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Miércoles, 11 de diciembre de 2024



NOTA DE TANO


El paso de Row de Santos al Saprissa no tuvo truenos

Gaetano Pandolfo gpandolfo@larepublica.net | Jueves 18 enero, 2024


¿Por qué Randall Row no copió el ejemplo de uno de sus mentores, Johnny Chávez, maestro de grata memoria, cuando éste rechazó la dirección técnica del Alajuelense, porque estaba comprometido con la UCR?
¿Por qué Randall Row no copió el ejemplo de uno de sus mentores, Johnny Chávez, maestro de grata memoria, cuando éste rechazó la dirección técnica del Alajuelense, porque estaba comprometido con la UCR?


El paso de Randall Row de director técnico del Santos, a asesor técnico de Vladimir Quesada en el Saprissa se llevó a cabo sin tambores. Hizo más bulla una luz de bengala durante los fuegos artificiales de la Noche Buena.

El señor Row es un caballero; hicimos buena amistad en el largo periplo por varios estadios suramericanos, cuando la Selección Nacional dirigida por Héctor Núñez jugó varios partidos de fogueo, preparando la eliminatoria mundialista a Estados Unidos 1994.

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Randall Row era pieza titular en la formación del “Pichón”, porque el uruguayo lo consideró siempre como el mejor defensor del equipo.

Y recalcó lo de caballero, porque estoy seguro de que el hoy asistente técnico del Saprissa, posición que ha ocupado en temporadas anteriores, no dejó “tirado” al Santos, para marcharse al Saprissa, pero como el traspaso o la negociación no trascendió públicamente, se pueden tejer perfectamente malas interpretaciones.

De este paso de Randall, de técnico guapileño a asistente de Vladimir Quesada, solo escuché un comentario de Víctor Cordero, gerente santista, cuando manifestó públicamente que ellos no le cerrarán las puertas, suponemos que de progresar o buscar nuevas rutas, a nadie.

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¿Cómo se hizo la negociación; cómo se acordó el traspaso; quiénes intervinieron en el movimiento?

Cómo decía el recordado Parmenio Medina en “La Patada”, pregúntenle a la abuela de Manuel.

Si fue un convenio pacífico, donde todas las partes estuvieron de acuerdo, empezando por la dirigencia del Santos, no hay nada que objetarle al traspaso.

Pero quedó flotando en el aire, la posibilidad de que no todas las partes aprobaron el paso de Row al Saprissa, tomando en cuenta de que el técnico dejó a Santos en mitad de la tabla, con un arranque muy promisorio. Hoy, sin Randall en el banquillo, los guapileños suman dos derrotas seguidas en el Clausura.

¿Por qué Randall Row no copió el ejemplo de uno de sus mentores, Johnny Chávez, maestro de grata memoria, cuando éste rechazó la dirección técnica del Alajuelense, porque estaba comprometido con la UCR?

¿No tenía mi amigo Row, ningún compromiso laboral e incluso ético con el Santos, que se le hizo tan fácil viajar al Saprissa?

Cuando las cosas no se hacen públicas, se exponen a interpretaciones positivas o negativas, de manera que este tema de Randall Row, queda calificado como interrogante.

gpandolfo@larepublica.net







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