Acuerdo político florece en Bolivia
| Martes 21 octubre, 2008
Acuerdo político florece en Bolivia
Legisladores acceden a enviar a consulta popular la Carta Magna de ese país
La Paz
EFE
El oficialismo y la oposición anunciaron ayer un acuerdo político en Bolivia que coincidió con la llegada de decenas de miles de seguidores del presidente Evo Morales a La Paz para exigir al Congreso Nacional el referendo constitucional.
Encabezados por el propio Morales, los “marchistas” se instalaron pasadas las 15.00 hora local (19.00 GMT) en la Plaza Murillo, el corazón de La Paz, donde se ubican el Congreso boliviano y el Palacio de Gobierno.
Minutos antes de la llegada de la Marcha por la Refundación Constitucional al centro de la ciudad, senadores oficialistas y opositores adelantaron que ya existe un acuerdo para poder convocar la consulta sobre la Carta Magna.
Congregados en una abarrotada Plaza Murillo y animados con actuaciones musicales e intervenciones de dirigentes campesinos, sindicales e indígenas, los manifestantes esperan a que el Congreso Nacional inicie la sesión plenaria correspondiente para ratificar ese consenso.
La que algunos ya califican como “histórica” marcha, ha inundado la capital política de Bolivia tras recorrer casi 200 kilómetros por el Altiplano andino durante siete días desde que partieron de la localidad de Caracollo, con Morales a la cabeza durante los primeros kilómetros.
La llegada masiva de manifestantes a La Paz ha llevado a las autoridades educativas a suspender las clases en la ciudad y en la vecina de El Alto y a las instituciones públicas a decretar jornada laboral continuada.
La marcha oficialista, criticada por la oposición por suponer un acoso al Congreso Nacional, se ha desarrollado hasta el momento de forma pacífica y sin incidentes.
No obstante, antes de llegar al centro de la ciudad, varios líderes sindicales amenazaron con cerrar el Congreso Nacional si sus legisladores no aprueban la convocatoria al referendo constitucional.
Si se concreta el acuerdo anunciado por los senadores Félix Rojas, del oficialista Movimiento al Socialismo (MAS), y Luis Vázquez, de la conservadora alianza Poder Democrático y Social (Podemos), el referendo constitucional se celebrará a comienzos de año y las elecciones generales se adelantarán a diciembre de 2009.
Con ese consenso, también quedaría resuelto uno de los principales escollos que han marcado la negociación parlamentaria en las últimas horas: la reelección presidencial.
Y es que para hacer posible el referendo constitucional, el presidente Morales se ha comprometido a presentarse a comicios generales solo una vez más y no otras dos como temía la oposición.
Pero además, el acuerdo contempla correcciones al texto constitucional aprobado en diciembre por la Asamblea Constituyente en asuntos como la descentralización autonómica, las reformas agraria y judicial o la política sobre recursos naturales.
Este acuerdo permitiría además pacificar el país tras la ola de violencia que se vivió el pasado mes de septiembre y que se cobró al menos 18 vidas en la región norteña de Pando, que se encuentra en estado de sitio.
La conflictiva situación dio paso a dos procesos de diálogo político consecutivos en Bolivia, el primero entre el Gobierno y los gobernadores opositores autonomistas que concluyó sin acuerdos.
El segundo escenario de diálogo se abrió en el Congreso Nacional con una comisión integrada por las cuatro fuerzas políticas que tienen representación parlamentaria.
Estas mesas de diálogo han sido observadas por varios organismos internacionales como la Organización de Estados Americanos (OEA), Naciones Unidas o la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), cuyos representantes aún se encuentran en el país a la espera de que se resuelva la compleja crisis boliviana.
Legisladores acceden a enviar a consulta popular la Carta Magna de ese país
La Paz
EFE
El oficialismo y la oposición anunciaron ayer un acuerdo político en Bolivia que coincidió con la llegada de decenas de miles de seguidores del presidente Evo Morales a La Paz para exigir al Congreso Nacional el referendo constitucional.
Encabezados por el propio Morales, los “marchistas” se instalaron pasadas las 15.00 hora local (19.00 GMT) en la Plaza Murillo, el corazón de La Paz, donde se ubican el Congreso boliviano y el Palacio de Gobierno.
Minutos antes de la llegada de la Marcha por la Refundación Constitucional al centro de la ciudad, senadores oficialistas y opositores adelantaron que ya existe un acuerdo para poder convocar la consulta sobre la Carta Magna.
Congregados en una abarrotada Plaza Murillo y animados con actuaciones musicales e intervenciones de dirigentes campesinos, sindicales e indígenas, los manifestantes esperan a que el Congreso Nacional inicie la sesión plenaria correspondiente para ratificar ese consenso.
La que algunos ya califican como “histórica” marcha, ha inundado la capital política de Bolivia tras recorrer casi 200 kilómetros por el Altiplano andino durante siete días desde que partieron de la localidad de Caracollo, con Morales a la cabeza durante los primeros kilómetros.
La llegada masiva de manifestantes a La Paz ha llevado a las autoridades educativas a suspender las clases en la ciudad y en la vecina de El Alto y a las instituciones públicas a decretar jornada laboral continuada.
La marcha oficialista, criticada por la oposición por suponer un acoso al Congreso Nacional, se ha desarrollado hasta el momento de forma pacífica y sin incidentes.
No obstante, antes de llegar al centro de la ciudad, varios líderes sindicales amenazaron con cerrar el Congreso Nacional si sus legisladores no aprueban la convocatoria al referendo constitucional.
Si se concreta el acuerdo anunciado por los senadores Félix Rojas, del oficialista Movimiento al Socialismo (MAS), y Luis Vázquez, de la conservadora alianza Poder Democrático y Social (Podemos), el referendo constitucional se celebrará a comienzos de año y las elecciones generales se adelantarán a diciembre de 2009.
Con ese consenso, también quedaría resuelto uno de los principales escollos que han marcado la negociación parlamentaria en las últimas horas: la reelección presidencial.
Y es que para hacer posible el referendo constitucional, el presidente Morales se ha comprometido a presentarse a comicios generales solo una vez más y no otras dos como temía la oposición.
Pero además, el acuerdo contempla correcciones al texto constitucional aprobado en diciembre por la Asamblea Constituyente en asuntos como la descentralización autonómica, las reformas agraria y judicial o la política sobre recursos naturales.
Este acuerdo permitiría además pacificar el país tras la ola de violencia que se vivió el pasado mes de septiembre y que se cobró al menos 18 vidas en la región norteña de Pando, que se encuentra en estado de sitio.
La conflictiva situación dio paso a dos procesos de diálogo político consecutivos en Bolivia, el primero entre el Gobierno y los gobernadores opositores autonomistas que concluyó sin acuerdos.
El segundo escenario de diálogo se abrió en el Congreso Nacional con una comisión integrada por las cuatro fuerzas políticas que tienen representación parlamentaria.
Estas mesas de diálogo han sido observadas por varios organismos internacionales como la Organización de Estados Americanos (OEA), Naciones Unidas o la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), cuyos representantes aún se encuentran en el país a la espera de que se resuelva la compleja crisis boliviana.