EE.UU. prorrogaría subsidios a desempleo

El gobierno de Obama, apuntalando los esfuerzos sostenidos de los demócratas por prolongar los beneficios de emergencia por desempleo, advirtió hoy que su vencimiento podría costar a los Estados Unidos unos 240.000 puestos de trabajo en 2014.
Alrededor de 1,3 millón de trabajadores perderían de inmediato los beneficios si se permite que el 28 de diciembre venza el programa de emergencia, extendido repetidas veces desde su creación en 2008, según el informe elaborado por el Consejo de Asesores Económicos del presidente Barack Obama y el Departamento de Trabajo.
Durante 2014, dejarían de percibir el beneficio otros 3,6 millones de personas.
“En ningún caso anterior el Congreso permitió que los beneficios especiales prorrogados vencieran cuando el índice de desempleo eran tan alto como hoy”, expresa el informe, haciendo referencia a la tasa actual de desempleo de 7,3%.
Obama exhortó a los congresistas a sancionar una prolongación de los beneficios antes del receso por las fiestas de fin de año, algo que los republicanos de la Cámara de Representantes, según expresan, son reacios a hacer más de cuatro años después de que EE.UU. saliera de la peor recesión de la era posterior a la II Guerra Mundial.
En un momento, el programa brindaba 99 semanas de beneficios: 26 semanas de beneficios estaduales y hasta 73 semanas de beneficios federales. Fue prorrogado once veces desde que lo implementó en medio de la crisis financiera el entonces presidente George W. Bush.
Unos 23,9 millones de personas recibieron los subsidios desde 2008, muestra el informe.
El análisis del gobierno calculó el efecto de extender el programa por todo un año, manteniendo las normas actuales del programa y comparando con lo que ocurriría si se permitiera que vencieran los beneficios.
Poner fin al subsidio especial tendría el efecto de reducir los ingresos de los que buscan empleo, haciendo caer el consumo. La consiguiente reducción de la demanda costaría 240 mil puestos de trabajo, asegura el informe.
La duración de la asistencia adicional se fue reduciendo con las sucesivas renovaciones y ahora tiene una duración máxima de 73 semanas, aunque en la mayoría de los estados el promedio es más bajo.
“Estas fueron prórrogas extraordinarias, y la posición republicana siempre ha sido que tenemos que volver a la normalidad en algún momento”, declaró el representante republicano de Oklahoma Tom Cole en rueda de prensa el 3 de diciembre, según Associated Press.
Obama, cuyos asesores económicos comenzaron a pedir una extensión el mes pasado, tocó el tema en las declaraciones que formuló ayer.
“La época navideña no es un momento apropiado para que el Congreso les diga a más de un millón de estadounidenses que han perdido su seguro de desempleo, que es lo que ocurrirá si el Congreso no actúa antes de salir de vacaciones por las fiestas”, declaró Obama en un discurso sobre la desigualdad de ingresos en los Estados Unidos.

Bloomberg