Profesores molestos con sindicatos
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Martes 30 junio, 2009
Profesores molestos con sindicatos
“Nunca vamos a aceptar que no nos paguen de manera directa ni mucho menos que personas que se dicen llamar defensoras de nuestros derechos, hablen por nosotros cuando ni siquiera conocen el modelo donde trabajamos desde hace más de 20 años”, precisó Antonio Mora, profesor de estudios sociales y educación cívica del Colegio María Inmaculada de Moravia y representante de los docentes.
Por su parte en los sindicatos consideran que el proyecto pone en peligro la educación pública y a raíz de ello solicitaron que los salarios sean transferidos a las administraciones de los centros educativos y no de manera directa a los educadores, situación que molestó a los docentes.
“No es que desconfiemos de las congregaciones religiosas, pero conocemos a nuestro país y no deseamos que la transferencia se convierta en un mecanismo inseguro a la hora de percibir el salario. Con el sustento de la familia no se juega”, dijo Alison Rojas, profesora del Colegio María Inmaculada de Grecia.
Yessenia Garita
ygarita@larepublica.net
Los profesores que laboran en los centros educativos subvencionados o semipúblicos solicitaron a los representantes sindicales no declararse como sus defensores ni mucho menos intervenir en la defensa de sus derechos.
Los educadores piden a los sindicalistas no tomar posición ante el proyecto de ley que pretende regular los estímulos a la educación privada.“Nunca vamos a aceptar que no nos paguen de manera directa ni mucho menos que personas que se dicen llamar defensoras de nuestros derechos, hablen por nosotros cuando ni siquiera conocen el modelo donde trabajamos desde hace más de 20 años”, precisó Antonio Mora, profesor de estudios sociales y educación cívica del Colegio María Inmaculada de Moravia y representante de los docentes.
Por su parte en los sindicatos consideran que el proyecto pone en peligro la educación pública y a raíz de ello solicitaron que los salarios sean transferidos a las administraciones de los centros educativos y no de manera directa a los educadores, situación que molestó a los docentes.
“No es que desconfiemos de las congregaciones religiosas, pero conocemos a nuestro país y no deseamos que la transferencia se convierta en un mecanismo inseguro a la hora de percibir el salario. Con el sustento de la familia no se juega”, dijo Alison Rojas, profesora del Colegio María Inmaculada de Grecia.
Yessenia Garita
ygarita@larepublica.net