Trichet pide mayor capitalización bancaria
| Sábado 12 diciembre, 2009
Trichet pide mayor capitalización bancaria
Londres -- Jean-Claude Trichet, gobernador del Banco Central Europeo (BCE), criticó el viernes en Londres “la cultura de las primas” a los banqueros y pidió a las entidades financieras que aprovechen el inicio de la recuperación económica para fortalecer su capitalización como instrumento preventivo frente a futuras crisis.
Trichet pronunció una conferencia en la City londinense en unas jornadas organizadas por “The Economist” en la que analizó las implicaciones de la nueva arquitectura de supervisión “macroprudencial” del sector financiero en Europa y el futuro papel de la Junta o Consejo Europeo de Riesgo Sistémico de la UE.
En el corazón del sistema financiero europeo, que genera el 8 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) del Reino Unido, el gobernador abordó la controvertida cuestión de las primas a los banqueros, pero no dejó lugar para la duda sobre su opinión.
“La llamada cultura de los bonos es uno de los muchos factores que pueden llevar al sistema financiero en la dirección equivocada, desde la intermediación a la especulación y desde la estabilidad a medio y largo plazo a la orientación a corto plazo”, manifestó.
Trichet consideró que esta cultura, que ha propiciado el cobro de sobresueldos multimillonarios por parte de algunos de los responsables de la crisis que puso al borde del colapso al sistema financiero internacional, convierte a la banca “en un sector que se sirve a si mismo, en vez de ser un sector de servicios”.
El máximo responsable de la política monetaria de la euro-zona también instó a los bancos, en el inicio de la recuperación, a un esfuerzo adicional de capitalización “pese a que los ratios de capital estén ahora por encima de los niveles pre-crisis”.
“Urjo a los bancos a aprovechar al máximo la reciente recuperación de sus márgenes de beneficio para fortalecer su posición de capital, en vez de distribuir una gran parte de sus beneficios o de pagar niveles sin garantías de compensaciones o de bonos a sus empleados”, dijo el gobernador.
“Unas cuentas de resultados saneadas -argumentó- ayudarán a los bancos a cumplir su función esencial en la economía: el crédito”.
Sobre los planes de rescate bancario y los paquetes estatales de estímulo fiscal, Trichet consideró que no ha llegado aún la hora de retirarlos por completo y abogó por analizar la situación caso por caso antes de suprimirlos “de una manera ordenada”.
“Una de las cuestiones que preocupan al BCE y a otros bancos centrales es la retirada de la medicina que evita la amenaza de la adicción o la dependencia. Hemos dejado claro que retiraremos el apoyo al crédito de manera ordenada y cuando corresponda”, señaló.
Cara al futuro, Trichet indicó que la Junta o Consejo Europeo de Riesgo Sistémico tendrá como tarea principal “realizar un análisis del riesgo, emitir alertas tempranas y hacer recomendaciones a los actores del mercado”, con el ánimo de ser “una autoridad moral”.
El organismo “vigilará y supervisará la estabilidad a medio y largo plazo del sistema financiero” y no intentará sustituir los mecanismos de supervisión que funcionan en el ámbito nacional de cada uno de los Estados miembros, sino “complementarlos”.
Trichet hizo una lectura positiva de la crisis, en el sentido de que ha servido para “destacar la importancia de mejorar nuestro conocimiento de la interconexión en el sistema financiero”.
“La crisis nos ha enseñado que los riesgos más grandes pueden emerger desde dentro del propio sistema financiero. No fue la economía real la que abocó al sistema financiero a esta situación de desorganización, sino al revés”, afirmó el gobernador del BCE. Otra lección aprendida es que “las turbulencias pueden surgir de sacudidas iniciales relativamente modestas” y comparó el aspecto del sistema anterior con el de “la ladera nevada de una montaña, que tiene un aspecto prístino y tranquilo, pero que se puede convertir en una avalancha causada por una pequeña alteración”.
El gobernador también lanzó un mensaje a las entidades financieras para que participen activamente en el nuevo sistema de control y supervisión, y aseguró que esta implicación no supondrá una mayor carga o responsabilidad para los bancos.
“Teniendo en cuenta que la supervisión macroprudencial requiere de los datos microprudenciales, estos últimos deberían ser accesibles para los supervisores y la confidencialidad estará plenamente garantizada. Cualquier petición adicional de información será una cuestión excepcional”, manifestó Trichet.
Concluyó su intervención destacando que los ciudadanos están muy pendientes de la futura supervisión de los bancos: “hemos contado de manera muy significativa con su apoyo para salvar el sistema financiero y no nos perdonarían tener que volver a hacerlo”.
