Creatividad en escena
Carolina Barrantes redaccion@larepublica.net | Miércoles 16 julio, 2008
Creatividad en escena
El italiano Stefano Poda habló con MAGAZINE sobre la ópera “Faust” que se presentará en el Teatro Nacional, y en la que se encarga de la dirección escénica, diseño de escenografía, vestuario y luces
Carolina Barrantes
cbarrantes@larepublica.net
¿Cómo va a ser el montaje de “Faust”?
Yo me encargo de que todo tenga una profunda unidad. La ópera es una forma de arte total, por lo que debe tener una interpretación coherente con su espacio y su tiempo.
“Faust” ofrecerá una ocasión para reflexionar sobre la temática de la humanidad y la búsqueda de una verdad propia.
En cuanto al elenco, estará compuesto por cinco cantantes líricos, el Coro Sinfónico Nacional, de cerca de 50 personas, y contaremos con el acompañamiento de la Orquesta Sinfónica Nacional.
¿En qué se inspiró para hacer la escenografía y el vestuario?
En mi vida he realizado más de 60 óperas, por lo que he enfrentado un proceso de evolución. Este camino me ha llevado a buscar nuevas ideas.
En el caso de Costa Rica llegué por primera vez hace diez años con la ópera “Madama Butterfly”, y comencé a trabajar con un grupo de técnicos y artistas con los que he alcanzado un nivel de profesionalismo y confianza. Esta unión es la que permitirá que la obra tenga un despliegue técnico y de talento muy amplio.
Es la tercera vez que se presenta la obra en el Teatro Nacional.
Mi vinculación artística se inició de la mano de Graciela Moreno, ex directora del Teatro Nacional, y ahora siento que con Jody Steiger (nueva rectora) continúa el legado.
Cada una de mis puestas significa mucho y entrego toda mi inspiración; en el caso de “Faust” es especial, ya que es una de las óperas que más he investigado.
También, es la tercera puesta que hace de “Faust”, ¿qué diferencia hay entre cada uno de los montajes?
Los otros montajes fueron en España y conté con más recursos, pero hay que hacer la diferencia de que eso no implica que fueran mejores. Además, uno como artista cree que el último hijo es el mejor, por lo que se entrega más a la puesta, tanto en tiempo y dedicación como intelectualmente.
¿Cómo considera que ha recibido el público nacional su trabajo?
Es difícil de determinar. Lo que sí tengo seguro es que quien viene a observar mis puestas es porque le gustan. Soy favorecido por el público joven, dinámico y abierto que tiene diferentes intereses, como el teatro, el arte contemporáneo, la filosofía y hasta el cine. Mi lenguaje es muy abierto.
¿Cuáles otros proyectos tiene en la actualidad?
Uno de los principales y del que siento mucho orgullo, es que voy a presentar “Falstaff” de Giuseppe Verdi en España el próximo año. Esta fue una producción del Teatro Nacional, que realicé en julio del año anterior, y será la primera ocasión en que llevo un proyecto costarricense al exterior. También, estoy concentrado en la producción de “Thaïs” de Massenet, para el Teatro Regio de Torino, Italia, que tendrá un DVD, y para la cual me he preparado durante muchos años.
El italiano Stefano Poda habló con MAGAZINE sobre la ópera “Faust” que se presentará en el Teatro Nacional, y en la que se encarga de la dirección escénica, diseño de escenografía, vestuario y luces
Carolina Barrantes
cbarrantes@larepublica.net
¿Cómo va a ser el montaje de “Faust”?
Yo me encargo de que todo tenga una profunda unidad. La ópera es una forma de arte total, por lo que debe tener una interpretación coherente con su espacio y su tiempo.
“Faust” ofrecerá una ocasión para reflexionar sobre la temática de la humanidad y la búsqueda de una verdad propia.
En cuanto al elenco, estará compuesto por cinco cantantes líricos, el Coro Sinfónico Nacional, de cerca de 50 personas, y contaremos con el acompañamiento de la Orquesta Sinfónica Nacional.
¿En qué se inspiró para hacer la escenografía y el vestuario?
En mi vida he realizado más de 60 óperas, por lo que he enfrentado un proceso de evolución. Este camino me ha llevado a buscar nuevas ideas.
En el caso de Costa Rica llegué por primera vez hace diez años con la ópera “Madama Butterfly”, y comencé a trabajar con un grupo de técnicos y artistas con los que he alcanzado un nivel de profesionalismo y confianza. Esta unión es la que permitirá que la obra tenga un despliegue técnico y de talento muy amplio.
Es la tercera vez que se presenta la obra en el Teatro Nacional.
Mi vinculación artística se inició de la mano de Graciela Moreno, ex directora del Teatro Nacional, y ahora siento que con Jody Steiger (nueva rectora) continúa el legado.
Cada una de mis puestas significa mucho y entrego toda mi inspiración; en el caso de “Faust” es especial, ya que es una de las óperas que más he investigado.
También, es la tercera puesta que hace de “Faust”, ¿qué diferencia hay entre cada uno de los montajes?
Los otros montajes fueron en España y conté con más recursos, pero hay que hacer la diferencia de que eso no implica que fueran mejores. Además, uno como artista cree que el último hijo es el mejor, por lo que se entrega más a la puesta, tanto en tiempo y dedicación como intelectualmente.
¿Cómo considera que ha recibido el público nacional su trabajo?
Es difícil de determinar. Lo que sí tengo seguro es que quien viene a observar mis puestas es porque le gustan. Soy favorecido por el público joven, dinámico y abierto que tiene diferentes intereses, como el teatro, el arte contemporáneo, la filosofía y hasta el cine. Mi lenguaje es muy abierto.
¿Cuáles otros proyectos tiene en la actualidad?
Uno de los principales y del que siento mucho orgullo, es que voy a presentar “Falstaff” de Giuseppe Verdi en España el próximo año. Esta fue una producción del Teatro Nacional, que realicé en julio del año anterior, y será la primera ocasión en que llevo un proyecto costarricense al exterior. También, estoy concentrado en la producción de “Thaïs” de Massenet, para el Teatro Regio de Torino, Italia, que tendrá un DVD, y para la cual me he preparado durante muchos años.