A mejor delantera, mejor defensa

Herediano fue el equipo más goleador del Torneo de Invierno, mientras que Alajuelense el que menos anotaciones encajó

Herediano es pólvora en su parte ofensiva, es su principal fortaleza, su fútbol pasa por buscar y crear opciones de gol.
Alajuelense sobresale por su solidez defensiva, puede confiar en su sector de atrás para sacar un partido.
A la final llegan dos conjuntos muy diferentes, casi que opuestos. La mejor delantera contra la mejor defensa. Uno vive del gol, el otro de tratar de evitarlo.
Herediano es el equipo más goleador durante el Torneo de Invierno acumula 54 goles, sumando eso sí los cinco que le anotó a Cartaginés en la semifinal, 15 tantos más que manudos y morados.
Alajuelense es el equipo que menos goles ha encajado en 24 encuentros, permitiendo solo 19 anotaciones, cuatro menos que los que han recibido brumosos y florenses.
La estadística es clara y muestran claramente cómo ambos equipos son un fiel reflejo de sus entrenadores. Marvin Solano acostumbrado a tener el balón, buscar el marco rival, más despreocupado por la defensa, responde con goles a los goles de los rivales.
Por eso del mediocampo hacia arriba, Solano maneja y gusta de un sinnúmero de variantes que le pueden cambiar completamente un juego, futbolistas con gran técnica.
Por ejemplo, quién será el gran ausente, Víctor Núñez (11 anotaciones), Minor Díaz, Anllel Porras, Leandro Barrios, Yendrick Ruiz, Yosimar Arias (8), Verny Scott, José Sánchez, José Carlos Cancela, entre otros, son sus opciones cuando debe atacar.
“Nosotros siempre queremos ganar y haremos todo lo posible para lograrlo. Buscaremos la victoria desde el primer partido”, sentenció desde ya Solano, sobre el juego del próximo lunes en el Morera Soto ante los manudos.
Óscar Ramírez, mientras tanto, es todo un estratega, táctico y siempre riguroso en la parte defensiva. Su juego comienza por ahí, con su línea de cinco o cuatro hombres bien posicionada, difícil de quebrantar, ordenada y desde ahí busca ese gol que le dará la victoria o clasificación. Ante la duda se le puede preguntar a Saprissa.
Con un portero que da seguridad como Patrick Pemberton, y una línea comandada por Johnny Acosta y Porfirio López, a la que se une Elías Palma o en caso de lesión de alguno de ellos Kenner Gutiérrez. Los cuatro conocen al dedillo a su entrenador y ejecutan sus instrucciones al pie de la letra.
Luego entran al trabajo de los recuperados, donde Luis Miguel Valle siempre hace un trabajo silencioso pero efectivo, ayudado ahora por Ariel Rodríguez y Juan Gabriel Guzmán. Y hasta los medias puntas terminan colaborando con sus laterales.
“Es importante sacar un resultado positivo en el primer juego, tenemos que empezar bien y luego terminar bien la serie”, afirmó Alejandro Alpízar, delantero rojinegro.
La final promete ser un bonito duelo entre dos equipos muy distintos, lo cierto es que quien acierte más terminará ganando el título nacional.

Dinia Vargas
dvargas@larepublica.net
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