Más dinero para estudiar
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Miércoles 20 junio, 2012
Créditos para educación superior volverían
Más dinero para estudiar
Unas 1.600 personas afectadas por falta de dinero en últimos cuatro años
Los casi 1.600 estudiantes de educación superior afectados por la falta de préstamos para financiar su carrera, podrían motivar que en las próximas semanas incremente el fondeo para estos créditos.
Ayer precisamente varios diputados se reunieron con los representantes de Conape, para urgir la devolución de los recursos necesarios para este programa.
Conape es el ente estatal que administra el sistema de préstamos estudiantiles.
En los últimos cuatro años, unos 1.600 estudiantes que cumplían los requisitos no pudieron obtener el crédito.
Esta limitante se comprueba en las aulas de las universidades privadas, la mayoría de ellas con menor matrícula.
Los préstamos para estudios superiores los otorga Conape, la cual obtiene el dinero de un porcentaje de las utilidades de los bancos estatales.
En 2008, el monto disponible pasó por un periodo de seis años del 5% de las utilidades de los bancos estatales, al 2%, por iniciativa de la entonces diputada Mayi Antillón.
Esto ha significado una disminución de unos $12 millones en los fondos disponibles para la educación superior o técnica especializada.
El 3% restante iba a financiar el programa de sistema de Banca para el Desarrollo, dedicado a préstamos para pequeños productores; sin embargo, casi nada de este monto ha sido utilizado.
El daño contra la población que necesita financiar sus estudios superiores motivó la semana pasada una iniciativa de ley, para volver los créditos al 5% de las utilidades bancarias, cancelando anticipadamente la medida temporal.
La posibilidad de una reforma a la ley goza de gran aceptación, al punto que el proyecto tuvo un trato especial, para que sea votado en comisión el próximo martes y despachado por el Plenario lo más pronto.
“Hemos participado en reuniones con autoridades de gobierno y diputados para recuperar el 100% de los aportes que nos brindaban los bancos estatales y que se encuentran plasmados en la Ley de Creación de Conape”, expresó Adrián Blanco, secretario ejecutivo de esa entidad.
El promedio de cada crédito otorgado por Conape es de unos $8 mil, a una tasa de interés del 8% (en colones), mientras que en los bancos los préstamos normales para educación rondan el 14%.
El programa de préstamos para educación superior es seguro, ya que el atraso en el pago a más de tres meses apenas supera el 1% y su fuente principal de ingresos es el cobro de intereses por los créditos concedidos.
Los estudiantes inician el pago de su crédito a Conape hasta que reciben su título y se otorga un periodo de gracia de seis meses, mientras los deudores logran incorporarse al mercado laboral.
Otra propuesta en el ambiente impulsada por algunos sectores es bancarizar el crédito educativo, pero sería condenar a miles de estudiantes a desistir de sus aspiraciones de formación profesional, señaló Blanco.
Y es que debido a su difícil condición socioeconómica, los estudiantes que acuden a Conape no son sujetos de crédito para educación por parte del sistema bancario nacional, por lo que deben recurrir a fuentes de financiamiento alternativas.
“Estaría apoyando en principio el proyecto, aunque deseamos oír el criterio de todas las partes involucradas. Tratándose de créditos para universitarios, es necesario apoyarlos para que tengan mayor acceso a la educación”, expresó Oscar Alfaro, quien preside dicha comisión.
La aprobación del transitorio que disminuyó los recursos para Conape pudo ser un error, pues dicha entidad cumple un papel social, aseguró el legislador verdiblanco.
La asignación de créditos se encuentra a cargo de un consejo directivo, presidido por el ministro de Educación o quien él designe, un representante del Ministerio de Planificación, otro del Banco Central, otro del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y finalmente un representante de las empresas privadas que otorguen becas.
Johnny Castro
jcastro@larepublica.net
Más dinero para estudiar
Unas 1.600 personas afectadas por falta de dinero en últimos cuatro años
Ayer precisamente varios diputados se reunieron con los representantes de Conape, para urgir la devolución de los recursos necesarios para este programa.
Conape es el ente estatal que administra el sistema de préstamos estudiantiles.
En los últimos cuatro años, unos 1.600 estudiantes que cumplían los requisitos no pudieron obtener el crédito.
Esta limitante se comprueba en las aulas de las universidades privadas, la mayoría de ellas con menor matrícula.
Los préstamos para estudios superiores los otorga Conape, la cual obtiene el dinero de un porcentaje de las utilidades de los bancos estatales.
En 2008, el monto disponible pasó por un periodo de seis años del 5% de las utilidades de los bancos estatales, al 2%, por iniciativa de la entonces diputada Mayi Antillón.
Esto ha significado una disminución de unos $12 millones en los fondos disponibles para la educación superior o técnica especializada.
El 3% restante iba a financiar el programa de sistema de Banca para el Desarrollo, dedicado a préstamos para pequeños productores; sin embargo, casi nada de este monto ha sido utilizado.
El daño contra la población que necesita financiar sus estudios superiores motivó la semana pasada una iniciativa de ley, para volver los créditos al 5% de las utilidades bancarias, cancelando anticipadamente la medida temporal.
La posibilidad de una reforma a la ley goza de gran aceptación, al punto que el proyecto tuvo un trato especial, para que sea votado en comisión el próximo martes y despachado por el Plenario lo más pronto.
“Hemos participado en reuniones con autoridades de gobierno y diputados para recuperar el 100% de los aportes que nos brindaban los bancos estatales y que se encuentran plasmados en la Ley de Creación de Conape”, expresó Adrián Blanco, secretario ejecutivo de esa entidad.
El promedio de cada crédito otorgado por Conape es de unos $8 mil, a una tasa de interés del 8% (en colones), mientras que en los bancos los préstamos normales para educación rondan el 14%.
El programa de préstamos para educación superior es seguro, ya que el atraso en el pago a más de tres meses apenas supera el 1% y su fuente principal de ingresos es el cobro de intereses por los créditos concedidos.
Los estudiantes inician el pago de su crédito a Conape hasta que reciben su título y se otorga un periodo de gracia de seis meses, mientras los deudores logran incorporarse al mercado laboral.
Otra propuesta en el ambiente impulsada por algunos sectores es bancarizar el crédito educativo, pero sería condenar a miles de estudiantes a desistir de sus aspiraciones de formación profesional, señaló Blanco.
Y es que debido a su difícil condición socioeconómica, los estudiantes que acuden a Conape no son sujetos de crédito para educación por parte del sistema bancario nacional, por lo que deben recurrir a fuentes de financiamiento alternativas.
“Estaría apoyando en principio el proyecto, aunque deseamos oír el criterio de todas las partes involucradas. Tratándose de créditos para universitarios, es necesario apoyarlos para que tengan mayor acceso a la educación”, expresó Oscar Alfaro, quien preside dicha comisión.
La aprobación del transitorio que disminuyó los recursos para Conape pudo ser un error, pues dicha entidad cumple un papel social, aseguró el legislador verdiblanco.
La asignación de créditos se encuentra a cargo de un consejo directivo, presidido por el ministro de Educación o quien él designe, un representante del Ministerio de Planificación, otro del Banco Central, otro del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y finalmente un representante de las empresas privadas que otorguen becas.
Johnny Castro
jcastro@larepublica.net