Voto por adelantado favorece a Obama
| Sábado 25 octubre, 2008
Voto por adelantado favorece a Obama
Mayoría de los electores madrugadores son votantes registrados como demócratas
Washington
EFE
Los republicanos no ganan para malas noticias, y se encuentran ahora con que el voto por adelantado que se lleva a cabo en alrededor de 30 estados del país favorece al aspirante demócrata a la Casa Blanca, Barack Obama.
Los datos preliminares muestran que la mayoría de los electores más madrugadores son votantes registrados como demócratas, lo que confirma los resultados de la mayoría de sondeos, en los que Obama y sus correligionarios aparecen en cabeza para los comicios presidenciales y legislativos del 4 de noviembre.
La tendencia revierte lo ocurrido en ciclos electorales previos, cuando fueron los republicanos los que se apuntaron por mayoría al voto por adelantado.
Pero este año son más los demócratas que acuden a votar y lo hacen, además, en algunos de los doce estados que se espera decidan los comicios como Ohio, Carolina del Norte, Nevada y Nuevo México.
En Florida, los republicanos aseguran tener ventaja en el voto por correo, aunque en la votación en persona los superan los demócratas. En Colorado, ambas formaciones políticas están prácticamente empatadas.
Las cifras hechas públicas a mediados de esta semana por las autoridades estatales, que no contarán los votos hasta el día 4 pero sí pueden revelar la afiliación de los votantes, indican, por ejemplo, que los demócratas superan a los republicanos por dos a uno en Carolina del Norte, un estado que votó republicano en el 2004.
En Ohio, el estado que dio la victoria al presidente George W. Bush en el 2004, ocurre algo parecido. Así, los datos del condado de Hamilton, uno de los que ganó Bush hace cuatro años, indican que tres de cada cinco votantes son demócratas.
Los demócratas no escatiman esfuerzos para movilizar lo antes posible a unos votantes que se inclinan este año por su programa y albergan la esperanza de cambiar el mapa político de un país que ha estado dominado por los republicanos en 27 de los últimos 39 años.
“No esperéis hasta el 4 de noviembre”, dijo Obama el lunes en un acto en Florida, que empezó a votar por adelantado ese día.
“Se os puede estropear el automóvil, podéis tener una emergencia, a lo mejor no suena el despertador (...) Aprovechad la votación por anticipado”, añadió.
El voto por anticipado se remonta a 1860, cuando, en plena Guerra Civil, se instauró el sistema para permitir que los soldados enviasen sus sufragios por correo.
Su popularidad ha ido en aumento en los últimos ciclos electorales en distintos estados del país, que buscan evitar las largas colas del día electoral o problemas inesperados con las máquinas para votar.
En Ohio, de hecho, se registraron colas de varias horas en el 2004, lo que llevó a miles de votantes a desistir del intento.
Según los demócratas, esos problemas jugaron un papel determinante en la derrota de Kerry, quien perdió en el estado por sólo 120 mil votos.
“Calculamos que entre 20.000 y 30.000 personas optaron por no votar en el Condado de Franklin, que incluye a la ciudad predominantemente demócrata de Columbus”, dijo esta semana a la CNN Ted Allen, profesor de la Universidad Estatal de Ohio.
Se espera que alrededor de un 30% de los electores voten por adelantado este año, frente al 20% del 2004 y el 15% de 2000.
“La votación por adelantado (...) disminuirá el impacto de cualquier acontecimiento de última hora que pueda salvar la candidatura del (republicano John) McCain”, apunta Charlie Cook, un destacado analista político estadounidense, en una columna esta semana en la revista National Journal.
Los expertos apuntan, además, que el voto masivo por adelantado podría permitir un récord de asistencia a las urnas este año en Estados Unidos, uno de los países con una tasa más baja de participación entre las naciones desarrolladas.
El récord en las elecciones presidenciales modernas de EEUU se registró en 1960, en las que el joven y carismático senador demócrata John Fitzgerald Kenndy (JFK) compitió y ganó contra Richard Nixon.
