Ortega busca reelegirse
| Lunes 20 julio, 2009
Sandinistas celebraron ayer el 30 aniversario de la revolución
Ortega busca reelegirse
Gobernante nicaragüense llamó a las fuerzas opositoras a trabajar “para tener una mejor constitución”
Managua
EFE
Los sandinistas celebraron ayer el 30 aniversario de la revolución con una multitudinaria concentración que estuvo marcada por la crisis política que atraviesa Honduras y una propuesta de referendo que permita la reelección presidencial de Daniel Ortega.
El gobernante nicaragüense, que presidió ese acto sandinista, celebrado en la Plaza de la Fe, Juan Pablo II, hizo un llamamiento a las fuerzas políticas opositoras de este país a trabajar “para tener una mejor constitución”.
Ortega sugirió reformar la constitución para establecer la figura de referendo revocatorio, que otorgue potestad a los nicaragüenses de decidir, cuando quieran, si reeligen al presidente, legisladores, alcaldes u otras autoridades de elección popular, o si los sacan del poder.
“Si vamos a ser justos y parejos, que el derecho de reelección sea para todos y que el pueblo, con su voto, premie o castigue”, subrayó el mandatario, tras criticar a los diputados por oponerse a una reforma constitucional que permita la reelección presidencial consecutiva.
Ortega dejó entrever que impulsará una encuesta, similar a la que quería convocar en Honduras el depuesto presidente Manuel Zelaya el 28 de junio pasado cuando fue derrocado, para preguntar a la población si desean que se incluya la figura de referendo revocatorio en la Carta Magna.
“Aquí se puede hacer (esa consulta) sin ningún temor, porque podemos ir a una referendo, a una votación de ese tipo, y el pueblo podrá votar libremente, porque aquí el Ejército no lo va a reprimir, sino que va a proteger (a la población), al igual que la policía”, dijo el líder sandinista.
Ortega agregó que esa posibilidad, de la que no dio detalles de cuándo lo hará y si pedirá el permiso del congreso, “son cuestiones que están totalmente dentro de la lógica constitucional, del derecho, y es necesario entregarle ese derecho al pueblo”.
El presidente confirmó así su interés en reformar la constitución para establecer la reelección presidencial indefinida, que abiertamente persigue, y cambiar el sistema político presidencialista por uno parlamentario.
La Constitución de Nicaragua prohíbe la reelección presidencial consecutiva, pero no la alterna.
Las reformas constitucionales en Nicaragua deben ser aprobadas en dos legislaturas y con al menos dos tercios de los 92 diputados que integran la Asamblea Nacional, cifra que no alcanzan los sandinistas y sus aliados, que reúnen a alrededor de 47.
En otra parte de su largo discurso, Ortega se refirió a la crisis política que atraviesa Honduras y reafirmó su respaldo al depuesto presidente Manuel Zelaya, quien se encuentra en Managua, pero no participó en el acto de los sandinistas.
El mandatario nicaragüense pidió a las fuerzas armadas hondureñas no seguir siendo instrumento de los golpistas, a la vez que criticó a su colega costarricense, Óscar Arias, mediador de ese conflicto, a quien calificó de “instrumento de la política golpista de los yanquis”.
El gobernante reiteró que al presidente estadounidense, “Barack Obama, ni una seña le hicieron del golpe de Estado”.
Ortega, que durante el acto cantó a capella varias canciones testimoniales de la revolución, comenzó su discurso contando una conversación que mantuvo con el líder cubano, Fidel Castro.
Ortega busca reelegirse
Gobernante nicaragüense llamó a las fuerzas opositoras a trabajar “para tener una mejor constitución”
Managua
EFE
Los sandinistas celebraron ayer el 30 aniversario de la revolución con una multitudinaria concentración que estuvo marcada por la crisis política que atraviesa Honduras y una propuesta de referendo que permita la reelección presidencial de Daniel Ortega.
El gobernante nicaragüense, que presidió ese acto sandinista, celebrado en la Plaza de la Fe, Juan Pablo II, hizo un llamamiento a las fuerzas políticas opositoras de este país a trabajar “para tener una mejor constitución”.
Ortega sugirió reformar la constitución para establecer la figura de referendo revocatorio, que otorgue potestad a los nicaragüenses de decidir, cuando quieran, si reeligen al presidente, legisladores, alcaldes u otras autoridades de elección popular, o si los sacan del poder.
“Si vamos a ser justos y parejos, que el derecho de reelección sea para todos y que el pueblo, con su voto, premie o castigue”, subrayó el mandatario, tras criticar a los diputados por oponerse a una reforma constitucional que permita la reelección presidencial consecutiva.
Ortega dejó entrever que impulsará una encuesta, similar a la que quería convocar en Honduras el depuesto presidente Manuel Zelaya el 28 de junio pasado cuando fue derrocado, para preguntar a la población si desean que se incluya la figura de referendo revocatorio en la Carta Magna.
“Aquí se puede hacer (esa consulta) sin ningún temor, porque podemos ir a una referendo, a una votación de ese tipo, y el pueblo podrá votar libremente, porque aquí el Ejército no lo va a reprimir, sino que va a proteger (a la población), al igual que la policía”, dijo el líder sandinista.
Ortega agregó que esa posibilidad, de la que no dio detalles de cuándo lo hará y si pedirá el permiso del congreso, “son cuestiones que están totalmente dentro de la lógica constitucional, del derecho, y es necesario entregarle ese derecho al pueblo”.
El presidente confirmó así su interés en reformar la constitución para establecer la reelección presidencial indefinida, que abiertamente persigue, y cambiar el sistema político presidencialista por uno parlamentario.
La Constitución de Nicaragua prohíbe la reelección presidencial consecutiva, pero no la alterna.
Las reformas constitucionales en Nicaragua deben ser aprobadas en dos legislaturas y con al menos dos tercios de los 92 diputados que integran la Asamblea Nacional, cifra que no alcanzan los sandinistas y sus aliados, que reúnen a alrededor de 47.
En otra parte de su largo discurso, Ortega se refirió a la crisis política que atraviesa Honduras y reafirmó su respaldo al depuesto presidente Manuel Zelaya, quien se encuentra en Managua, pero no participó en el acto de los sandinistas.
El mandatario nicaragüense pidió a las fuerzas armadas hondureñas no seguir siendo instrumento de los golpistas, a la vez que criticó a su colega costarricense, Óscar Arias, mediador de ese conflicto, a quien calificó de “instrumento de la política golpista de los yanquis”.
El gobernante reiteró que al presidente estadounidense, “Barack Obama, ni una seña le hicieron del golpe de Estado”.
Ortega, que durante el acto cantó a capella varias canciones testimoniales de la revolución, comenzó su discurso contando una conversación que mantuvo con el líder cubano, Fidel Castro.