POR FAVOR
| Lunes 15 septiembre, 2008
POR FAVOR…SILENCIO
GAPARI
La conquista de la cuarta Copa Federación de las cinco últimas puestas en juego, dejó en evidencia la autoridad de Rusia y su condición de fructífero vivero de tenistas que desde hace tiempo dominan el circuito profesional femenino y las competencias por equipos.
Shamil Tarpischev, acaparador de responsabilidades en el tenis de Rusia, es el presidente de la Federación de Tenis, el capitán del equipo de la Copa Davis y de la Copa Federación, acumula talentos entre las mujeres dedicadas a este deporte.
Tiene claro Tarpischev que las rusas “son las mujeres más fuertes del mundo”. Y por eso transita tranquilo en cada compromiso, independientemente de las bajas, porque las posibilidades de elección son innumerables.
De hecho, Rusia ha ganado cuatro títulos de la Copa Federación con 15 jugadoras diferentes. Solo Svetlana Kuznetsova ha participado en todos los éxitos con su país.
El conjunto ruso afrontó la final de la Copa Federación con el flamante éxito en los últimos Juegos Olímpicos, donde copó el podio. Elena Dementieva fue oro, Dinara Safina plata y Vera Zvonareva bronce. Solo esta última jugó en Madrid. Para conquistar el cuarto título de la Copa Federación.
Actualmente, la mitad del top ten del ranking es ruso. Dementieva es la cuarta del mundo, Safina la quinta, Sharapova la sexta, Kuznetsova la sétima y Vera Zvonareva la novena. La estadounidense Serena Williams y las serbias Ana Ivanovic y Jelena Jankovic son las únicas que frenan, por ahora, el impulso ruso. Anna Chakvetadze es la duodécima.
Rusia aparece reflejada en la puja por los torneos de enjundia. En Australia, por ejemplo, el triunfo fue para Sharapova en la última edición. En Wimbledon, la siberiana logró el triunfo en 2004.
En el Abierto de Estados Unidos, Kuznetsova, finalista en 2007, logró el triunfo tres años antes. En 2006 la victoria fue para Sharapova. Y en Roland Garros, Safina fue finalista.
El momento cumbre fue en 2004. El tenis ruso acaparó los torneos del Grand Slam. Wimbledon con Sharapova. El Abierto de Estados Unidos con Kuznetsova y París con la final entre Elena Dementieva y la vencedora, Anastasia Myskina.
Al acecho del trono dejado vacante por Henin, retirada hace un año, Rusia contempla cada año su propia cosecha. En Madrid aparecieron Elena Vesnina y Ekaterina Makarova. Dispuestas a tomar impulso.
GAPARI
La conquista de la cuarta Copa Federación de las cinco últimas puestas en juego, dejó en evidencia la autoridad de Rusia y su condición de fructífero vivero de tenistas que desde hace tiempo dominan el circuito profesional femenino y las competencias por equipos.
Shamil Tarpischev, acaparador de responsabilidades en el tenis de Rusia, es el presidente de la Federación de Tenis, el capitán del equipo de la Copa Davis y de la Copa Federación, acumula talentos entre las mujeres dedicadas a este deporte.
Tiene claro Tarpischev que las rusas “son las mujeres más fuertes del mundo”. Y por eso transita tranquilo en cada compromiso, independientemente de las bajas, porque las posibilidades de elección son innumerables.
De hecho, Rusia ha ganado cuatro títulos de la Copa Federación con 15 jugadoras diferentes. Solo Svetlana Kuznetsova ha participado en todos los éxitos con su país.
El conjunto ruso afrontó la final de la Copa Federación con el flamante éxito en los últimos Juegos Olímpicos, donde copó el podio. Elena Dementieva fue oro, Dinara Safina plata y Vera Zvonareva bronce. Solo esta última jugó en Madrid. Para conquistar el cuarto título de la Copa Federación.
Actualmente, la mitad del top ten del ranking es ruso. Dementieva es la cuarta del mundo, Safina la quinta, Sharapova la sexta, Kuznetsova la sétima y Vera Zvonareva la novena. La estadounidense Serena Williams y las serbias Ana Ivanovic y Jelena Jankovic son las únicas que frenan, por ahora, el impulso ruso. Anna Chakvetadze es la duodécima.
Rusia aparece reflejada en la puja por los torneos de enjundia. En Australia, por ejemplo, el triunfo fue para Sharapova en la última edición. En Wimbledon, la siberiana logró el triunfo en 2004.
En el Abierto de Estados Unidos, Kuznetsova, finalista en 2007, logró el triunfo tres años antes. En 2006 la victoria fue para Sharapova. Y en Roland Garros, Safina fue finalista.
El momento cumbre fue en 2004. El tenis ruso acaparó los torneos del Grand Slam. Wimbledon con Sharapova. El Abierto de Estados Unidos con Kuznetsova y París con la final entre Elena Dementieva y la vencedora, Anastasia Myskina.
Al acecho del trono dejado vacante por Henin, retirada hace un año, Rusia contempla cada año su propia cosecha. En Madrid aparecieron Elena Vesnina y Ekaterina Makarova. Dispuestas a tomar impulso.