Maestro mexicano agita bonos de Pimco 

 Para Pedro Hernández, maestro de escuela primaria del estado sureño de Oaxaca que está en huelga, las protestas de su sindicato que agitan a la capital de México no tienen que ver sólo con la educación. Apuntan a detener al presidente Enrique Peña Nieto.
“Estamos en contra de todas las reformas estructurales”, dijo la semana pasada el hombre de 37 años mientras caminaba por el boulevard central de Ciudad de México como parte de una marcha organizada de 15 mil  personas. Hernández llevaba una pancarta que decía: “México no tiene presidente”.
Las manifestaciones, que convencieron a los legisladores mexicanos de aplazar la votación de las leyes de reforma educativa que habrían sometido a los docentes a evaluaciones estandarizadas, son una señal para Barclays Plc de que Peña Nieto puede tener dificultades para hacer aprobar sus proyectos de energía e impuestos sin modificaciones.
La oposición a esas promesas, que lo llevaron a la victoria en julio de 2012, también está minando la confianza en la economía de México que llevó a los inversores extranjeros como Pacific Investment Management Co. a aumentar sus carteras de bonos hasta un récord este año.
El rendimiento de los bonos mexicanos denominados en pesos con vencimiento en 2024 trepó 1,93 puntos porcentuales desde un mínimo récord alcanzado el 9 de mayo, perdiendo 18% en términos de dólar en ese período frente a una caída promedio del 10% en todos los mercados emergentes.
Las pérdidas en dólares se vieron exacerbadas por una moneda local que cayó 4,8% frente al dólar en agosto, más que ninguna otra en América Latina.
“La reforma educativa muestra que al gobierno no le va a ser fácil aprobar otras reformas que afectan a determinados grupos o intereses políticos”, dijo Marco Oviedo, economista mexicano jefe de Barclays, en una entrevista telefónica desde la capital del país. “No va a ser nada sencillo”.
Las carteras extranjeras de bonos de renta fija de México treparon a un récord de 1,16 billones de pesos ($87 mil millones) en mayo luego de que Peña Nieto trabajara con los partidos rivales para planear los cambios constitucionales que llevaron al proyecto de reforma educativa.
 

Bloomberg