Del cielo llegó la victoria

Kendall Waston cazó un balón en las alturas y salvó los tres puntos, en noche deplorable por agresiones verbales

En un partido plagado de suspensiones por los insultos de un sector de la barra saprissista hacia el arquero chuchequero Víctor Bolívar, el Saprissa pudo sumar de tres y vencer a Puntarenas 2 a 1, gracias al gol en tiempo de descuento de Kendall Waston.

El partido se puede dividir en lo deportivo y lo humano, en lo primero vimos un juego interesante, con un Saprissa de altibajos y un Puntarenas que mereció mejor suerte, pero que al final descuidó lo que tanto había vigilado: la cabeza de Waston.
En lo humano, el encuentro debió haberse suspendido, ya que el árbitro Rafael Vega lo paró en dos ocasiones para advertir que si seguían los insultos hacia Bolívar, se iba a suspender o a sacar al público. No obstante, al final el grupo de insociables se salieron con la suya, terminaron insultando a todo galillo, y hasta se vieron beneficiados porque fue en el tiempo de descuento que se dio por las suspensiones, en que su equipo logró el gol de la victoria.
Con Mauricio Castillo y Waston en la titular, Saprissa empezó bien. Control, juego dinámico, llegadas y Kendall ganándole la partida a Darío Delgado, en sus duelos aéreos. Aparte de eso, gol a los 6 minutos; sorpresivo desborde de Yeltsin Tejeda por la atacante izquierda, centro y David Ramírez se adelanta a todo y a todos y anota. Después vino una de las suspensiones, y luego Puntarenas empezó a equilibrar el juego. Al 33’, Diego Brenes saca un excelente servicio al área morada, Colindres le gana la partida a un muy lento Waston, y se la aplica con vaselina a Grant decretando el empate.
La complementaria fue de alternativas. Saprissa tuvo para aumentar en acciones de Russel, Smith y Castillo, que la pegó en el horizontal al 73’.
Y llegó el gol. Minuto 92’, Castillo (lo importante de haberlo mantenido hasta el final) cobra tiro libre, a Waston esta vez no lo acosaron y arranca de atrás y pega un cabezazo imposible para Bolívar, y suficiente para el triunfo morado.

Luis Rojas
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