Alza eléctrica golpearía tarifas de agua
Danny Canales dannycanales.asesor@larepublica.net | Viernes 18 abril, 2008
Aumento de ¢200 millones anuales en factura eléctrica de AyA empujaría incremento en el líquido
Alza eléctrica golpearía tarifas de agua
• Nueva tarifa afectaría a unas 2,2 millones de personas
Danny Canales
dcanales@larepublica.net
La reciente aprobación del aumento en las tarifas eléctricas podría impactar de forma directa en el costo del servicio de agua potable.
Para ello se trabaja en un ajuste en las tarifas de Acueductos y Alcantarillados (AyA), como reacción al aumento del 4% que sufrió en su factura eléctrica.
De aprobarse, se verán afectados unos 510 mil abonados, que representan una población de 2,2 millones personas.
El incremento en la luz, que entró a regir el 14 de abril, representa para el Instituto una erogación adicional de ¢200 millones anuales, expuso Ricardo Sancho, presidente de AyA.
La factura eléctrica consume el 10% de los ingresos que percibe la institución anualmente. Solo en 2007 pagó cerca de ¢4.600 millones por el servicio energético.
La cloración y el bombeo del agua para llevarla hasta las comunidades son las actividades que absorben la mayor demanda eléctrica en AyA.
A modo de ejemplo, Sancho comentó que solo por la estación de bombeo de Puente de Mulas, el Instituto pagó ¢85 millones de recibo eléctrico en enero.
El mayor impacto económico que sufrió la entidad se debe a que la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep) modificó la categoría tarifaria especial que tenía el Instituto, dijo Sancho.
El nuevo modelo crea dos tipos de tarifas. Una para temporada alta y otra para la baja.
En ambos casos el alza sería de ¢2 por kilovatio, en caso de que se consuman menos de 3 mil kilovatios, y de ¢1 extra si se emplean más de 3 mil kilovatios.
La Aresep aprobó hace dos semanas un incremento en las tarifas eléctricas que van desde un 11% hasta un 41%, dependiendo del consumo que hagan los abonados, siendo los más afectados aquellos que gasten más electricidad.
La ley faculta a AyA a presentar al menos una petición de ajuste de tarifas, reconoció Luis Cubillo, jerarca de la Dirección de Agua y Planeamiento de la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep).
La Aresep deberá dar trámite a todas las propuestas de ajuste de tarifas que se planteen para los servicios públicos y aprobar aquellas que estén debidamente justificadas.
Sobre la modificación en la categoría tarifaria que se aplicó a AyA, Cubillo explicó que es parte de una política que desarrolla la Aresep, mediante la cual se busca eliminar la diferenciación de precio que existía por años en el modelo de ajuste.
Por lo general, las propuestas de cambio en las tarifas de los recibos de agua potable se tardan unos tres meses y medio. Ese tiempo se consume en los trámites de admisibilidad, audiencia y aprobación por parte del regulador general.
De ser aprobado un nuevo incremento para AyA, sería el tercero en los últimos seis meses.
La Aresep aprobó un 6% en octubre y otro 10% en enero; sin embargo, los ajustes fueron muy por debajo del 35% que había solicitado Acueductos y Alcantarillados.
Como medida para reducir el impacto de las alzas en la economía de los consumidores, Sancho recomienda definir una campaña de ahorro eléctrico. Por ejemplo, la ducha, el lavado de utensilios de cocina y de ropa, es donde se gasta más electricidad.
Alza eléctrica golpearía tarifas de agua
• Nueva tarifa afectaría a unas 2,2 millones de personas
Danny Canales
dcanales@larepublica.net
La reciente aprobación del aumento en las tarifas eléctricas podría impactar de forma directa en el costo del servicio de agua potable.
Para ello se trabaja en un ajuste en las tarifas de Acueductos y Alcantarillados (AyA), como reacción al aumento del 4% que sufrió en su factura eléctrica.
De aprobarse, se verán afectados unos 510 mil abonados, que representan una población de 2,2 millones personas.
El incremento en la luz, que entró a regir el 14 de abril, representa para el Instituto una erogación adicional de ¢200 millones anuales, expuso Ricardo Sancho, presidente de AyA.
La factura eléctrica consume el 10% de los ingresos que percibe la institución anualmente. Solo en 2007 pagó cerca de ¢4.600 millones por el servicio energético.
La cloración y el bombeo del agua para llevarla hasta las comunidades son las actividades que absorben la mayor demanda eléctrica en AyA.
A modo de ejemplo, Sancho comentó que solo por la estación de bombeo de Puente de Mulas, el Instituto pagó ¢85 millones de recibo eléctrico en enero.
El mayor impacto económico que sufrió la entidad se debe a que la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep) modificó la categoría tarifaria especial que tenía el Instituto, dijo Sancho.
El nuevo modelo crea dos tipos de tarifas. Una para temporada alta y otra para la baja.
En ambos casos el alza sería de ¢2 por kilovatio, en caso de que se consuman menos de 3 mil kilovatios, y de ¢1 extra si se emplean más de 3 mil kilovatios.
La Aresep aprobó hace dos semanas un incremento en las tarifas eléctricas que van desde un 11% hasta un 41%, dependiendo del consumo que hagan los abonados, siendo los más afectados aquellos que gasten más electricidad.
La ley faculta a AyA a presentar al menos una petición de ajuste de tarifas, reconoció Luis Cubillo, jerarca de la Dirección de Agua y Planeamiento de la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep).
La Aresep deberá dar trámite a todas las propuestas de ajuste de tarifas que se planteen para los servicios públicos y aprobar aquellas que estén debidamente justificadas.
Sobre la modificación en la categoría tarifaria que se aplicó a AyA, Cubillo explicó que es parte de una política que desarrolla la Aresep, mediante la cual se busca eliminar la diferenciación de precio que existía por años en el modelo de ajuste.
Por lo general, las propuestas de cambio en las tarifas de los recibos de agua potable se tardan unos tres meses y medio. Ese tiempo se consume en los trámites de admisibilidad, audiencia y aprobación por parte del regulador general.
De ser aprobado un nuevo incremento para AyA, sería el tercero en los últimos seis meses.
La Aresep aprobó un 6% en octubre y otro 10% en enero; sin embargo, los ajustes fueron muy por debajo del 35% que había solicitado Acueductos y Alcantarillados.
Como medida para reducir el impacto de las alzas en la economía de los consumidores, Sancho recomienda definir una campaña de ahorro eléctrico. Por ejemplo, la ducha, el lavado de utensilios de cocina y de ropa, es donde se gasta más electricidad.