Vida peor que "una sentencia de cárcel"
| Miércoles 19 noviembre, 2008
Vida peor que “una sentencia de cárcel”
Los Angeles
EFE
Britney Spears aseguró que desde la crisis que sufrió en enero su vida ha sido “peor que una sentencia de cárcel”, aunque poco a poco ha empezado a regresar a la normalidad.
Spears, de 26 años, se confesó en un reportaje de 90 minutos que emitirá el canal de televisión MTV el próximo 30 de noviembre en Estados Unidos.
“Creo que he aprendido la lección y ya es suficiente”, afirmó la artista, quien señaló que “incluso cuando se va a prisión uno sabe cuándo va a salir”.
A principios de 2008, la artista tuvo que ser internada en la planta psiquiátrica de un hospital californiano para someterse a una evaluación mental, después de una serie de comportamientos erráticos que le costaron la custodia de sus hijos, Preston y Jayden.
“Tengo días realmente buenos, y luego tengo malos días”, relató. “Si no tuviera las restricciones bajo las que me encuentro me sentiría muy liberada. Cuando les digo cómo me siento, parece que me oyen, pero realmente no me están escuchando”, añadió.
“Quise hacer esta película, porque empecé a sentir que no estaba siendo vista con la luz que yo quería. Esta es una oportunidad para dejar las cosas claras y hablar de lo que he estado pasando y hacia dónde voy”, comentó.
Los Angeles
EFE
Britney Spears aseguró que desde la crisis que sufrió en enero su vida ha sido “peor que una sentencia de cárcel”, aunque poco a poco ha empezado a regresar a la normalidad.
Spears, de 26 años, se confesó en un reportaje de 90 minutos que emitirá el canal de televisión MTV el próximo 30 de noviembre en Estados Unidos.
“Creo que he aprendido la lección y ya es suficiente”, afirmó la artista, quien señaló que “incluso cuando se va a prisión uno sabe cuándo va a salir”.
A principios de 2008, la artista tuvo que ser internada en la planta psiquiátrica de un hospital californiano para someterse a una evaluación mental, después de una serie de comportamientos erráticos que le costaron la custodia de sus hijos, Preston y Jayden.
“Tengo días realmente buenos, y luego tengo malos días”, relató. “Si no tuviera las restricciones bajo las que me encuentro me sentiría muy liberada. Cuando les digo cómo me siento, parece que me oyen, pero realmente no me están escuchando”, añadió.
“Quise hacer esta película, porque empecé a sentir que no estaba siendo vista con la luz que yo quería. Esta es una oportunidad para dejar las cosas claras y hablar de lo que he estado pasando y hacia dónde voy”, comentó.