Automotrices se apresuran a comercializar autos de lujo
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Martes 19 abril, 2011
Automotrices se apresuran a comercializar autos de lujo
Hace casi 25 años, Lee Iacocca, que sacó a Chrysler del borde del abismo a comienzos de los 80, propuso abrir las concesionarias Chrysler al Alfa Romeo de Fiat SpA, la marca italiana que se hizo famosa en los Estados Unidos cuando el personaje de Dustin Hoffman perseguía a la Sra. Robinson y su hija en un Spider en la película “El graduado”.
Ese acuerdo no se firmó hasta 1988 y se deshizo tres años después, precipitando la salida de Alfa de los EE.UU. en 1995. Ahora Sergio Marchionne, CEO tanto de Fiat como de Chrysler, quiere volver a llevar a Alfa a los EE.UU. como pieza clave de su estrategia de crear un coloso automotriz global con estas dos empresas regionales en problemas, informa Bloomberg Businessweek en su edición del 18 de abril.
La visión de Marchionne consiste en reconvertir a Alfa en una verdadera marca de lujo, como BMW, con una serie de modelos que abarcan desde compactos de alta gama hasta vehículos todo-terreno y autos deportivos. Respaldada por la dimensión de las marcas de mercado masivo Fiat, Dodge y Chrysler, Alfa, que tiene un siglo de antigüedad, produciría grandes ganancias para el grupo del mismo modo que el Audi para su empresa madre, Volkswagen AG. Aunque VW posee diez marcas, Audi es responsable de la mitad de sus utilidades.
“Alfa, sin duda, es de importancia crítica para el grupo”, dijo Marchionne en una entrevista en sus oficinas de la sede central de Fiat en Turín. “Es una marca deportiva de excepcional calidad. Estas marcas avanzan más rápido desde el punto de vista tecnológico y allí hay más rentabilidad, lo que permite financiar investigación y desarrollo. Esas tecnologías pasan a ser la base de los automóviles de volumen de la siguiente generación”.
Estar presentes en el sector de alta gama del mercado es parte de la estrategia de todas las grandes automotrices. Toyota Motor Corp tiene Lexus, General Motors Co. tiene Cadillac y Ford Motor Co. se aferró a Lincoln aun después de haber dejado Jaguar, Land Rover y Volvo como parte de su propia reestructuración. Una razón de peso es que los autos de lujo obtienen márgenes que pueden llegar a quintuplicar los de los autos del mercado masivo, a la vez que ejercen un efecto de halo en sus hermanos más pequeños.
El presidente de Volkswagen Ferdinand Piec dijo en septiembre que le gustaría comprar Alfa, y que la empresa alemana podría cuidar mejor el ascenso de la marca. VW ha tenido éxito en resguardar la imagen característica de sus marcas, a la vez que estas comparten piezas de motor para reducir costos.
Su cartera incluye desde el básico Skoda hasta el auto del hombre común VW, el Bentley y el Lamborghini de superlujo. Audi es la gallina de los huevos de oro del grupo, ya que el año pasado obtuvo más ganancias por unidad que BMW y Mercedes-Benz de Daimler, y es una buena razón para que VW se haya convertido en el fabricante de autos más rentable del mundo.
Roma
Hace casi 25 años, Lee Iacocca, que sacó a Chrysler del borde del abismo a comienzos de los 80, propuso abrir las concesionarias Chrysler al Alfa Romeo de Fiat SpA, la marca italiana que se hizo famosa en los Estados Unidos cuando el personaje de Dustin Hoffman perseguía a la Sra. Robinson y su hija en un Spider en la película “El graduado”.
Ese acuerdo no se firmó hasta 1988 y se deshizo tres años después, precipitando la salida de Alfa de los EE.UU. en 1995. Ahora Sergio Marchionne, CEO tanto de Fiat como de Chrysler, quiere volver a llevar a Alfa a los EE.UU. como pieza clave de su estrategia de crear un coloso automotriz global con estas dos empresas regionales en problemas, informa Bloomberg Businessweek en su edición del 18 de abril.
La visión de Marchionne consiste en reconvertir a Alfa en una verdadera marca de lujo, como BMW, con una serie de modelos que abarcan desde compactos de alta gama hasta vehículos todo-terreno y autos deportivos. Respaldada por la dimensión de las marcas de mercado masivo Fiat, Dodge y Chrysler, Alfa, que tiene un siglo de antigüedad, produciría grandes ganancias para el grupo del mismo modo que el Audi para su empresa madre, Volkswagen AG. Aunque VW posee diez marcas, Audi es responsable de la mitad de sus utilidades.
“Alfa, sin duda, es de importancia crítica para el grupo”, dijo Marchionne en una entrevista en sus oficinas de la sede central de Fiat en Turín. “Es una marca deportiva de excepcional calidad. Estas marcas avanzan más rápido desde el punto de vista tecnológico y allí hay más rentabilidad, lo que permite financiar investigación y desarrollo. Esas tecnologías pasan a ser la base de los automóviles de volumen de la siguiente generación”.
Estar presentes en el sector de alta gama del mercado es parte de la estrategia de todas las grandes automotrices. Toyota Motor Corp tiene Lexus, General Motors Co. tiene Cadillac y Ford Motor Co. se aferró a Lincoln aun después de haber dejado Jaguar, Land Rover y Volvo como parte de su propia reestructuración. Una razón de peso es que los autos de lujo obtienen márgenes que pueden llegar a quintuplicar los de los autos del mercado masivo, a la vez que ejercen un efecto de halo en sus hermanos más pequeños.
El presidente de Volkswagen Ferdinand Piec dijo en septiembre que le gustaría comprar Alfa, y que la empresa alemana podría cuidar mejor el ascenso de la marca. VW ha tenido éxito en resguardar la imagen característica de sus marcas, a la vez que estas comparten piezas de motor para reducir costos.
Su cartera incluye desde el básico Skoda hasta el auto del hombre común VW, el Bentley y el Lamborghini de superlujo. Audi es la gallina de los huevos de oro del grupo, ya que el año pasado obtuvo más ganancias por unidad que BMW y Mercedes-Benz de Daimler, y es una buena razón para que VW se haya convertido en el fabricante de autos más rentable del mundo.
Roma