Con la mira en el anillo
Luis Fernado Rojas lrojas@larepublica.net | Viernes 27 mayo, 2011
Con la mira en el anillo
Mavericks esperan rival y arden en ansias por obtener el campeonato
Mucha concentración y mantener su estilo de saber reaccionar en los momentos precisos, pareciese ser la fórmula mágica que los Mavericks de Dallas esperan aplicar en las finales de la NBA, para la cual se clasificaron el pasado miércoles, derrotando a Thunders 100-96.
De la mano de Dirk Nowitzki (26 puntos) y con el inesperado auxilio de Shawn Marion (26 unidades) los de Dallas se alzan con el título del Oeste, pero conscientes de que lo bueno apenas inicia.
El veterano base Jason Kidd junto a Dirk Nowitzki son los dos jugadores que vuelven de nuevo a las finales con los Mavericks, luego de haber ganado el título del Oeste, y el comportamiento de Nowitzki tras el juego del miércoles adelanta que aún no se ha logrado nada, porque Dallas quiere el campeonato.
Todo apunta a que los Heats, que anoche podían liquidar la serie ante Bulls, será el rival de Dallas y eso pone a pensar a Nowitzki y compañía, y los hace bajar los pies a la tierra. En realidad no hay mucho tiempo para celebrar y vale más prepararse con todo, porque Dallas no se conforma con un pedazo del pastel, ellos lo quieren todo.
Los Mavericks quieren devolver a Dallas aquella ilusión que le frustraron en el 2006, luego de haber estado arriba 2-0 en la serie ante Miami, que recuperó y volcó el tablero a 3-2 en el American Airlines Arena y luego remató en Dallas. Para peor de males, seguido a ese fracaso se vinieron tres eliminaciones de primera ronda que hacen algo para olvidar esa mitad de década, para los Mavericks para los cuales el momento de sonreír puede haber llegado.
"Podemos disfrutarlo por un día. Pero ya hemos conseguido uno de esos trofeos (por el campeonato de la conferencia). Y no significó nada al final", dijo Nowitzki recordando el 2006 en EFE.
Dallas tiene con qué hacer pensar a su rival en la final, porque ha demostrado que no fue casualidad ni inspiración la barrida que le propinaron a los Lakers en los cuartos de final de su conferencia. Pero tienen razón los Mavericks en pensar que falta mucho camino por recorrer y el equipo va a necesitar que sus piezas principales se mantengan encendidas y con el mismo nivel de concentración que han mostrado en el camino al título principal.
Anoche Heat y Bulls se enfrentaban en Chicago, en el quinto partido de la serie, con ventaja para Miami de 3 a 1.
Luis Rojas
lrojas@larepublica.net
Mavericks esperan rival y arden en ansias por obtener el campeonato
Mucha concentración y mantener su estilo de saber reaccionar en los momentos precisos, pareciese ser la fórmula mágica que los Mavericks de Dallas esperan aplicar en las finales de la NBA, para la cual se clasificaron el pasado miércoles, derrotando a Thunders 100-96.
De la mano de Dirk Nowitzki (26 puntos) y con el inesperado auxilio de Shawn Marion (26 unidades) los de Dallas se alzan con el título del Oeste, pero conscientes de que lo bueno apenas inicia.
El veterano base Jason Kidd junto a Dirk Nowitzki son los dos jugadores que vuelven de nuevo a las finales con los Mavericks, luego de haber ganado el título del Oeste, y el comportamiento de Nowitzki tras el juego del miércoles adelanta que aún no se ha logrado nada, porque Dallas quiere el campeonato.
Todo apunta a que los Heats, que anoche podían liquidar la serie ante Bulls, será el rival de Dallas y eso pone a pensar a Nowitzki y compañía, y los hace bajar los pies a la tierra. En realidad no hay mucho tiempo para celebrar y vale más prepararse con todo, porque Dallas no se conforma con un pedazo del pastel, ellos lo quieren todo.
Los Mavericks quieren devolver a Dallas aquella ilusión que le frustraron en el 2006, luego de haber estado arriba 2-0 en la serie ante Miami, que recuperó y volcó el tablero a 3-2 en el American Airlines Arena y luego remató en Dallas. Para peor de males, seguido a ese fracaso se vinieron tres eliminaciones de primera ronda que hacen algo para olvidar esa mitad de década, para los Mavericks para los cuales el momento de sonreír puede haber llegado.
"Podemos disfrutarlo por un día. Pero ya hemos conseguido uno de esos trofeos (por el campeonato de la conferencia). Y no significó nada al final", dijo Nowitzki recordando el 2006 en EFE.
Dallas tiene con qué hacer pensar a su rival en la final, porque ha demostrado que no fue casualidad ni inspiración la barrida que le propinaron a los Lakers en los cuartos de final de su conferencia. Pero tienen razón los Mavericks en pensar que falta mucho camino por recorrer y el equipo va a necesitar que sus piezas principales se mantengan encendidas y con el mismo nivel de concentración que han mostrado en el camino al título principal.
Anoche Heat y Bulls se enfrentaban en Chicago, en el quinto partido de la serie, con ventaja para Miami de 3 a 1.
Luis Rojas
lrojas@larepublica.net