Reforma tributaria aún es necesaria
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Sábado 06 septiembre, 2008
Reforma tributaria aún es necesaria
A pesar de que el gobierno desistió de realizarla, el Ministro de Hacienda considera que se requiere para mantener estabilidad en las finanzas del Estado
Israel Aragón
iaragon@larepublica.net
La pretendida reforma tributaria que el gobierno ha intentado aprobar en la Asamblea Legislativa desde hace tres administraciones, y de la cual ya desistió el presidente Oscar Arias, sigue siendo una necesidad para las arcas del estado, según el criterio de Guillermo Zúñiga, ministro de Hacienda.
La recaudación fiscal ha aumentado en los últimos meses, lo que contribuyó a que el presupuesto nacional para 2009 creciera un 18% y se financiara en un 72% con ingresos corrientes.
No obstante, para el gobierno sigue siendo necesario aumentar la base de sus ingresos para invertir los niveles esperados en áreas como infraestructura o investigación y educación, consideró Zúñiga.
De acuerdo con las proyecciones del Ministerio, si se pretende mantener una relación entre deuda pública y producto interno bruto (PIB) a los niveles previstos para este año y el próximo, es necesario aumentar los ingresos a niveles que solo una reforma tributaria lograría.
“Si queremos más dinero para colocar en temas clave como infraestructura, tecnologías de la información, educación o en otras áreas sociales, lógicamente necesitamos recursos nuevos”, afirmó Zúñiga.
Sobre la decisión de descartar durante la actual administración la reforma, agregó que “sí la necesitamos, pero el problema es que no hay ambiente político”.
Actualmente el único proyecto fiscal con el que se pretende mejorar los ingresos tributarios es el que busca gravar las viviendas que cuesten más de ¢100 millones.
Para el Ministro, de mantenerse los niveles actuales de ingresos fiscales, la inclusión de gastos adicionales para 2009 produce un cambio en la tendencia actual de sostenibilidad y provocaría un incremento en la relación deuda-PIB, la cual pasaría de un 23,9% en 2010 al 29,1% en 2012, producto de una reducción en el superávit primario (-1,1%) en relación con el superávit primario requerido para estabilizar la deuda (-0,6%).
Tal situación se vería traducida en pagos más altos por concepto de intereses, lo que aumentaría el déficit fiscal y generaría insostenibilidad en el mediano plazo.
Sin embargo, algunos partidos políticos no apoyan la teoría de que aumentar los impuestos significaría incrementar los ingresos generados por ellos.
Por su parte, algunos especialistas a nivel internacional recomiendan otros tipos de sistemas como el flat-tax o impuesto único.
“Tener un mismo impuesto para todos los agentes económicos mejora la recaudación fiscal siempre y cuando sea bajo, pues evita que los grandes contribuyentes lo evadan”, dijo Dan Mitchell, experto en el llamado flat-tax o impuesto único, del Instituto Cato, en Washington.
A pesar de que el gobierno desistió de realizarla, el Ministro de Hacienda considera que se requiere para mantener estabilidad en las finanzas del Estado
Israel Aragón
iaragon@larepublica.net
La pretendida reforma tributaria que el gobierno ha intentado aprobar en la Asamblea Legislativa desde hace tres administraciones, y de la cual ya desistió el presidente Oscar Arias, sigue siendo una necesidad para las arcas del estado, según el criterio de Guillermo Zúñiga, ministro de Hacienda.
La recaudación fiscal ha aumentado en los últimos meses, lo que contribuyó a que el presupuesto nacional para 2009 creciera un 18% y se financiara en un 72% con ingresos corrientes.
No obstante, para el gobierno sigue siendo necesario aumentar la base de sus ingresos para invertir los niveles esperados en áreas como infraestructura o investigación y educación, consideró Zúñiga.
De acuerdo con las proyecciones del Ministerio, si se pretende mantener una relación entre deuda pública y producto interno bruto (PIB) a los niveles previstos para este año y el próximo, es necesario aumentar los ingresos a niveles que solo una reforma tributaria lograría.
“Si queremos más dinero para colocar en temas clave como infraestructura, tecnologías de la información, educación o en otras áreas sociales, lógicamente necesitamos recursos nuevos”, afirmó Zúñiga.
Sobre la decisión de descartar durante la actual administración la reforma, agregó que “sí la necesitamos, pero el problema es que no hay ambiente político”.
Actualmente el único proyecto fiscal con el que se pretende mejorar los ingresos tributarios es el que busca gravar las viviendas que cuesten más de ¢100 millones.
Para el Ministro, de mantenerse los niveles actuales de ingresos fiscales, la inclusión de gastos adicionales para 2009 produce un cambio en la tendencia actual de sostenibilidad y provocaría un incremento en la relación deuda-PIB, la cual pasaría de un 23,9% en 2010 al 29,1% en 2012, producto de una reducción en el superávit primario (-1,1%) en relación con el superávit primario requerido para estabilizar la deuda (-0,6%).
Tal situación se vería traducida en pagos más altos por concepto de intereses, lo que aumentaría el déficit fiscal y generaría insostenibilidad en el mediano plazo.
Sin embargo, algunos partidos políticos no apoyan la teoría de que aumentar los impuestos significaría incrementar los ingresos generados por ellos.
Por su parte, algunos especialistas a nivel internacional recomiendan otros tipos de sistemas como el flat-tax o impuesto único.
“Tener un mismo impuesto para todos los agentes económicos mejora la recaudación fiscal siempre y cuando sea bajo, pues evita que los grandes contribuyentes lo evadan”, dijo Dan Mitchell, experto en el llamado flat-tax o impuesto único, del Instituto Cato, en Washington.