Copa del Mundo recurre a inmigrantes haitianos por mano de obra

Una de las compañía que está construyendo uno de los 12 estadios para la Copa del Mundo en Brasil el año próximo ha reclutado trabajadores haitianos luego de que las obras se atrasaron meses respecto de lo planeado.

La firma constructora Mendes Junior ha llamado más de 100 trabajadores del país haitiano para que ayuden a completar el estadio Arena Pantanal en Cuiabá, según Mauricio Guimarães, secretario especial de la Copa del Mundo para el estado de Mato Grosso.

Aun con la ayuda adicional, el estadio, donde todavía deben instalarse los asientos y cuyo techo sigue sin terminar, no cumplirá con el plazo del 31 de diciembre sino que lo excederá en al menos dos meses, indicó el funcionario.

Haití es el país más pobre del continente americano y fue devastado por un terremoto en 2010, cuando se perdieron miles de vidas y más de un millón de personas quedaron desplazadas de sus hogares.

Cuiabá, en Brasil central, es una de varias ciudades del país que ha enfrentado escasez de mano de obra porque el crecimiento en otros sectores, y la escala de los trabajos de infraestructura hicieron que faltaran trabajadores manuales. Los planes para el estadio de 570  millones de reales, unos $244 millones se alteraron a causa de la escasez de obreros, y los diseñadores optaron por piezas prefabricadas.

James Berson, de 21 años, se enteró del trabajo en Brasil por un amigo, y ahora está a cargo del grupo haitiano, que es una mezcla de varones y mujeres. Dijo que la mayoría de los trabajadores haitianos se reclutaron a través de una misión católica en Cuiabá.

“Es muy fácil para ellos encontrar trabajo aquí”, explicó Berson en una entrevista en una suite del estadio. “La empresa de ingeniería los llamó y les dijo simplemente vengan aquí a trabajar”.

Mendes Junior suministra alojamiento a la mayoría de los trabajadores, donde duermen  ocho en una habitación.

Los haitianos también están ayudando a construir estadios en la ciudad sureña de Curitiba y en la capital del estado de Amazonas, Manaos.

El estadio será sede de partidos donde jugarán Bosnia, Nigeria y Japón.

Bloomberg/ Brasil