Diplomacia sustenta el TLC con China
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Lunes 02 febrero, 2009
Pese a que el intercambio bilateral no crecerá mucho, un tratado de libre comercio podría estimular más inversión china
TLC con Pekín es más diplomático que comercial
• Larga distancia y alto costo de penetrar el mercado chino son obstáculos a las exportaciones nacionales
Ernesto José Villalobos
evillalobos@larepublica.net
Dentro de las 50 empresas más conocidas en el mercado internacional de cueros de vaca, solamente figura una firma costarricense.
Ninguna empresa nacional aparece en el listado de las que ofrecen madera para exportación.
Sin embargo, ambos productos son parte de los seis mencionados por el Ministerio de Comercio Exterior (Comex) que tendrían mayores posibilidades de éxito tras una eventual apertura comercial con China.
Si bien, efectivamente algunas de las grandes industrias compradoras de ambos bienes están localizadas en China, lo que no está nada claro es la posibilidad real de que los productores nacionales sean competitivos en ese enorme mercado.
El ejemplo refuerza algunas de las dudas que ha generado el anuncio, y más aún, el inicio de las negociaciones para la firma de un Tratado de Libre Comercio (TLC), con el gigante asiático.
Lo que sí parece tangible es el interés que han evidenciado ambas partes en convertirse en socios comerciales, a través del capital chino que busca opciones de ser puesto a trabajar utilizando a Costa Rica como intermediario.
Uno de los argumentos que ha esgrimido con mayor frecuencia Comex para justificar la apertura, es el salto que dio China en la lista de los socios comerciales nacionales, hasta convertirse en el segundo de ellos, apenas por debajo de Estados Unidos.
Ese posicionamiento obedece al golpe de timón que dio el principal exportador de bienes desde suelo costarricense, Intel, al dirigir toda su producción hacia las ensambladoras chinas.
“Hasta la fecha no tenemos claro cuáles son los verdaderos potenciales que Costa Rica tiene en China, y lo que sabemos de la producción china que podría llegar al país es igual de escaso. Decir que el principal motivo para abrirnos comercialmente con esa potencia es el lugar en el que se ubica en nuestro ranking de destinos exportadores sería irresponsable, pues eso bien podría ser temporal”, explicó Manuel González, ex ministro de Comercio Exterior.
Antes de rubricar una apertura comercial, los expertos señalan que la información basada en la inteligencia de mercados es fundamental para tomar decisiones sólidas.
El señalamiento de oportunidades para el comercio con China ha sido señalado por diversos sectores como algo “antojadizo y cargado de una influencia política que podría resultar peligrosa”.
“El Estudio de Factibilidad que presentó Comex indica cosas tan ilusas como que existen oportunidades para exportar corcho; a cualquier empresario serio le tomaría cinco minutos deducir que la explotación del árbol que produce el corcho, toma 40 años”, advirtió Juan María González, presidente de la Cámara de Industrias de Costa Rica (CICR).
Otro tema que ha sido valorado al analizar la posible relación con ese país oriental, es la opción de que Costa Rica se convierta en destino de buena parte de capitales chinos; ya sea para respaldar proyectos locales, o bien para vincularse a otras naciones o regiones que ya tienen el camino abierto para intercambiar con los actores costarricenses.
Lo que ofrece en este momento el país en materia de ingreso y permanencia, o bien re-direccionamiento de inversión extranjera, es insuficiente para propiciar que ese intercambio sea seguro.
“Para Costa Rica es crucial consolidar una base de información que incluya todos los detalles que pudieran interesar a los inversionistas extranjeros; un buen ejemplo de ello es el sistema “Al-invest” —que ideó y opera en la Unión Europea—, al igual que en cualquier relación de negocios, la información es crucial y no la tenemos disponible”, argumentó Marco Vinicio Ruiz, ministro de Comercio Exterior.
