Puerto de transferencia logra avance
Danny Canales dannycanales.asesor@larepublica.net | Miércoles 29 octubre, 2008
Puerto de transferencia logra avance
Danny Canales
dcanales@larepublica.net
Costa Rica podría tener un puerto de transferencia de mercadería en el Caribe.
La estructura serviría para que los barcos de gran tamaño que no pueden cruzar por el Canal de Panamá pasen la mercadería en naves más pequeñas que continúen el recorrido.
La construcción del puerto fue propuesta al país por la empresa American Gategay Development (Amega), mediante la figura de concesión por iniciativa privada.
Ese modelo le permite a la empresa privada proponer la construcción de obras públicas que el país necesite. De resultar el proyecto de interés para el gobierno, entonces se procederá con los estudios para darla posteriormente en concesión.
En este caso, la Junta de Administración Portuaria y de Desarrollo Económico de la Vertiente Atlántica y el Consejo Nacional de Concesiones (CNC) coincidieron en la importancia del muelle para el país, adelantó Guillermo Matamoros, viceministro de Concesiones.
Este es el primer proyecto de concesión por iniciativa privada que logra avanzar desde que se aprobó ese modelo.
Al darle luz verde se le encomienda a Amega realizar los estudios de factibilidad de la obra. El grupo de capital británico-canadiense se comprometió a entregar los análisis en un año.
Si la factibilidad cumple con las especificaciones ambientales, técnicas, económicas y financieras requeridas, entonces el CNC sacará el proyecto a concurso.
Para darlo en concesión se abriría una licitación internacional en el cual Amega podrá participar en igualdad de condiciones con el resto de las empresas interesadas.
En caso de que la compañía no gane el concurso, entonces la empresa ganadora le deberá reconocer el costo de los análisis realizados.
El puerto de transferencia podrá atender barcos con capacidad de hasta 12 mil contenedores. Ahí en el puerto, se descargarían los megacarries en barcos con capacidad para atravesar el Canal.
Matamoros aclaró que el puerto de transferencias no competirá con la concesión del muelle de Moín que impulsa el Poder Ejecutivo, ya que no consiste en un puerto de carga y descarga.
De acuerdo con las estimaciones preliminares, el costo del puerto de transferencias rondaría los $800 millones, detalló el viceministro de Concesiones.
Para recuperar la inversión, el concesionario operaría el muelle por 50 años. Además tendría que pagar un canon al Estado.
Solo en la fase de construcción se prevé que se requerirán unos 7 mil operarios. Por su parte, para la operación de la estructura se necesitarán al menos 1.000 empleados.
La cercanía de Costa Rica con el Canal de Panamá es lo que interesó a los inversores, comentó Matamoros.
A pesar de que tiene una década vigente, son pocos los proyectos que se han gestionado mediante la figura de concesión por iniciativa privada.
Antes había fracasado un plan para construir una nueva carretera a Limón.
Danny Canales
dcanales@larepublica.net
Costa Rica podría tener un puerto de transferencia de mercadería en el Caribe.
La estructura serviría para que los barcos de gran tamaño que no pueden cruzar por el Canal de Panamá pasen la mercadería en naves más pequeñas que continúen el recorrido.
La construcción del puerto fue propuesta al país por la empresa American Gategay Development (Amega), mediante la figura de concesión por iniciativa privada.
Ese modelo le permite a la empresa privada proponer la construcción de obras públicas que el país necesite. De resultar el proyecto de interés para el gobierno, entonces se procederá con los estudios para darla posteriormente en concesión.
En este caso, la Junta de Administración Portuaria y de Desarrollo Económico de la Vertiente Atlántica y el Consejo Nacional de Concesiones (CNC) coincidieron en la importancia del muelle para el país, adelantó Guillermo Matamoros, viceministro de Concesiones.
Este es el primer proyecto de concesión por iniciativa privada que logra avanzar desde que se aprobó ese modelo.
Al darle luz verde se le encomienda a Amega realizar los estudios de factibilidad de la obra. El grupo de capital británico-canadiense se comprometió a entregar los análisis en un año.
Si la factibilidad cumple con las especificaciones ambientales, técnicas, económicas y financieras requeridas, entonces el CNC sacará el proyecto a concurso.
Para darlo en concesión se abriría una licitación internacional en el cual Amega podrá participar en igualdad de condiciones con el resto de las empresas interesadas.
En caso de que la compañía no gane el concurso, entonces la empresa ganadora le deberá reconocer el costo de los análisis realizados.
El puerto de transferencia podrá atender barcos con capacidad de hasta 12 mil contenedores. Ahí en el puerto, se descargarían los megacarries en barcos con capacidad para atravesar el Canal.
Matamoros aclaró que el puerto de transferencias no competirá con la concesión del muelle de Moín que impulsa el Poder Ejecutivo, ya que no consiste en un puerto de carga y descarga.
De acuerdo con las estimaciones preliminares, el costo del puerto de transferencias rondaría los $800 millones, detalló el viceministro de Concesiones.
Para recuperar la inversión, el concesionario operaría el muelle por 50 años. Además tendría que pagar un canon al Estado.
Solo en la fase de construcción se prevé que se requerirán unos 7 mil operarios. Por su parte, para la operación de la estructura se necesitarán al menos 1.000 empleados.
La cercanía de Costa Rica con el Canal de Panamá es lo que interesó a los inversores, comentó Matamoros.
A pesar de que tiene una década vigente, son pocos los proyectos que se han gestionado mediante la figura de concesión por iniciativa privada.
Antes había fracasado un plan para construir una nueva carretera a Limón.