Aplastado 4-0 por Uruguay, México enfrenta mañana a Brasil

Hoy la Nota no es mía, admirador que soy de la pluma picante del colega mexicano Rafa Ramos, analista de ESPN, radicado en Los Angeles, reproducimos lo que escribió después de la humillante derrota sufrida el miércoles por la Selección de México, 4-0 frente a Uruguay en partido amistoso.

Comenta Ramos:

“Uruguay rebasó a México en todos los escenarios competitivos: personalidad, intensidad, estrategia, potencia, ritmo, concentración, compromiso, dignidad competitiva y claro, futbol, mucho futbol.

El primer error de Jaime Lozano fue menospreciar a Uruguay. Que el técnico de la Selección Mexicana no sepa que hoy Uruguay es más que Brasil, demuestra que Jimmy y su cuerpo técnico están desactualizados. Gravísimo.

El resto, era predecible y previsible.

Uruguay jugando a media marcha, aplastó misericordiosamente, compasivamente a México, porque pudieron ser más, muchos más.

Lea más: Guillermo "Memo" Ochoa desciende con su equipo por tercera vez en su carrera

Y la afición mexicana comenzó lo que será una rutina de tortura y castigo hasta el final de la Copa América, el 30 de junio. La tribuna se enardeció con oles, vituperios, burlas, mentadas de madre, y el “fuera Jimmy”.

¿Ha tenido Jaime Lozano poco tiempo para trabajar? Sin duda. Pero es necesario insistir: la culpa no es del Jimmy sino del caos dirigencial corrupto de los últimos 18 años y en especial de los últimos 18 meses.

Incluso, fue evidente que los charrúas ni siquiera llegaron a extremos de su explosividad atlética. Se reservaron.

Este resultado fue apenas una kermés previa a la Copa América, cuando Marcelo Bielsa ya disponga de todo el plantel para consolidar su condición de favorito, al lado de Argentina y por encima de Brasil.

¿Por qué se equivocó Lozano al subestimar a Uruguay? Porque decidió usar a una selección B, guardando a los posibles mejores exponentes para encarar a Brasil este sábado. Para su fortuna, Uruguay fue demasiado piadoso.

Lea más: Guillermo Ochoa logra un récord que Keylor Navas nunca podrá igualar

Cierto: ningún jugador de la Selección Mexicana se salva. Todos a su nivel, es decir, en flagrante desventaja respecto a su adversario, y lo único rescatable es un balazo al poste por parte del Piojo Alvarado. El resto, incluyendo a Edson Álvarez, fueron burlados y vulnerados ante jugadores con despliegue de un nivel que rebasa la medianía del jugador mexicano.

Ahora, México se preparará para enfrentar a Brasil (mañana en Texas), y mucho trabajo espera a Jaime Lozano para levantar las cenizas morales físicas y futbolísticas de su equipo.

gpandolfo@larepublica.net