Temprana despedida
Luis Fernado Rojas lrojas@larepublica.net | Miércoles 07 marzo, 2012
Temprana despedida
El argentino Jordi Arconada (2) cayó en el arranque ante un joven estadounidense que entró por la “qualy”
Ayer se completó la primera ronda del Costa Rica Bowl que se juega en el Tennis Club, con la sorpresa de la caída del sembrado 2 del torneo, el argentino Jordi Arconada.
El suramericano, con ranking 195 del mundo y que fue el último en ingresar al torneo, gracias a una tarjeta de invitación (wild card) de los organizadores, fue sorprendido por el estadounidense Ciro Riccardi, joven de 16 años de edad, quien el fin de semana pasado en la “qualy” tuvo que vencer a tres mexicanos en fila para ganarse su cupo en la llave principal.
Riccardi venció a Jordi 6-4 y 7-5 y ahora se la tendrá que ver con Kevin Major de Bahamas. El año pasado este estadounidense hizo semifinales en un grado cuatro, en Carolina del Sur, y cuartos de final en otro grado 4, en Atlanta.
En la rama masculina, Arconada fue el único de los seis primeros sembrados del torneo que no superó el arranque.
Del lado femenino igualmente solo una sembrada se fue por la vía rápida (sin tomar en cuenta el partido que la número uno Jennifer Brady (Estados Unidos) jugaba anoche ante la griega Valentini Grammatikopoulou.
En este caso, la que dijo adiós fue la mexicana Valeria Salazar, quien cayó el lunes en un disputado partido, en tres sets, ante la belga Britt Geukens, 5-7, 7-5 y 6-1.
Un dato interesante en este Bowl, en el que se inscribieron tenistas de 33 países, es que de los que se mantienen con vida un 40% es latinoamericano, 13 en total, siete mexicanos, dos venezolanos, tres salvadoreños y un chileno.
Importante destacar a los salvadoreños Jennifer Artiga y Astrid Araya y el joven Rafa Orantes. Las dos primeras dejaron fuera a jugadoras de Estados Unidos, y Rafa, a Luke Gamble, también estadounidense que reside en el país.
En el caso de Artiga viene de hacer semifinales en la Copa Galileo en Guatemala y la Copa Libertad en El Salvador donde cayó ante sendas jugadoras que están participando en el Bowl, la belga Geukens y la sembrada dos, Julia Elbaba (Estados Unidos), respectivamente.
Un latinoamericano que desea arribar hoy a cuartos de final es el mexicano Diego Núñez, quien enfrentará al estadounidense Ognjen Samardzic (7). Núñez expresó que viene de una larga gira que empezó en Ciudad de México, Guadalajara, luego El Salvador, Guatemala y que termina en Costa Rica.
“Ya he venido varias veces a este país y siempre me ha gustado jugar acá porque me siento muy cómodo; ahora lo que espero es cerrar bien la gira”.
Este tenista, de 16 años de edad y quien entrena en Florida desde hace año y medio, ha jugado en esta gira cuatro torneos grado 4, en dos llegó a cuartos de final, en uno ganó un dobles y en otro hizo semifinal de dobles.
Con respecto a su oponente de hoy, el año pasado lo enfrentó en un torneo en Estados Unidos, donde Samardzic lo venció 6-4 y 7-5.
Luis Rojas
lrojas@larepublica.net
El argentino Jordi Arconada (2) cayó en el arranque ante un joven estadounidense que entró por la “qualy”
Ayer se completó la primera ronda del Costa Rica Bowl que se juega en el Tennis Club, con la sorpresa de la caída del sembrado 2 del torneo, el argentino Jordi Arconada.
El suramericano, con ranking 195 del mundo y que fue el último en ingresar al torneo, gracias a una tarjeta de invitación (wild card) de los organizadores, fue sorprendido por el estadounidense Ciro Riccardi, joven de 16 años de edad, quien el fin de semana pasado en la “qualy” tuvo que vencer a tres mexicanos en fila para ganarse su cupo en la llave principal.
Riccardi venció a Jordi 6-4 y 7-5 y ahora se la tendrá que ver con Kevin Major de Bahamas. El año pasado este estadounidense hizo semifinales en un grado cuatro, en Carolina del Sur, y cuartos de final en otro grado 4, en Atlanta.
En la rama masculina, Arconada fue el único de los seis primeros sembrados del torneo que no superó el arranque.
Del lado femenino igualmente solo una sembrada se fue por la vía rápida (sin tomar en cuenta el partido que la número uno Jennifer Brady (Estados Unidos) jugaba anoche ante la griega Valentini Grammatikopoulou.
En este caso, la que dijo adiós fue la mexicana Valeria Salazar, quien cayó el lunes en un disputado partido, en tres sets, ante la belga Britt Geukens, 5-7, 7-5 y 6-1.
Un dato interesante en este Bowl, en el que se inscribieron tenistas de 33 países, es que de los que se mantienen con vida un 40% es latinoamericano, 13 en total, siete mexicanos, dos venezolanos, tres salvadoreños y un chileno.
Importante destacar a los salvadoreños Jennifer Artiga y Astrid Araya y el joven Rafa Orantes. Las dos primeras dejaron fuera a jugadoras de Estados Unidos, y Rafa, a Luke Gamble, también estadounidense que reside en el país.
En el caso de Artiga viene de hacer semifinales en la Copa Galileo en Guatemala y la Copa Libertad en El Salvador donde cayó ante sendas jugadoras que están participando en el Bowl, la belga Geukens y la sembrada dos, Julia Elbaba (Estados Unidos), respectivamente.
Un latinoamericano que desea arribar hoy a cuartos de final es el mexicano Diego Núñez, quien enfrentará al estadounidense Ognjen Samardzic (7). Núñez expresó que viene de una larga gira que empezó en Ciudad de México, Guadalajara, luego El Salvador, Guatemala y que termina en Costa Rica.
“Ya he venido varias veces a este país y siempre me ha gustado jugar acá porque me siento muy cómodo; ahora lo que espero es cerrar bien la gira”.
Este tenista, de 16 años de edad y quien entrena en Florida desde hace año y medio, ha jugado en esta gira cuatro torneos grado 4, en dos llegó a cuartos de final, en uno ganó un dobles y en otro hizo semifinal de dobles.
Con respecto a su oponente de hoy, el año pasado lo enfrentó en un torneo en Estados Unidos, donde Samardzic lo venció 6-4 y 7-5.
Luis Rojas
lrojas@larepublica.net