Uribe logra "respeto" a acuerdo militar con EE.UU.
| Jueves 06 agosto, 2009
Posibilidad de que Washington opere bases en territorio colombiano ha levantado polémica en la región
Uribe logra “respeto” a acuerdo militar con EE.UU.
Hugo Chávez, mandatario de Venezuela, el “imperio yanqui” está tratando de “matar al nacer” la Unasur
Bogotá
EFE
Álvaro Uribe, presidente de Colombia, encontró ayer, si no un espaldarazo, sí respeto para su decisión de negociar el uso de bases militares colombianas por parte de Estados Unidos, incluso entre un gobernante afín a la ALBA.
“Cada país es soberano” para admitir o no la presencia de militares extranjeros en su territorio, dijo escuetamente el jefe de Estado paraguayo, con quien Uribe se reunirá ayer en Asunción, tras visitar Santiago y Buenos Aires como parte de una gira por Suramérica para explicar el alcance del acuerdo con Estados Unidos.
En el mismo sentido que Lugo, afín ideológicamente al mandatario venezolano, Hugo Chávez, y a la Alianza Bolivariana de las Américas (ALBA), se pronunció ayer la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, y el canciller de Perú, José Antonio García Belaúnde.
“Es parte del derecho soberano, del ejercicio de la soberanía de Colombia el hacer este tipo de acuerdos”, comentó el ministro peruano en declaraciones a varias emisoras colombianas.
El Gobierno peruano es por ahora el más comprensivo con la decisión de Uribe, que ha desatado las iras de Venezuela, Ecuador, Bolivia y Nicaragua, así como preocupación en Brasil y Chile.
Pese a esa inquietud expresada por portavoces gubernamentales chilenos en los últimos días, Bachelet trasmitió ayer a Uribe, a quien recibió en Santiago, el “respeto” de su país hacia el acuerdo militar que Colombia negocia con Estados Unidos.
“Bachelet ha reiterado que Chile respeta la soberanía, el interés nacional y las decisiones políticas de cada país en este continente, y en este caso particularmente de Colombia”, declaró Mariano Fernández, ministro de Relaciones Exteriores de Chile.
“Cómo nos vamos a involucrar nosotros en parecernos bien o mal que haya acuerdos militares de un país con otro. Nosotros lo respetamos”, recalcó el ministro, cuyo país ejerce la presidencia temporal de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) hasta el próximo día 10, fecha en la que la traspasará a Ecuador.
En Buenos Aires, siguiente escala de su gira, según han adelantado medios argentinos, Uribe va a escuchar críticas de su colega argentina, Cristina Fernández, al acuerdo castrense, como ya le pasó en La Paz con Evo Morales, quien subrayó que “permitir bases militares en Latinoamérica es una agresión a los Gobiernos y las democracias”.
La gira del presidente colombiano terminará hoy en Uruguay y Brasil.
Tanto el Gobierno colombiano como el estadounidense niegan que el convenio que está en la mesa de negociaciones sea una amenaza para la estabilidad de determinados países o de la región en su conjunto, como afirma Chávez.
El que reiteró ayer su postura es el jefe de Estado venezolano, quien volvió a afirmar que el Gobierno de Colombia trata de vincularle con las FARC para desviar la atención sobre las bases que podrán usar los estadounidenses.
En referencia a las denuncias por el hallazgo de armamento venezolano en poder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Chávez señaló que la intención de lo que calificó de “puñalada por la espalda” es “acallar” la “protesta diplomática” de su Gobierno por la “instalación de bases militares yanquis” en Colombia, lo que, “sin duda, es una amenaza para Venezuela”.
Chávez criticó, además, a Uribe por no asistir a la cumbre de la Unasur en Quito, donde se tratará el asunto del acuerdo colombo-estadounidense.
Según el mandatario venezolano, el “imperio yanqui” está tratando de “matar al nacer” la Unasur y acusó a Colombia, integrante de esa organización, de “prestarse” a ese juego.
Uribe logra “respeto” a acuerdo militar con EE.UU.
Hugo Chávez, mandatario de Venezuela, el “imperio yanqui” está tratando de “matar al nacer” la Unasur
Bogotá
EFE
Álvaro Uribe, presidente de Colombia, encontró ayer, si no un espaldarazo, sí respeto para su decisión de negociar el uso de bases militares colombianas por parte de Estados Unidos, incluso entre un gobernante afín a la ALBA.
“Cada país es soberano” para admitir o no la presencia de militares extranjeros en su territorio, dijo escuetamente el jefe de Estado paraguayo, con quien Uribe se reunirá ayer en Asunción, tras visitar Santiago y Buenos Aires como parte de una gira por Suramérica para explicar el alcance del acuerdo con Estados Unidos.
En el mismo sentido que Lugo, afín ideológicamente al mandatario venezolano, Hugo Chávez, y a la Alianza Bolivariana de las Américas (ALBA), se pronunció ayer la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, y el canciller de Perú, José Antonio García Belaúnde.
“Es parte del derecho soberano, del ejercicio de la soberanía de Colombia el hacer este tipo de acuerdos”, comentó el ministro peruano en declaraciones a varias emisoras colombianas.
El Gobierno peruano es por ahora el más comprensivo con la decisión de Uribe, que ha desatado las iras de Venezuela, Ecuador, Bolivia y Nicaragua, así como preocupación en Brasil y Chile.
Pese a esa inquietud expresada por portavoces gubernamentales chilenos en los últimos días, Bachelet trasmitió ayer a Uribe, a quien recibió en Santiago, el “respeto” de su país hacia el acuerdo militar que Colombia negocia con Estados Unidos.
“Bachelet ha reiterado que Chile respeta la soberanía, el interés nacional y las decisiones políticas de cada país en este continente, y en este caso particularmente de Colombia”, declaró Mariano Fernández, ministro de Relaciones Exteriores de Chile.
“Cómo nos vamos a involucrar nosotros en parecernos bien o mal que haya acuerdos militares de un país con otro. Nosotros lo respetamos”, recalcó el ministro, cuyo país ejerce la presidencia temporal de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) hasta el próximo día 10, fecha en la que la traspasará a Ecuador.
En Buenos Aires, siguiente escala de su gira, según han adelantado medios argentinos, Uribe va a escuchar críticas de su colega argentina, Cristina Fernández, al acuerdo castrense, como ya le pasó en La Paz con Evo Morales, quien subrayó que “permitir bases militares en Latinoamérica es una agresión a los Gobiernos y las democracias”.
La gira del presidente colombiano terminará hoy en Uruguay y Brasil.
Tanto el Gobierno colombiano como el estadounidense niegan que el convenio que está en la mesa de negociaciones sea una amenaza para la estabilidad de determinados países o de la región en su conjunto, como afirma Chávez.
El que reiteró ayer su postura es el jefe de Estado venezolano, quien volvió a afirmar que el Gobierno de Colombia trata de vincularle con las FARC para desviar la atención sobre las bases que podrán usar los estadounidenses.
En referencia a las denuncias por el hallazgo de armamento venezolano en poder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Chávez señaló que la intención de lo que calificó de “puñalada por la espalda” es “acallar” la “protesta diplomática” de su Gobierno por la “instalación de bases militares yanquis” en Colombia, lo que, “sin duda, es una amenaza para Venezuela”.
Chávez criticó, además, a Uribe por no asistir a la cumbre de la Unasur en Quito, donde se tratará el asunto del acuerdo colombo-estadounidense.
Según el mandatario venezolano, el “imperio yanqui” está tratando de “matar al nacer” la Unasur y acusó a Colombia, integrante de esa organización, de “prestarse” a ese juego.