los cargos que se le imputan. O cuál será el desempeño de un equipo nuevo, como el Alianza Patriótica, si decide alinear a un Figueres, en este caso a don Mariano. Doña Vilma, tan creyente en las encuestas, ignora la más reciente de UNIMER, en el sentido de que aún el 54% de los electores no ha tomado ninguna decisión para febrero próximo.
Debo suponer que, para presagiar tan temprano cuáles equipos ocuparán el primero y el segundo lugar, parte de dos espejismos que, a fuerza de creérselos, tratan de pasar como verdad política.
Estos espejismos son el resultado de las elecciones de 2006, en donde el PAC ganó el subcampeonato con una alineación facilitada coyunturalmente por el PUSC, así como el resultado del referéndum del TLC, que se ha querido interpretar que los votos del no, fueron votos del PAC. Craso error.
No debería estar tan segura, desde ahora, cuáles equipos van a ocupar los puestos de honor, por ejemplo, en las elecciones para alcaldes el PLN ocupó el primer lugar y el PUSC el segundo, con grandes diferencias entre ellos e insalvables diferencias frente a los demás, incluyendo al PAC.
Menos aún cuando en esta pretemporada, mientras el PAC logró una votación menor a los 24 mil electores, el PUSC en distritales llevó a votar más de 100 mil personas y que Berrocal, tercero y último en la liza del PLN, recibió casi tantos votos como don Ottón en el PAC.
No creo que se tengan aún los elementos para saber quiénes ganarán oro y plata en este torneo electoral. Aunque el PLN ha hecho la mejor pretemporada, hay equipos que suben su curva de rendimiento a la hora buena, en tanto que otros, que venían muy bien, se derrumban.
* Gerardo Vargas Rojas