En el 2004 la participación superó ligeramente el 60%.
Mayoría de los electores madrugadores son votantes registrados como demócratas
Washington
EFE
Los republicanos no ganan para malas noticias, y se encuentran ahora con que el voto por adelantado que se lleva a cabo en alrededor de 30 estados del país favorece al aspirante demócrata a la Casa Blanca, Barack Obama.
Los datos preliminares muestran que la mayoría de los electores más madrugadores son votantes registrados como demócratas, lo que confirma los resultados de la mayoría de sondeos, en los que Obama y sus correligionarios aparecen en cabeza para los comicios presidenciales y legislativos del 4 de noviembre.
La tendencia revierte lo ocurrido en ciclos electorales previos, cuando fueron los republicanos los que se apuntaron por mayoría al voto por adelantado.
Pero este año son más los demócratas que acuden a votar y lo hacen, además, en algunos de los doce estados que se espera decidan los comicios como Ohio, Carolina del Norte, Nevada y Nuevo México.
En Florida, los republicanos aseguran tener ventaja en el voto por correo, aunque en la votación en persona los superan los demócratas. En Colorado, ambas formaciones políticas están prácticamente empatadas.
Las cifras hechas públicas a mediados de esta semana por las autoridades estatales, que no contarán los votos hasta el día 4 pero sí pueden revelar la afiliación de los votantes, indican, por ejemplo, que los demócratas superan a los republicanos por dos a uno en Carolina del Norte, un estado que votó republicano en el 2004.
En Ohio, el estado que dio la victoria al presidente George W. Bush en el 2004, ocurre algo parecido. Así, los datos del condado de Hamilton, uno de los que ganó Bush hace cuatro años, indican que tres de cada cinco votantes son demócratas.
Los demócratas no escatiman esfuerzos para movilizar lo antes posible a unos votantes que se inclinan este año por su programa y albergan la esperanza de cambiar el mapa político de un país que ha estado dominado por los republicanos en 27 de los últimos 39 años.
“No esperéis hasta el 4 de noviembre”, dijo Obama el lunes en un acto en Florida, que empezó a votar por adelantado ese día.
“Se os puede estropear el automóvil, podéis tener una emergencia, a lo mejor no suena el despertador (...) Aprovechad la votación por anticipado”, añadió.
El voto por anticipado se remonta a 1860, cuando, en plena Guerra Civil, se instauró el sistema para permitir que los soldados enviasen sus sufragios por correo.
Su popularidad ha ido en aumento en los últimos ciclos electorales en distintos estados del país, que buscan evitar las largas colas del día electoral o problemas inesperados con las máquinas para votar.
En Ohio, de hecho, se registraron colas de varias horas en el 2004, lo que llevó a miles de votantes a desistir del intento.
Según los demócratas, esos problemas jugaron un papel determinante en la derrota de Kerry, quien perdió en el estado por sólo 120 mil votos.
“Calculamos que entre 20.000 y 30.000 personas optaron por no votar en el Condado de Franklin, que incluye a la ciudad predominantemente demócrata de Columbus”, dijo esta semana a la CNN Ted Allen, profesor de la Universidad Estatal de Ohio.
Se espera que alrededor de un 30% de los electores voten por adelantado este año, frente al 20% del 2004 y el 15% de 2000.
“La votación por adelantado (...) disminuirá el impacto de cualquier acontecimiento de última hora que pueda salvar la candidatura del (republicano John) McCain”, apunta Charlie Cook, un destacado analista político estadounidense, en una columna esta semana en la revista National Journal.
Los expertos apuntan, además, que el voto masivo por adelantado podría permitir un récord de asistencia a las urnas este año en Estados Unidos, uno de los países con una tasa más baja de participación entre las naciones desarrolladas.
El récord en las elecciones presidenciales modernas de EEUU se registró en 1960, en las que el joven y carismático senador demócrata John Fitzgerald Kenndy (JFK) compitió y ganó contra Richard Nixon.
En el 2004 la participación superó ligeramente el 60%.