Un deporte peligrosísimo
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Lunes 24 octubre, 2011
Un deporte peligrosísimo
El expiloto italiano Giacomo Agostini dijo ayer que no tenía “palabras para expresar tanto dolor” por la muerte del piloto de MotoGP Marco Simoncelli y aseguró que aunque este deporte es peligroso, “hay que detenerse ante tantos progresos (en los neumáticos), hacer las cosas como antes, sin ir al extremo”.
“Es muy duro cuando ocurren estas cosas. No tienes palabras y te encierras en ti mismo pensando en un muchacho joven que ha perdido la vida amando su deporte, que por desgracia sabemos que es peligroso”, afirmó Agostini a la televisión italiana.
Agostini, que ostenta el récord de títulos mundiales (15) y grandes premios conseguidos (122), agregó que Simoncelli fue arrastrado al interior de la pista por su moto y que los pilotos que iban detrás no pudieron evitarlo.
Según el expiloto, los neumáticos han podido tener su culpa, pero también los pilotos.
“Queremos que el neumático dure desde el principio al fin, sin que se reduzcan sus prestaciones y presionamos a los técnicos a que los construyan así. Sería más justo hacer como en mis tiempos, cuando el neumático se desgastaba y se iba más lento, hasta llegar todos a la meta en las mismas condiciones”, afirmó.
Agostini agregó que Simoncelli era “un niño, una persona agradable”, que le había asegurado que iría a visitarle este invierno a Bérgamo (norte de Italia, donde vive), ya que de esa zona es su novia.
El representante de Simoncelli, Carlo Pernat, dijo al telediario del primer canal de la televisión pública RAI, TG1, que el fallecido piloto era “un muchacho de otros tiempos, con los valores aprendidos en la familia”.
“Era un joven sin grillos en la cabeza, con muchos sueños y ambiciones y tantos amigos”, afirmó Pernat, que destacó el deseo de triunfar de Simoncelli, “porque sabía que podía hacerlo”.
Pernat señaló que Simoncelli llegó al triunfo gracias a su familia, a su padre y a su madre, “que lo tenían dentro de una campana de cristal”.
“Insisto, era un muchacho de otros tiempos, simpático, que saludaba a todos y tal vez demasiado criticado. Este deporte es peligroso aunque cosas como estas no deberían suceder, pero el mundo es esto. Lo recordaremos siempre como un futuro campeón del mundo”, agregó Pernat.
El piloto de Moto2 Mattia Pasini escribió en su página de Facebook que con la muerte de Simoncelli, con quien compartió parte de su carrera, se va un trozo de él, de su vida, de su corazón.
Roma
EFE
El expiloto italiano Giacomo Agostini dijo ayer que no tenía “palabras para expresar tanto dolor” por la muerte del piloto de MotoGP Marco Simoncelli y aseguró que aunque este deporte es peligroso, “hay que detenerse ante tantos progresos (en los neumáticos), hacer las cosas como antes, sin ir al extremo”.
“Es muy duro cuando ocurren estas cosas. No tienes palabras y te encierras en ti mismo pensando en un muchacho joven que ha perdido la vida amando su deporte, que por desgracia sabemos que es peligroso”, afirmó Agostini a la televisión italiana.
Agostini, que ostenta el récord de títulos mundiales (15) y grandes premios conseguidos (122), agregó que Simoncelli fue arrastrado al interior de la pista por su moto y que los pilotos que iban detrás no pudieron evitarlo.
Según el expiloto, los neumáticos han podido tener su culpa, pero también los pilotos.
“Queremos que el neumático dure desde el principio al fin, sin que se reduzcan sus prestaciones y presionamos a los técnicos a que los construyan así. Sería más justo hacer como en mis tiempos, cuando el neumático se desgastaba y se iba más lento, hasta llegar todos a la meta en las mismas condiciones”, afirmó.
Agostini agregó que Simoncelli era “un niño, una persona agradable”, que le había asegurado que iría a visitarle este invierno a Bérgamo (norte de Italia, donde vive), ya que de esa zona es su novia.
El representante de Simoncelli, Carlo Pernat, dijo al telediario del primer canal de la televisión pública RAI, TG1, que el fallecido piloto era “un muchacho de otros tiempos, con los valores aprendidos en la familia”.
“Era un joven sin grillos en la cabeza, con muchos sueños y ambiciones y tantos amigos”, afirmó Pernat, que destacó el deseo de triunfar de Simoncelli, “porque sabía que podía hacerlo”.
Pernat señaló que Simoncelli llegó al triunfo gracias a su familia, a su padre y a su madre, “que lo tenían dentro de una campana de cristal”.
“Insisto, era un muchacho de otros tiempos, simpático, que saludaba a todos y tal vez demasiado criticado. Este deporte es peligroso aunque cosas como estas no deberían suceder, pero el mundo es esto. Lo recordaremos siempre como un futuro campeón del mundo”, agregó Pernat.
El piloto de Moto2 Mattia Pasini escribió en su página de Facebook que con la muerte de Simoncelli, con quien compartió parte de su carrera, se va un trozo de él, de su vida, de su corazón.
Roma
EFE