Beneficios y riesgos en el mundo digital
| Lunes 15 julio, 2013
Existe la necesidad de modificar alguna de nuestras leyes de modo que, al menos, se busque una homologación de derechos y responsabilidades, en casos de difamación, entre todos los medios, incluidas las redes sociales
Beneficios y riesgos en el mundo digital
Muchos beneficios y también algún riesgo es lo que tenemos debido a la llegada de algunas de las nuevas tecnologías de la comunicación, como es el caso de la web.
Obtenemos mediante ellas enormes cantidades de información gratis, podemos comunicarnos con otras personas en todo momento sin importar a qué distancia de nosotros estas se encuentren, entre otras ventajas.
Pero también corremos algún riesgo de que alguien en forma anónima publique por esas vías mentiras sobre nosotros buscando dañar nuestro buen nombre, teniendo en ese caso muy escasas posibilidades reales de descubrir quien fue el que publicó la ofensa para que reciba un castigo por su acto.
Pareciera que en esto, así como en otras situaciones, la legislación puede avanzar mucho más lento que las tecnologías. Nos encontramos haciendo uso de algo y en forma masiva, sin que se haya revisado si existe o no necesidad de reformar leyes o crear otras de modo que todo, por relativamente nuevo que sea, funcione con la regulación debida.
Históricamente algunas personas en el mundo han ganado juicios contra los autores de difamaciones en su perjuicio, hechas por medio de la prensa o de un libro, por ejemplo.
Sin embargo en el caso de la web, este tipo de acusaciones es muchísimo más complicado y costoso de realizar, además de las escasas posibilidades que tienen los ofendidos de llegar a descubrir quién los ofendió, acusarlo y que reciba un castigo.
En el caso de los medios de prensa, estos pueden ser acusados y penados con cárcel si se les encuentra responsables de difamar o permitir que alguien lo haga por su medio.
Mientras que si alguien hace lo mismo en forma anónima por otros medios como Facebook, Twitter o Google, para lo cual podría crear una página con nombre inventado, probablemente no será descubierto ni recibirá entonces sanción alguna.
Esto evidencia la necesidad de modificar alguna de nuestras leyes de modo que, al menos, se busque una homologación de derechos y responsabilidades entre todos los medios, incluidas las redes sociales.
Existe la necesidad de modernizar la legislación a fin de poder sentar responsabilidades en todos los casos.
Esta es tarea de quienes están en un cargo justamente para velar por ello: los legisladores y el mismo gobierno de la República.