Faltan acciones para generar empleo
Mientras el flagelo del desempleo crece, varias instituciones mantienen superávit y dinero ocioso que no han ejecutado
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Lunes 28 septiembre, 2009
Aunque la crisis económica pareciera haber tocado fondo y se vislumbran los llamados brotes verdes, signos de activación de las economías al menos en ciertos rubros, Costa Rica aún sufre y sufrirá los efectos. Las consecuencias en el país se ven principalmente en la desocupación. El empleo cayó en un 2,3% durante los primeros siete meses de este año pero se estima que la tasa de desempleo se dispararía a un 7,9% de acuerdo con la Organización Internacional del trabajo, a pesar de que algunos sectores han mantenido un repunte como actividades inmobiliarias, empresariales, de alquiler y en la educación. La situación evidencia una falta de acción gubernamental para incentivar a los sectores que más han sufrido por la crisis, como el manufacturero y el agrícola, y para generar empleo en forma directa. No hay estrategias claras. Mientras pequeños y medianos empresarios no pueden obtener préstamos adecuados a sus capacidades de pago y en muchos casos se ven obligados a cerrar o despedir empleados, dineros que se destinarían a ayudarles a salir a flote se ven paralizados por manejos irregulares en la ley que debe aprobarse para ello porque en las listas de beneficiarios se infiltraron nombres o empresas muy solventes que nada tenían que hacer ahí. Por otra parte, hay instituciones del Estado que mantienen superávit y recursos económicos ociosos en algunas que no ejecutaron sus presupuestos. No se ha realizado desde ellas obra muy necesaria que podría haber generado empleo directo. Aunque los agricultores sufren no solo las consecuencias de la crisis económica sino las del cambio climático, las ayudas tampoco llegan a ellos en general. Una situación bastante incomprensible para muchos, en la que se suman inadecuados manejos, posibles irregularidades y hasta incapacidad, lo cual llega a producir un espeso ambiente que perjudica al país en vez de generar las urgentes soluciones. Mientras tanto, el flagelo del desempleo aumenta. Es necesario que la población cuente con el apoyo de un acertado manejo gubernamental de la situación a fin de producir un cambio y activar nuevamente a los más necesitados de los sectores antes mencionados y del comercio y el turismo.