¿Costa Rica caro? No para los canadienses

Comprar una casa en alguna zona turística costarricense es una opción atractiva, asegura un artículo publicado esta semana en el Globe and Mail, diario canadiense con circulación nacional.
Se trata de la demanda de parte de los pensionados, así como de la gente que está generando ingresos mediante el arrendamiento de una casa costarricense, con los cuales viviría acá, una vez que se pensione.
El mercado se concentra en los residenciales ubicados en las zonas cercanas a las playas, con precios que van de $200 mil para arriba —el cual se considera un monto atractivo, dice el artículo—.
Otro tipo de comprador es el digitalizado, en el sentido de que puede vivir acá de manera permanente, haciendo el trabajo de forma remota.
En cuanto a los gastos, el canadiense residente en Costa Rica puede vivir confortablemente con un monto de $1.500 a $2 mil al mes, de acuerdo con el informe.