Londres -- Jean-Claude Trichet, gobernador del Banco Central Europeo (BCE), criticó el viernes en Londres “la cultura de las primas” a los banqueros y pidió a las entidades financieras que aprovechen el inicio de la recuperación económica para fortalecer su capitalización como instrumento preventivo frente a futuras crisis.
Trichet pronunció una conferencia en la City londinense en unas jornadas organizadas por “The Economist” en la que analizó las implicaciones de la nueva arquitectura de supervisión “macroprudencial” del sector financiero en Europa y el futuro papel de la Junta o Consejo Europeo de Riesgo Sistémico de la UE.
En el corazón del sistema financiero europeo, que genera el 8 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) del Reino Unido, el gobernador abordó la controvertida cuestión de las primas a los banqueros, pero no dejó lugar para la duda sobre su opinión.
“La llamada cultura de los bonos es uno de los muchos factores que pueden llevar al sistema financiero en la dirección equivocada, desde la intermediación a la especulación y desde la estabilidad a medio y largo plazo a la orientación a corto plazo”, manifestó.
Trichet consideró que esta cultura, que ha propiciado el cobro de sobresueldos multimillonarios por parte de algunos de los responsables de la crisis que puso al borde del colapso al sistema financiero internacional, convierte a la banca “en un sector que se sirve a si mismo, en vez de ser un sector de servicios”.
El máximo responsable de la política monetaria de la euro-zona también instó a los bancos, en el inicio de la recuperación, a un esfuerzo adicional de capitalización “pese a que los ratios de capital estén ahora por encima de los niveles pre-crisis”.
“Urjo a los bancos a aprovechar al máximo la reciente recuperación de sus márgenes de beneficio para fortalecer su posición de capital, en vez de distribuir una gran parte de sus beneficios o de pagar niveles sin garantías de compensaciones o de bonos a sus empleados”, dijo el gobernador.
“Unas cuentas de resultados saneadas -argumentó- ayudarán a los bancos a cumplir su función esencial en la economía: el crédito”.
Sobre los planes de rescate bancario y los paquetes estatales de estímulo fiscal, Trichet consideró que no ha llegado aún la hora de retirarlos por completo y abogó por analizar la situación caso por caso antes de suprimirlos “de una manera ordenada”.
“Una de las cuestiones que preocupan al BCE y a otros bancos centrales es la retirada de la medicina que evita la amenaza de la adicción o la dependencia. Hemos dejado claro que retiraremos el apoyo al crédito de manera ordenada y cuando corresponda”, señaló.
Cara al futuro, Trichet indicó que la Junta o Consejo Europeo de Riesgo Sistémico tendrá como tarea principal “realizar un análisis del riesgo, emitir alertas tempranas y hacer recomendaciones a los actores del mercado”, con el ánimo de ser “una autoridad moral”.
El organismo “vigilará y supervisará la estabilidad a medio y largo plazo del sistema financiero” y no intentará sustituir los mecanismos de supervisión que funcionan en el ámbito nacional de cada uno de los Estados miembros, sino “complementarlos”.
Trichet hizo una lectura positiva de la crisis, en el sentido de que ha servido para “destacar la importancia de mejorar nuestro conocimiento de la interconexión en el sistema financiero”.
“La crisis nos ha enseñado que los riesgos más grandes pueden emerger desde dentro del propio sistema financiero. No fue la economía real la que abocó al sistema financiero a esta situación de desorganización, sino al revés”, afirmó el gobernador del BCE. Otra lección aprendida es que “las turbulencias pueden surgir de sacudidas iniciales relativamente modestas” y comparó el aspecto del sistema anterior con el de “la ladera nevada de una montaña, que tiene un aspecto prístino y tranquilo, pero que se puede convertir en una avalancha causada por una pequeña alteración”.
El gobernador también lanzó un mensaje a las entidades financieras para que participen activamente en el nuevo sistema de control y supervisión, y aseguró que esta implicación no supondrá una mayor carga o responsabilidad para los bancos.
“Teniendo en cuenta que la supervisión macroprudencial requiere de los datos microprudenciales, estos últimos deberían ser accesibles para los supervisores y la confidencialidad estará plenamente garantizada. Cualquier petición adicional de información será una cuestión excepcional”, manifestó Trichet.
Concluyó su intervención destacando que los ciudadanos están muy pendientes de la futura supervisión de los bancos: “hemos contado de manera muy significativa con su apoyo para salvar el sistema financiero y no nos perdonarían tener que volver a hacerlo”.