No más demoras a la Ley de Tránsito
Lo mejor podría ser que la Ley de Tránsito encuentre un adecuado equilibrio entre medidas únicamente de castigo y otras que al reprimir también encierren el aspecto educativo
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Sábado 29 mayo, 2010
Mientras los diputados esperaron y concentraron su atención en otras cosas, la realidad es que el país sigue y debe hacerlo por buen camino. Sin embargo, algo que afecta a algunos sectores de la economía como la Ley de Tránsito, ha tenido que estar ahí, maltratada por una aprobación sin el debido estudio, sin una definición acertada.
La legislatura anterior, pareciera que en forma apresurada y sin el debido estudio, sorprendió a la ciudadanía con la aprobación de una ley que ha sido calificada como “draconiana” y a la cual se le vieron innumerables defectos. Por alguno de ellos el proyecto tuvo que ir a la Sala Constitucional y de ahí ha regresado al Congreso para las correcciones del caso.
Sin embargo, como lo explica una nota de este medio el viernes, hay entre los diputados quienes opinan que el proyecto de ley debería volver a estudiarse en comisión. Entre los puntos que destacan como posibles cambios a incorporar está el sistema de puntos, bajar el nivel de tolerancia del alcohol a 0,50 gramos por litro de sangre y reducción de multas consideradas excesivas para el poder adquisitivo de los costarricenses.
Ciertamente, lo mejor podría ser que la ley encuentre un adecuado equilibrio entre medidas únicamente represivas y de castigo y otras que al reprimir también encierren el aspecto educativo.
No hay nada que escape a la educación. Debemos comprender que este factor atraviesa todo y que puede significar la diferencia en múltiples situaciones de la vida nacional que requieren un cambio en la conducta de los costarricenses.
Quizás la instalación del sistema de puntos, que ha dado buenos resultados en otros países que ya lo experimentaron, sea conveniente para los nacionales, no muy habituados a la disciplina. Quizás nos ayude a cambiar la cultura y aprender que conservar nuestra licencia de conducir requiere que demostremos ser merecedores de ella.
Costa Rica debe continuar avanzando pero no puede hacerlo bien en medio de la anarquía, ni pueden funcionar las cosas si no existe claridad sobre las reglas del juego.
Esas reglas deben dictarse luego de un serio estudio pero este tampoco puede demorarse más de lo indispensable.