El Plan de Reactivación Económica y la Reforma Fiscal

Mucho se ha dicho de lo que se necesita que la reforma fiscal en corriente legislativa deba recaudar, sin embargo, es importante cuestionarnos; ¿será suficiente?, ¿se logra el equilibrio en las finanzas públicas?

Debemos de tener claro que a pesar de ampliar el Impuesto de Ventas y convertirlo en IVA, incluyendo así todos los servicios y la canasta básica, la Reforma Fiscal sigue dejando algunos huecos, así como el mantenimiento de exoneraciones a cooperativas, asociaciones solidaritas, iglesias, entre otros.

La expectativa de recaudación depende de que los actuales factores de producción y actividad económica se mantengan, sin embargo, la posibilidad de una eminente crisis, la expectativa de la reforma fiscal por sí misma, la subida reciente en las tasas de interés y el tipo de cambio estan provocando una desaceleración en la economía y en el consumidor, quien está siendo más cauteloso con sus gastos y sus objetivos de inversión en el corto y largo plazo.

Esta contracción de la economía podría provocar que no se cumplan con los objetivos de recaudación de la reforma fiscal, razón por la cual el gobierno anunció la semana pasada un plan de reactivación económica que le permita mantener estable el crecimiento económico.

Este plan consiste en la intervención en varios sectores, tal como en la industria de la construcción, donde agilizaran y simplificaran permisos, planos y trámites en SETENA, financiando obra pública con créditos aún no utilizados, así como el impulso de esquemas público-privado ; en el sector PYME con acompañamiento y re-impulso en la colocación de los fondos de SBD, y el fomento de la formalidad con una escala tarifaria especial para el pago de impuestos dentro de las PYMES, esto a partir de su primer año de operación (incluido en el proyecto 20.580).

En el sector turismo, a través de un programa de Gestión Integral, para potenciar destinos y beneficiar al menos a 800 empresas de hospedaje con 40 o menos habitaciones; en el sector exportador con programas especiales para acelerar empresas lideradas por mujeres, capital semilla para promover la diversificación y el incremento del valor agregado, también modelos de cooperación empresarial para la búsqueda de soluciones innovadoras para empresas multinacionales.

Todos estos objetivos de intervención en estos sectores son necesarios, pero no pueden quedarse en el papel, y en la mera posibilidad; debemos pensar que la reactivación de la economía es necesaria para que se dé el círculo virtuoso que genera más consumo y más utilidades para el comercio, más pago de impuestos y por lo tanto mayor recaudación.

La consecución de los objetivos de recaudación del proyecto de Ley de Fortalecimiento de la Finanzas Públicas, depende mucho de que la economía tenga la capacidad de producir la riqueza suficiente, razón por la cual hay que prestar especial atención y seguimiento a los efectos del plan de reactivación económica.

Marcia Montes 

Gerente de BPO 

Price WaterHouse Coopers (PwC)

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