Riesgo de exposición cambiaria
| Viernes 23 marzo, 2012
Riesgo de exposición cambiaria
El riesgo relacionado a las fluctuaciones del tipo de cambio colón-dólar puede tener implicaciones relacionadas al tipo de exposición a los que se enfrentan las unidades económicas en la economía costarricense. Un tipo de exposición es el económico, el cual es la exposición de los flujos de efectivo de los entes económicos ante fluctuaciones en el tipo de cambio.
El sistema de bandas cambiarias en Costa Rica tiene como fin permitir, en el corto plazo, dar el salto a la libre flotación. Entonces, ¿Qué ha detenido al Banco Central de incursionar en un sistema así?
La actual crisis europea, generada por los bonos soberanos griegos y su excesivo nivel de déficit fiscal (160% del PIB), al igual que el aumento en los precios internacionales del barril de petróleo (referencia Brent de $125), generaron nuevas preocupaciones en la economía doméstica, y en el riesgo a una mayor volatilidad bajo un sistema de libre flotación cambiaria.
El mercado de derivados cambiarios en Costa Rica es una industria infante y poco profunda. Actualmente el INS es el único oferente de Contratos por Diferencias (CFDs). Faltan desarrollar más las posibilidades para las mesas de negociación de los bancos comerciales al ofrecer más y mejores instrumentos derivados adaptables a la realidad nacional, como contratos a plazo, contratos de futuros, opciones financieras, y los swaps. La falta de derivados cambiarios no brinda cobertura a las unidades económicas en Costa Rica, con lo que el riesgo cambiario podría aumentar en la libre flotación.
Además, el mercado cambiario nacional es poco líquido, lo que genera fluctuaciones fuertes cuando grandes cantidades de divisa se transan. La libre flotación pura eliminaría la posibilidad de que el Banco Central intervenga en el mercado cambiario ante fuertes apreciaciones o depreciaciones de la moneda local.
Como si eso fuera poco, no está demás mencionar las presiones macroeconómicas que empieza a experimentar el tipo de cambio colón-dólar vía Paridad de Tasas de Interés (las cuales se encuentran al alza recientemente por necesidad de recursos para financiar el déficit fiscal) , y vía Paridad de Poder Adquisitivo (con expectativas racionales de presión al alza de la inflación local por los precios internacionales del petróleo), o también vía efecto internacional Fisher (efecto combinado de las dos anteriores vía tasa de interés nominal). Considero apresurado pensar en la libre flotación con estas presiones macroeconómicas presentes, al quitársele la posibilidad al Banco Central de intervenir el mercado cambiario doméstico.
Oscar Ugalde
Ph. D.
Administrator/Faculty advisor
Costa Rica Center/LIU Global
Long Island University
El riesgo relacionado a las fluctuaciones del tipo de cambio colón-dólar puede tener implicaciones relacionadas al tipo de exposición a los que se enfrentan las unidades económicas en la economía costarricense. Un tipo de exposición es el económico, el cual es la exposición de los flujos de efectivo de los entes económicos ante fluctuaciones en el tipo de cambio.
El sistema de bandas cambiarias en Costa Rica tiene como fin permitir, en el corto plazo, dar el salto a la libre flotación. Entonces, ¿Qué ha detenido al Banco Central de incursionar en un sistema así?
La actual crisis europea, generada por los bonos soberanos griegos y su excesivo nivel de déficit fiscal (160% del PIB), al igual que el aumento en los precios internacionales del barril de petróleo (referencia Brent de $125), generaron nuevas preocupaciones en la economía doméstica, y en el riesgo a una mayor volatilidad bajo un sistema de libre flotación cambiaria.
El mercado de derivados cambiarios en Costa Rica es una industria infante y poco profunda. Actualmente el INS es el único oferente de Contratos por Diferencias (CFDs). Faltan desarrollar más las posibilidades para las mesas de negociación de los bancos comerciales al ofrecer más y mejores instrumentos derivados adaptables a la realidad nacional, como contratos a plazo, contratos de futuros, opciones financieras, y los swaps. La falta de derivados cambiarios no brinda cobertura a las unidades económicas en Costa Rica, con lo que el riesgo cambiario podría aumentar en la libre flotación.
Además, el mercado cambiario nacional es poco líquido, lo que genera fluctuaciones fuertes cuando grandes cantidades de divisa se transan. La libre flotación pura eliminaría la posibilidad de que el Banco Central intervenga en el mercado cambiario ante fuertes apreciaciones o depreciaciones de la moneda local.
Como si eso fuera poco, no está demás mencionar las presiones macroeconómicas que empieza a experimentar el tipo de cambio colón-dólar vía Paridad de Tasas de Interés (las cuales se encuentran al alza recientemente por necesidad de recursos para financiar el déficit fiscal) , y vía Paridad de Poder Adquisitivo (con expectativas racionales de presión al alza de la inflación local por los precios internacionales del petróleo), o también vía efecto internacional Fisher (efecto combinado de las dos anteriores vía tasa de interés nominal). Considero apresurado pensar en la libre flotación con estas presiones macroeconómicas presentes, al quitársele la posibilidad al Banco Central de intervenir el mercado cambiario doméstico.
Oscar Ugalde
Ph. D.
Administrator/Faculty advisor
Costa Rica Center/LIU Global
Long Island University