Bush pide extraer petróleo en alta mar
| Jueves 19 junio, 2008
Restricción estaba vigente desde hace 25 años en razón del impacto al medio ambiente
Bush pide extraer petróleo en alta mar
• Presidente estadounidense argumenta que en esa franja existen 18 mil millones de barriles, casi diez veces más que la producción anual del país
Washington
EFE
El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, pidió ayer al Congreso derogar la prohibición de extraer petróleo de la plataforma continental del país en alta mar, vigente desde hace más de 25 años.
En esa franja existen 18 mil millones de barriles de petróleo, casi diez veces más que la producción anual del país, según Bush, quien señaló que la restricción "está anticuada y es contraproducente".
Hizo su apelo al Congreso para que la levante un día después de que el candidato de su partido a la presidencia, John McCain, propusiera lo mismo en un discurso en Houston, la capital petrolera del país.
Ambos han cambiado su postura al respecto ante la ansiedad de los estadounidenses por el precio de la gasolina, que ha superado el hito psicológico de los $4 por galón (3,78 litros).
McCain defendió la prohibición en su campaña presidencial de 2000, en la que perdió la candidatura republicana ante Bush, algo que el bando de Barack Obama se ha apresurado a recordar.
Su nuevo parecer le coloca en una posición extraña, pues McCain ha intentado presentarse como un candidato "verde", un adalid contra el calentamiento global que ha criticado la pasividad de Bush en ese ámbito.
"Es algo tristísimo que una persona que durante años se ha manifestado abierto a las soluciones contra el cambio climático haya cambiado completamente de opinión. Estamos muy decepcionados", dijo Javier Sierra, portavoz del Sierra Club, la mayor asociación ecologista del país.
A Bush, por su parte, la llamada a construir plataformas petroleras en el área territorial estadounidense en alta mar le puede causar problemas en las reuniones de familia.
La restricción, que el Congreso impuso en 1982 por el impacto de las instalaciones en el medio ambiente, fue reafirmada en 1990 por una prohibición del Ejecutivo firmada por su padre, George H. W. Bush.
Además, su hermano Jeb Bush se opuso a las explotaciones cuando era gobernador de Florida.
El actual presidente prometió derogar el decreto de su padre si el Congreso hacía lo propio.
Sin embargo, las señales no son prometedoras. Harry Reid, el líder de los demócratas en el Senado, señaló en un comunicado que alcanzar los yacimientos de alta mar no reducirá el precio de la gasolina.
La propuesta "representa otro gran regalo para las compañías petroleras, que ya se embolsan millones de dólares en beneficios", dijo.
En la misma línea se ha manifestado la presidenta de la Cámara Baja, la demócrata Nancy Pelosi.
La petición de Bush abre un nuevo frente en la batalla dialéctica entre los dos bandos sobre qué hacer para paliar el sufrimiento de los ciudadanos en un país con un transporte público muy deficiente.
Líderes demócratas en el Congreso quieren poner un impuesto a los beneficios "extraordinarios" de las compañías petroleras y con ello financiar el desarrollo de energías alternativas.
También han propuesto más controles de la especulación financiera en el mercado de la energía.
Por su parte, los republicanos abogan en general por el incremento del bombeo doméstico, aunque no hay un apoyo completo a las posiciones de Bush.
Arnold Schwarzenegger, gobernador de California, un estado donde el que no es "verde" es mirado como un bicho raro, rechaza la exploración petrolera en la plataforma continental de su estado.
La misma posición había mantenido el gobernador de Florida, Charlie Crist, hasta horas después del discurso de McCain, cuando cambió de postura.
Crist es citado como uno de los nombres en la lista de la campaña de McCain de posibles candidatos a la vicepresidencia.
Bush pide extraer petróleo en alta mar
• Presidente estadounidense argumenta que en esa franja existen 18 mil millones de barriles, casi diez veces más que la producción anual del país
Washington
EFE
El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, pidió ayer al Congreso derogar la prohibición de extraer petróleo de la plataforma continental del país en alta mar, vigente desde hace más de 25 años.
En esa franja existen 18 mil millones de barriles de petróleo, casi diez veces más que la producción anual del país, según Bush, quien señaló que la restricción "está anticuada y es contraproducente".
Hizo su apelo al Congreso para que la levante un día después de que el candidato de su partido a la presidencia, John McCain, propusiera lo mismo en un discurso en Houston, la capital petrolera del país.
Ambos han cambiado su postura al respecto ante la ansiedad de los estadounidenses por el precio de la gasolina, que ha superado el hito psicológico de los $4 por galón (3,78 litros).
McCain defendió la prohibición en su campaña presidencial de 2000, en la que perdió la candidatura republicana ante Bush, algo que el bando de Barack Obama se ha apresurado a recordar.
Su nuevo parecer le coloca en una posición extraña, pues McCain ha intentado presentarse como un candidato "verde", un adalid contra el calentamiento global que ha criticado la pasividad de Bush en ese ámbito.
"Es algo tristísimo que una persona que durante años se ha manifestado abierto a las soluciones contra el cambio climático haya cambiado completamente de opinión. Estamos muy decepcionados", dijo Javier Sierra, portavoz del Sierra Club, la mayor asociación ecologista del país.
A Bush, por su parte, la llamada a construir plataformas petroleras en el área territorial estadounidense en alta mar le puede causar problemas en las reuniones de familia.
La restricción, que el Congreso impuso en 1982 por el impacto de las instalaciones en el medio ambiente, fue reafirmada en 1990 por una prohibición del Ejecutivo firmada por su padre, George H. W. Bush.
Además, su hermano Jeb Bush se opuso a las explotaciones cuando era gobernador de Florida.
El actual presidente prometió derogar el decreto de su padre si el Congreso hacía lo propio.
Sin embargo, las señales no son prometedoras. Harry Reid, el líder de los demócratas en el Senado, señaló en un comunicado que alcanzar los yacimientos de alta mar no reducirá el precio de la gasolina.
La propuesta "representa otro gran regalo para las compañías petroleras, que ya se embolsan millones de dólares en beneficios", dijo.
En la misma línea se ha manifestado la presidenta de la Cámara Baja, la demócrata Nancy Pelosi.
La petición de Bush abre un nuevo frente en la batalla dialéctica entre los dos bandos sobre qué hacer para paliar el sufrimiento de los ciudadanos en un país con un transporte público muy deficiente.
Líderes demócratas en el Congreso quieren poner un impuesto a los beneficios "extraordinarios" de las compañías petroleras y con ello financiar el desarrollo de energías alternativas.
También han propuesto más controles de la especulación financiera en el mercado de la energía.
Por su parte, los republicanos abogan en general por el incremento del bombeo doméstico, aunque no hay un apoyo completo a las posiciones de Bush.
Arnold Schwarzenegger, gobernador de California, un estado donde el que no es "verde" es mirado como un bicho raro, rechaza la exploración petrolera en la plataforma continental de su estado.
La misma posición había mantenido el gobernador de Florida, Charlie Crist, hasta horas después del discurso de McCain, cuando cambió de postura.
Crist es citado como uno de los nombres en la lista de la campaña de McCain de posibles candidatos a la vicepresidencia.