ASI LOS VIMOS
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Lunes 13 septiembre, 2010
ASI LOS VIMOS
GAPARI
UNIVERSIDAD
Chacón: poco exigido; jugó muy bien de puños
Solís: punto alto; siempre tuvo presente apoyar en ofensiva.
Salazar: un arranque muy bueno, con diagonales defensivas exactas; al final controló a Alpízar.
Royero: jugó al filo de la navaja, con amarilla desde el minuto 3; le metió duro a los tobillos de Ureña.
Brenes: vendió su posición y Argenis crucificó a Chacón; único yerro del Pollo.
Morales: taco a taco con Oviedo; duelo de pesos pesados; jugador corpulento que sabe mover su masa muscular.
Johnson: le aplicó velocidad a su marca sobre Gabas y lo alejó de zona caliente.
Mattus: jugó las dos franjas, bloqueando a Sancho y luego a Meneses.
Quesada: es un jugador muy talentoso; hay que darle minutos y se pierde de vista.
Cubero: inició en el ataque y González no le dio metros; luego bajó a la cintura. No fue su día.
Díaz: atrapado entre Giancarlo y Acosta; una única penetración individual.
Gabriels: estuvo a centímetros de empatar el partido al rematar cruzado en un entrevero.
Armijo: metió al equipo en ofensiva; sus mejores minutos.
Hall: pimentoso y veloz, fue un martirio para Guzmán.
ALAJUELENSE
Pemberton: un remate lejano de Morales, el susto de Windell y nada más.
Sancho: no pudo salir de su zona; flojo.
González: atrapó sin problemas a Minor.
Acosta: supervisó a Cubero y sudó algo más con Windell
Meneses: apenas para el gasto; Owen lo derrotó en entusiasmo.
Valle: atento a los movimientos de Quesada; rival muy talentoso.
Guzmán: lo bajaron al carril izquierdo y hasta ahí empezó a laborar.
Oviedo: pieza táctica vital como segundo delantero detrás de Ureña y medio de llegada. Es un 10 a lo Oscar Ramírez.
Gabas: ayudó en la jugada del gol y casi nada más; lo marcaron muy bien.
Fernández: abierto por la derecha, ahí halló el espacio para definir el partido. Nada más, aunque fue mucho.
Ureña: tanto Salazar como Royero le tiraron duro y a los tobillos. Lo minaron.
Alpízar: muy aislado, no pudo juntarse con Leandrinho.
Palma: entró a sostener el leve chaparrón.
Leandrinho: se apartó mucho de Alpízar; no se asociaron.
GAPARI
UNIVERSIDAD
Chacón: poco exigido; jugó muy bien de puños
Solís: punto alto; siempre tuvo presente apoyar en ofensiva.
Salazar: un arranque muy bueno, con diagonales defensivas exactas; al final controló a Alpízar.
Royero: jugó al filo de la navaja, con amarilla desde el minuto 3; le metió duro a los tobillos de Ureña.
Brenes: vendió su posición y Argenis crucificó a Chacón; único yerro del Pollo.
Morales: taco a taco con Oviedo; duelo de pesos pesados; jugador corpulento que sabe mover su masa muscular.
Johnson: le aplicó velocidad a su marca sobre Gabas y lo alejó de zona caliente.
Mattus: jugó las dos franjas, bloqueando a Sancho y luego a Meneses.
Quesada: es un jugador muy talentoso; hay que darle minutos y se pierde de vista.
Cubero: inició en el ataque y González no le dio metros; luego bajó a la cintura. No fue su día.
Díaz: atrapado entre Giancarlo y Acosta; una única penetración individual.
Gabriels: estuvo a centímetros de empatar el partido al rematar cruzado en un entrevero.
Armijo: metió al equipo en ofensiva; sus mejores minutos.
Hall: pimentoso y veloz, fue un martirio para Guzmán.
ALAJUELENSE
Pemberton: un remate lejano de Morales, el susto de Windell y nada más.
Sancho: no pudo salir de su zona; flojo.
González: atrapó sin problemas a Minor.
Acosta: supervisó a Cubero y sudó algo más con Windell
Meneses: apenas para el gasto; Owen lo derrotó en entusiasmo.
Valle: atento a los movimientos de Quesada; rival muy talentoso.
Guzmán: lo bajaron al carril izquierdo y hasta ahí empezó a laborar.
Oviedo: pieza táctica vital como segundo delantero detrás de Ureña y medio de llegada. Es un 10 a lo Oscar Ramírez.
Gabas: ayudó en la jugada del gol y casi nada más; lo marcaron muy bien.
Fernández: abierto por la derecha, ahí halló el espacio para definir el partido. Nada más, aunque fue mucho.
Ureña: tanto Salazar como Royero le tiraron duro y a los tobillos. Lo minaron.
Alpízar: muy aislado, no pudo juntarse con Leandrinho.
Palma: entró a sostener el leve chaparrón.
Leandrinho: se apartó mucho de Alpízar; no se asociaron.