Peregrinación
| Sábado 06 diciembre, 2008
Peregrinación
Arabia Saudí recibe a más de dos millones de musulmanes procedentes de todo el mundo, que peregrinan a La Meca para cumplir con el quinto pilar del Islam.
Según las autoridades saudíes, se han emitido más de 1.750 mil visados para peregrinos extranjeros y se han concedido unos 500 mil permisos especiales para los propios saudíes, que necesitan una autorización especial para entrar en las ciudades santas de La Meca y Medina.
Asimismo, se han adoptado estrictas medidas de seguridad para evitar atentados y estampidas humanas, que en años anteriores causaron centenares de muertos.
Un total de 100 mil efectivos de seguridad se han desplegado en las ciudades santas de La Meca y Medina para velar por los fieles, ha señalado el ministerio de Interior saudí.
Para garantizar la fluidez del tráfico, se ha modificado el sentido de algunas calles y carreteras y, como novedad de este año, habrá coches especiales para trasladar a personas mayores y a los discapacitados.
Además, se han establecido turnos entre los creyentes para cumplir con los rituales de la peregrinación y evitar así grandes aglomeraciones.
Arabia Saudí recibe a más de dos millones de musulmanes procedentes de todo el mundo, que peregrinan a La Meca para cumplir con el quinto pilar del Islam.
Según las autoridades saudíes, se han emitido más de 1.750 mil visados para peregrinos extranjeros y se han concedido unos 500 mil permisos especiales para los propios saudíes, que necesitan una autorización especial para entrar en las ciudades santas de La Meca y Medina.
Asimismo, se han adoptado estrictas medidas de seguridad para evitar atentados y estampidas humanas, que en años anteriores causaron centenares de muertos.
Un total de 100 mil efectivos de seguridad se han desplegado en las ciudades santas de La Meca y Medina para velar por los fieles, ha señalado el ministerio de Interior saudí.
Para garantizar la fluidez del tráfico, se ha modificado el sentido de algunas calles y carreteras y, como novedad de este año, habrá coches especiales para trasladar a personas mayores y a los discapacitados.
Además, se han establecido turnos entre los creyentes para cumplir con los rituales de la peregrinación y evitar así grandes aglomeraciones.