Paul reedita sus "McCartneys"
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Viernes 17 junio, 2011
Paul reedita sus “McCartneys”
Paul McCartney publicó en 1970 un álbum en solitario que certificó la muerte de los Beatles y diez años más tarde puso fin a la aventura de su grupo Wings con otro disco como solista. Ambos trabajos salen esta semana a la venta en una versión remasterizada con material extra.
El álbum “McCartney” apareció originalmente en abril de 1970 y fue enviado a la prensa acompañado por una entrevista en la que Paul confirmaba un secreto a voces: los Beatles no volverían a tocar juntos.
Tras la grabación de “Abbey Road”, en 1969, cuando la disolución del grupo era inevitable, McCartney se refugió en una granja de Escocia junto a su esposa Linda y empezó a grabar los temas de su primer disco en solitario.
El resultado fue un álbum minimalista, alejado completamente de la majestuosidad del trabajo final de los Beatles, en el que McCartney tocaba todos los instrumentos y Linda le echaba una mano en algunas partes vocales, además de proporcionar la artística foto de la portada, que se convirtió en un icono del pop.
Paul regresó a los estudios de Abbey Road para completar algunos temas del disco, como el monumental “Maybe I’m Amazed”, considerado uno de los mejores temas de su carrera en solitario.
Pero la mayoría de los cortes de “McCartney” son temas acústicos (“Every night”, “Junk”), algunos de ellos instrumentales, con los que Paul experimentaba con la intención de escapar de la enorme sombra de los Beatles y se mostraba como un músico completo.
Pese a la desconcertante propuesta, el álbum alcanzó el primer puesto de las listas norteamericanas —en el Reino Unido solo fue número dos— y transcurridos más de 40 años permanece como uno de los trabajos más brillantes del músico británico.
“McCartney” regresa ahora al mercado de la mano de Concord (Universal) con un sonido remasterizado que devuelve la frescura a unas canciones básicas, limpias y sin pretensiones de competir con los clásicos que Paul firmó junto a John Lennon.
La nueva edición incluye un CD con tomas alternativas y versiones en directo y un DVD que narra la historia de la grabación del disco e incluye actuaciones.
Con el tiempo, McCartney volvería a componer canciones más orientadas a las listas de ventas y encadenaría una larga serie de éxitos junto a un grupo de acompañamiento, Wings, formado con Linda y el guitarrista Denny Laine, durante los años setenta.
Con Wings, Paul recuperó el placer de tocar en directo -llevaba sin hacerlo desde que en 1966 los Beatles se retiraron de los escenarios-, pero en 1980 se cansó del invento y volvió a encerrarse en casa para, de nuevo, crear música en solitario.
“McCartney II” volvía a tener el carácter experimental de su antecesor, pero su sonido era completamente distinto.
Paul jugó a su antojo con los sintetizadores que comenzaban a estar de moda por entonces.
No se olvidó de incluir un éxito en el disco, el single “Coming up”, que abría un álbum con el que volvió a ser número uno en el Reino Unido esta vez se quedó en el tercer puesto en Estados Unidos.
La remasterización no ha podido borrar los efectos del atracón de sintetizadores que se dio Paul en “McCartney II”, pero el disco ofrece joyas como “On the Way”, donde el beatle se exhibe de nuevo como gran músico.
El material extra que acompaña esta edición recupera rarezas y caras B (“Check my Machine”, “Secret Friend”) y el villancico “Wonderful Christmastime”.
Madrid / EFE
Paul McCartney publicó en 1970 un álbum en solitario que certificó la muerte de los Beatles y diez años más tarde puso fin a la aventura de su grupo Wings con otro disco como solista. Ambos trabajos salen esta semana a la venta en una versión remasterizada con material extra.
El álbum “McCartney” apareció originalmente en abril de 1970 y fue enviado a la prensa acompañado por una entrevista en la que Paul confirmaba un secreto a voces: los Beatles no volverían a tocar juntos.
Tras la grabación de “Abbey Road”, en 1969, cuando la disolución del grupo era inevitable, McCartney se refugió en una granja de Escocia junto a su esposa Linda y empezó a grabar los temas de su primer disco en solitario.
El resultado fue un álbum minimalista, alejado completamente de la majestuosidad del trabajo final de los Beatles, en el que McCartney tocaba todos los instrumentos y Linda le echaba una mano en algunas partes vocales, además de proporcionar la artística foto de la portada, que se convirtió en un icono del pop.
Paul regresó a los estudios de Abbey Road para completar algunos temas del disco, como el monumental “Maybe I’m Amazed”, considerado uno de los mejores temas de su carrera en solitario.
Pero la mayoría de los cortes de “McCartney” son temas acústicos (“Every night”, “Junk”), algunos de ellos instrumentales, con los que Paul experimentaba con la intención de escapar de la enorme sombra de los Beatles y se mostraba como un músico completo.
Pese a la desconcertante propuesta, el álbum alcanzó el primer puesto de las listas norteamericanas —en el Reino Unido solo fue número dos— y transcurridos más de 40 años permanece como uno de los trabajos más brillantes del músico británico.
“McCartney” regresa ahora al mercado de la mano de Concord (Universal) con un sonido remasterizado que devuelve la frescura a unas canciones básicas, limpias y sin pretensiones de competir con los clásicos que Paul firmó junto a John Lennon.
La nueva edición incluye un CD con tomas alternativas y versiones en directo y un DVD que narra la historia de la grabación del disco e incluye actuaciones.
Con el tiempo, McCartney volvería a componer canciones más orientadas a las listas de ventas y encadenaría una larga serie de éxitos junto a un grupo de acompañamiento, Wings, formado con Linda y el guitarrista Denny Laine, durante los años setenta.
Con Wings, Paul recuperó el placer de tocar en directo -llevaba sin hacerlo desde que en 1966 los Beatles se retiraron de los escenarios-, pero en 1980 se cansó del invento y volvió a encerrarse en casa para, de nuevo, crear música en solitario.
“McCartney II” volvía a tener el carácter experimental de su antecesor, pero su sonido era completamente distinto.
Paul jugó a su antojo con los sintetizadores que comenzaban a estar de moda por entonces.
No se olvidó de incluir un éxito en el disco, el single “Coming up”, que abría un álbum con el que volvió a ser número uno en el Reino Unido esta vez se quedó en el tercer puesto en Estados Unidos.
La remasterización no ha podido borrar los efectos del atracón de sintetizadores que se dio Paul en “McCartney II”, pero el disco ofrece joyas como “On the Way”, donde el beatle se exhibe de nuevo como gran músico.
El material extra que acompaña esta edición recupera rarezas y caras B (“Check my Machine”, “Secret Friend”) y el villancico “Wonderful Christmastime”.
Madrid / EFE