Tribunal Ambiental investiga desarrollos en Osa
| Sábado 12 julio, 2008
Barridas ambientales detectaron presuntas anomalías en cinco megaproyectos de la zona
Tribunal Ambiental investiga desarrollos en Osa
• Obras están ubicadas en Chontales y Ojochal, frente a Bahía Ballena
Ernesto Villalobos
evillalobos@larepublica.net
Cinco megaproyectos habitacionales ubicados sobre la fila costeña de Osa, en el Pacífico Sur, corren el riesgo de ser clausurados, una vez que el Tribunal Ambiental finalice el análisis de los informes de impacto.
Los desarrollos contemplarían más de 1.000 viviendas que pretenden abrir esta región al mercado de los bienes raíces. Se trata de más de 800 hectáreas integradas por inversionistas canadienses.
Cada uno de los complejos habitacionales está dividido en lotes que van desde los 1.500 hasta los 5 mil metros cuadrados.
“La mayoría de los proyectos ni siquiera cuentan con el permiso de viabilidad ambiental indispensable en este tipo de zonas, y ya han construido caminos y taludes, arrasando montaña e invadiendo zonas de protección de quebradas”, puntualizó José Lino Chaves, presidente del Tribunal Ambiental.
Las autoridades ambientales temen el impacto que los desarrollos podrían provocar sobre la belleza escénica de la fila costeña de Osa, la cual aún conserva uno de los reductos más importantes de bosque tropical húmedo del Pacífico Sur.
Una de las principales preocupaciones es el golpe que los proyectos tendrían sobre el recurso hídrico de la zona.
“La densidad poblacional ejercería presión no solo sobre el agua, sino también sobre el paisaje, el bosque aledaño y los frágiles suelos montañosos de la zona”, agregó Chaves. Asimismo, se verificó que buena parte de los lotes están localizados en zonas de pendiente mayor a 60 grados.
Como parte del trabajo realizado a lo largo de esta semana, los funcionarios del Tribunal Ambiental y del Ministerio del Ambiente y Energía encontraron una retroexcavadora trabajando en plena zona de protección de una quebrada.
La maquinaria estaba dedicada a trazar lo que próximamente se convertiría en un camino, el cual interconectaría las diferentes áreas del complejo, utilizando para ello el cauce del mismo riachuelo.
El viernes, los grupos de inspectores se encontraban recorriendo un proyecto más, que habrían descubierto dentro de la misma zona de impacto.
“En este hemos encontrado condiciones idénticas a las de los otros cinco desarrollos, lo cual nos hace pensar que los responsables recibirían las mismas sanciones”, indicó uno de los miembros del propio Tribunal.
A fin de determinar las eventuales medidas que se dictarían contra los autores, los miembros de Tribunal Ambiental se reunirán entre jueves y viernes de la próxima semana.
“Los abusos que hemos encontrado en esta barrida, nos dará mucho con qué demandar acciones resarcitorias, por parte de quienes hayan quebrantado la ley. Lo que hemos visto obliga a pensar en la eventual recomendación de que los proyectos sean cerrados totalmente”, concluyó el juez ambiental.
Sobre el tema se procuró la versión de los representantes de los proyectos, pero se encontraban fuera del país.
Tribunal Ambiental investiga desarrollos en Osa
• Obras están ubicadas en Chontales y Ojochal, frente a Bahía Ballena
Ernesto Villalobos
evillalobos@larepublica.net
Cinco megaproyectos habitacionales ubicados sobre la fila costeña de Osa, en el Pacífico Sur, corren el riesgo de ser clausurados, una vez que el Tribunal Ambiental finalice el análisis de los informes de impacto.
Los desarrollos contemplarían más de 1.000 viviendas que pretenden abrir esta región al mercado de los bienes raíces. Se trata de más de 800 hectáreas integradas por inversionistas canadienses.
Cada uno de los complejos habitacionales está dividido en lotes que van desde los 1.500 hasta los 5 mil metros cuadrados.
“La mayoría de los proyectos ni siquiera cuentan con el permiso de viabilidad ambiental indispensable en este tipo de zonas, y ya han construido caminos y taludes, arrasando montaña e invadiendo zonas de protección de quebradas”, puntualizó José Lino Chaves, presidente del Tribunal Ambiental.
Las autoridades ambientales temen el impacto que los desarrollos podrían provocar sobre la belleza escénica de la fila costeña de Osa, la cual aún conserva uno de los reductos más importantes de bosque tropical húmedo del Pacífico Sur.
Una de las principales preocupaciones es el golpe que los proyectos tendrían sobre el recurso hídrico de la zona.
“La densidad poblacional ejercería presión no solo sobre el agua, sino también sobre el paisaje, el bosque aledaño y los frágiles suelos montañosos de la zona”, agregó Chaves. Asimismo, se verificó que buena parte de los lotes están localizados en zonas de pendiente mayor a 60 grados.
Como parte del trabajo realizado a lo largo de esta semana, los funcionarios del Tribunal Ambiental y del Ministerio del Ambiente y Energía encontraron una retroexcavadora trabajando en plena zona de protección de una quebrada.
La maquinaria estaba dedicada a trazar lo que próximamente se convertiría en un camino, el cual interconectaría las diferentes áreas del complejo, utilizando para ello el cauce del mismo riachuelo.
El viernes, los grupos de inspectores se encontraban recorriendo un proyecto más, que habrían descubierto dentro de la misma zona de impacto.
“En este hemos encontrado condiciones idénticas a las de los otros cinco desarrollos, lo cual nos hace pensar que los responsables recibirían las mismas sanciones”, indicó uno de los miembros del propio Tribunal.
A fin de determinar las eventuales medidas que se dictarían contra los autores, los miembros de Tribunal Ambiental se reunirán entre jueves y viernes de la próxima semana.
“Los abusos que hemos encontrado en esta barrida, nos dará mucho con qué demandar acciones resarcitorias, por parte de quienes hayan quebrantado la ley. Lo que hemos visto obliga a pensar en la eventual recomendación de que los proyectos sean cerrados totalmente”, concluyó el juez ambiental.
Sobre el tema se procuró la versión de los representantes de los proyectos, pero se encontraban fuera del país.