Un paso hacia la conectividad

Jonathan Prendas

Diputado

Nueva República

La pandemia ocasionada por el Covid-19 desnudó la disparidad en el acceso al servicio de internet y las enormes brechas de infraestructura en telecomunicaciones que predominan entre las distintas regiones del país.

Estos factores implican limitaciones para el acceso a la educación, para el teletrabajo y, en consecuencia, ocasionan desiguales oportunidades de desarrollo. Es una verdadera tragedia que este año el MEP contabilizara 425.000 estudiantes sin acceso a la red.

Dinamizar la construcción de infraestructura y aumentar la cobertura en los servicios de telecomunicación está en sintonía con las metas dela Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). Según el estudio “Perspectivas de la Economía Digital”, realizado por esta organización, en el 2019 un 78,3% de la población hacía uso de Internet en nuestro país, mientras que el promedio de los países que la integran rondaba el 87%. Estos números posicionan a Costa Rica en la casilla 31 de las 38 naciones relacionadas.

En la ruta hacia el mejoramiento de la conectividad, un grupo de diputados presentamos la semana pasada el proyecto de “Ley para incentivar y promover la construcción de infraestructura de telecomunicaciones en Costa Rica”, que se tramita bajo el expediente 22.520.

Nuestro objetivo es propiciar que todas las entidades públicas que intervienen en los trámites y requisitos para la construcción de esta infraestructura, trabajen de manera coordinada para asegurar que las normas y las disposiciones técnicas o legales existentes se apliquen en forma pareja en todo el país. Busca que la labor de las instituciones del Estado se realice con mayor rapidez y con un claro enfoque en incentivar la ampliación de las telecomunicaciones en todos los rincones de nuestro territorio.

Para lograrlo, las entidades podrán autorizar y promover el uso de sus bienes inmuebles, entre los que se incluyen los edificios, para la instalación de los dispositivos que permitan ampliar la cobertura. Además, los trámites de las solicitudes de construcción se deberán aprobar con la mayor celeridad posible debido a su interés público.

La inversión de este tipo de infraestructura es clave no solo para brindar servicios de mejor calidad en las áreas de telefonía y transferencia de datos, sino para democratizar el acceso a redes y sistemas de información. En pleno siglo XXI, se trata de garantizar un derecho básico de todas las personas.

También potencia la innovación, pues un aumento del 10% en penetración de Internet es equivalente con un crecimiento de entre 0,5% y 1,2% en el número de nuevos emprendimientos. Al adoptar la banda ancha, las pymes pueden reducir los costos de distribución de información, lo cual facilita su acceso a nuevas técnicas productivas.

Mejorar y extender la colocación de equipos, torres y antenas por todo el territorio nacional le ayudará al país a ser más equitativo y competitivo. Este es un tema de naturaleza nacional que excede la esfera local y por esta razón es una de las prioridades de Nueva República, el partido propulsor de la iniciativa de ley.