En lo que respecta a la inversión, las versiones tampoco se han hecho esperar pues estas se apuntan a que China usaría al país como puente hacia el mercado regional.
TLC con Pekín es más diplomático que comercial
• Larga distancia y alto costo de penetrar el mercado chino son obstáculos a las exportaciones nacionales
Ernesto José Villalobos
evillalobos@larepublica.net
Dentro de las 50 empresas más conocidas en el mercado internacional de cueros de vaca, solamente figura una firma costarricense.
Ninguna empresa nacional aparece en el listado de las que ofrecen madera para exportación.
Sin embargo, ambos productos son parte de los seis mencionados por el Ministerio de Comercio Exterior (Comex) que tendrían mayores posibilidades de éxito tras una eventual apertura comercial con China.
Si bien, efectivamente algunas de las grandes industrias compradoras de ambos bienes están localizadas en China, lo que no está nada claro es la posibilidad real de que los productores nacionales sean competitivos en ese enorme mercado.
El ejemplo refuerza algunas de las dudas que ha generado el anuncio, y más aún, el inicio de las negociaciones para la firma de un Tratado de Libre Comercio (TLC), con el gigante asiático.
Lo que sí parece tangible es el interés que han evidenciado ambas partes en convertirse en socios comerciales, a través del capital chino que busca opciones de ser puesto a trabajar utilizando a Costa Rica como intermediario.
Uno de los argumentos que ha esgrimido con mayor frecuencia Comex para justificar la apertura, es el salto que dio China en la lista de los socios comerciales nacionales, hasta convertirse en el segundo de ellos, apenas por debajo de Estados Unidos.
Ese posicionamiento obedece al golpe de timón que dio el principal exportador de bienes desde suelo costarricense, Intel, al dirigir toda su producción hacia las ensambladoras chinas.
“Hasta la fecha no tenemos claro cuáles son los verdaderos potenciales que Costa Rica tiene en China, y lo que sabemos de la producción china que podría llegar al país es igual de escaso. Decir que el principal motivo para abrirnos comercialmente con esa potencia es el lugar en el que se ubica en nuestro ranking de destinos exportadores sería irresponsable, pues eso bien podría ser temporal”, explicó Manuel González, ex ministro de Comercio Exterior.
Antes de rubricar una apertura comercial, los expertos señalan que la información basada en la inteligencia de mercados es fundamental para tomar decisiones sólidas.
El señalamiento de oportunidades para el comercio con China ha sido señalado por diversos sectores como algo “antojadizo y cargado de una influencia política que podría resultar peligrosa”.
“El Estudio de Factibilidad que presentó Comex indica cosas tan ilusas como que existen oportunidades para exportar corcho; a cualquier empresario serio le tomaría cinco minutos deducir que la explotación del árbol que produce el corcho, toma 40 años”, advirtió Juan María González, presidente de la Cámara de Industrias de Costa Rica (CICR).
Otro tema que ha sido valorado al analizar la posible relación con ese país oriental, es la opción de que Costa Rica se convierta en destino de buena parte de capitales chinos; ya sea para respaldar proyectos locales, o bien para vincularse a otras naciones o regiones que ya tienen el camino abierto para intercambiar con los actores costarricenses.
Lo que ofrece en este momento el país en materia de ingreso y permanencia, o bien re-direccionamiento de inversión extranjera, es insuficiente para propiciar que ese intercambio sea seguro.
“Para Costa Rica es crucial consolidar una base de información que incluya todos los detalles que pudieran interesar a los inversionistas extranjeros; un buen ejemplo de ello es el sistema “Al-invest” —que ideó y opera en la Unión Europea—, al igual que en cualquier relación de negocios, la información es crucial y no la tenemos disponible”, argumentó Marco Vinicio Ruiz, ministro de Comercio Exterior.
En lo que respecta a la inversión, las versiones tampoco se han hecho esperar pues estas se apuntan a que China usaría al país como puente hacia el mercado regional.