Al mal tiempo, buena cara
Luis Fernado Rojas lrojas@larepublica.net | Miércoles 11 mayo, 2011
Al mal tiempo, buena cara
Gineth Soto lucha contra la adversidad, pero se mantiene de pie y optimista
En algún momento tenían que empezar los problemas y ella lo sabía, por eso, cuando la adversidad ha asomado la cabeza en la ruta hacia la cima del Everest, la tica se ha puesto de pie para enfrentarla.
Afectada de bronquitis, Soto no pudo hacer la tercera rotación, previa a la escalada a la cima, lo intentó pero tuvo que devolverse no sin antes llevarse una fuerte impresión, tras la muerte de un miembro de la expedición.
“La situación es difícil, pero no me rindo; descanso y me estoy curando, y no dejo que la impaciencia ni malos pensamientos me llenen de miedos o dudas”, expresó Soto.
Gineth experimentó días muy difíciles; primero lo de su compañero que colapsó y murió en la pared de Lhotse, camino al campamento 3. “A lo largo podíamos observar al helicóptero sacando el cuerpo, eso fue impresionante, pero no fue todo, media hora después en el Valle del Silencio vimos caer una avalancha en el momento que había escaladores en la zona, que por dicha sobrevivieron”.
Gineth logró llegar hasta el campamento 2, cuando dice le dio calentura, tos y un dolor en el pecho. “Vomitaba la comida de los ataques de tos”, y fue cuando tomaron la decisión de volver al campamento base, ya que subir al tres era demasiado peligroso, pues ahí cualquier complicación de salud puede provocar la muerte.
Desde entonces y hasta hoy, Soto se ha mantenido tomando antibióticos esperando mejorar y que le den la oportunidad de escalar, en el momento que la expedición lo haga, directo a la cima.
“La compañía debe decidir si tengo que hacer de nuevo la tercera rotación al campamento #3 o me mandan de un solo a la cima cuando me recupere”.
Gineth afirmó que los sherpas (asistentes locales) le dan ollas con agua caliente para hacer vapor y abrir sus vías respiratorias. Asegura que a diferencia de la vez pasada, cuando se vio afectada por la tos de Khumbu, la bronquitis es algo que puede superar si dispone de tiempo.
Y parece que la montaña está dispuesta a esperar por ella, porque el intento de cima que iban a realizar compañeros de ella a partir del 9 de mayo se canceló debido al mal tiempo que impera en la zona, lo que le da a la tica lo que más necesita en este momento, tiempo.
“Cada vez estoy mejor y más positiva. Estas enfermedades son comunes acá, en el Everest; muchos han tenido tos y se han recuperado; ticos, todo tiene solución”, escribió Soto, vía correo electrónico a LA REPUBLICA.
Ella aseguró no estar desesperada, ir “escalón a escalón, paso a paso, metro a metro”, pero está consciente de que lo primero es curarse y después todo lo demás.
“Es en estos momentos cuando debes mantenerte tranquila y sobre todo positiva, para atraer lo bueno hacia ti, y sé que lo mejor está por venir”.
Los días que vienen serán cruciales para definir la situación de Soto, aunque para los miles de ticos que la siguen, y en especial para quienes lo hacen a través de la red social Facebook, ella, independientemente del resultado de esta expedición, seguirá siendo un modelo de heroísmo.
Luis Rojas
lrojas@larepublica.net
Gineth Soto lucha contra la adversidad, pero se mantiene de pie y optimista
En algún momento tenían que empezar los problemas y ella lo sabía, por eso, cuando la adversidad ha asomado la cabeza en la ruta hacia la cima del Everest, la tica se ha puesto de pie para enfrentarla.
Afectada de bronquitis, Soto no pudo hacer la tercera rotación, previa a la escalada a la cima, lo intentó pero tuvo que devolverse no sin antes llevarse una fuerte impresión, tras la muerte de un miembro de la expedición.
“La situación es difícil, pero no me rindo; descanso y me estoy curando, y no dejo que la impaciencia ni malos pensamientos me llenen de miedos o dudas”, expresó Soto.
Gineth experimentó días muy difíciles; primero lo de su compañero que colapsó y murió en la pared de Lhotse, camino al campamento 3. “A lo largo podíamos observar al helicóptero sacando el cuerpo, eso fue impresionante, pero no fue todo, media hora después en el Valle del Silencio vimos caer una avalancha en el momento que había escaladores en la zona, que por dicha sobrevivieron”.
Gineth logró llegar hasta el campamento 2, cuando dice le dio calentura, tos y un dolor en el pecho. “Vomitaba la comida de los ataques de tos”, y fue cuando tomaron la decisión de volver al campamento base, ya que subir al tres era demasiado peligroso, pues ahí cualquier complicación de salud puede provocar la muerte.
Desde entonces y hasta hoy, Soto se ha mantenido tomando antibióticos esperando mejorar y que le den la oportunidad de escalar, en el momento que la expedición lo haga, directo a la cima.
“La compañía debe decidir si tengo que hacer de nuevo la tercera rotación al campamento #3 o me mandan de un solo a la cima cuando me recupere”.
Gineth afirmó que los sherpas (asistentes locales) le dan ollas con agua caliente para hacer vapor y abrir sus vías respiratorias. Asegura que a diferencia de la vez pasada, cuando se vio afectada por la tos de Khumbu, la bronquitis es algo que puede superar si dispone de tiempo.
Y parece que la montaña está dispuesta a esperar por ella, porque el intento de cima que iban a realizar compañeros de ella a partir del 9 de mayo se canceló debido al mal tiempo que impera en la zona, lo que le da a la tica lo que más necesita en este momento, tiempo.
“Cada vez estoy mejor y más positiva. Estas enfermedades son comunes acá, en el Everest; muchos han tenido tos y se han recuperado; ticos, todo tiene solución”, escribió Soto, vía correo electrónico a LA REPUBLICA.
Ella aseguró no estar desesperada, ir “escalón a escalón, paso a paso, metro a metro”, pero está consciente de que lo primero es curarse y después todo lo demás.
“Es en estos momentos cuando debes mantenerte tranquila y sobre todo positiva, para atraer lo bueno hacia ti, y sé que lo mejor está por venir”.
Los días que vienen serán cruciales para definir la situación de Soto, aunque para los miles de ticos que la siguen, y en especial para quienes lo hacen a través de la red social Facebook, ella, independientemente del resultado de esta expedición, seguirá siendo un modelo de heroísmo.
Luis Rojas
lrojas@larepublica.net