Las puertas del inicio
Dinia Vargas dvargas@larepublica.net | Jueves 14 mayo, 2009
Las puertas del inicio
Ticos que estudiaban en el exterior fueron los encargados de traer el golf al país
Dinia Vargas
dvargas@larepublica.net
El golf tiene su larga historia en Costa Rica. Todo apunta a que los primeros intentos por jugar golf, que en realidad se puede describir como tirar unas bolas, se realizaron en la Sabana.
“Por varios años en la Sabana jugaron ingleses, americanos y un grupo muy pequeño de ticos, entre ellos mi padre, quien había aprendido a jugar en sus tiempos de estudiante en Londres”, recordó Arturo Montealegre.
Esos costarricenses que lograron estudiar en el extranjero fueron los encargados de traer este deporte al país. Lo que había en el parque era “como tres hoyos y lo que podían hacer era solo tirar unas bolas, ese lugar donde antes jugaban lo llamaron Costa Rica Golf Club y actualmente es el Costa Rica Tennis Club”, recordó Roberto López, profesional del Costa Rica Country Club.
Tanto para Montealegre, quien tuvo la oportunidad de escuchar las historias que le relataba su padre, como para López, quien es uno de los golfistas nacionales más interesados en conocer los inicios de este deporte en el país realizando sus propias investigaciones, el primer campo de golf que se construyó en Costa Rica fue gracias a la empresa bananera United Fruit Company.
“Con el tiempo, en los años 30 y 40, la United Fruit Company en sus diversas fincas le dio importancia a este deporte”, señaló Montealegre. Así en esos terrenos construyeron “campos de golf”, que fueron más que todo lugares para ir a tirar unas cuantas bolas, como en Limón, Batán y Coto.
Sin embargo, la primera cancha de verdad, con 18 hoyos, fue construida en Golfito. “El primer campo lo instalaron los americanos en las bananeras en Golfito, que era donde operaban los trabajadores estadounidenses que venían a encargase de puestos importantes, así que les construyeron el campo para que se entretuvieran. En ese entonces Golfito era el centro de actividad agrícola, estaba el aeropuerto, era como un mercado grande. Esta cancha recibió el nombre de Golfito Golf Club”, aseguró López.
Ya a inicios de los años 40 nació la idea de construir un campo en el Valle Central y fue así como nació el Costa Rica Country Club.
“El Country fue construido por un grupo muy reducido de personas. Tenían suficiente terreno para hacer un campo de 18 hoyos, pero el arranque fue muy difícil con muchos problemas económicos, por falta de socios, y ese grupo, que estaba formado por señores de gran influencia económica en su momento, tomó la decisión de que cada uno de ellos, solo podía tener una acción por familia inmediata. La idea de ellos era desarrollar el Country y no hacerse ricos (eran otras épocas, donde los señores eran muy rectos).
La propiedad, que tenía alrededor de 100 manzanas, se fue vendiendo poco a poco para poder seguir adelante con su locura de tener un campo de golf exclusivo, y no como pasaba en las fincas bananeras, donde también tuve la oportunidad de jugar golf, que se hacía en medio de casas, escuelas y bananales, entre otros”, manifestó Montealegre.
En su inicio, el Country solamente tuvo tres hoyos, con el tiempo fue creciendo y al final duró dos años en terminar de construirse y hacer realidad el proyecto del doctor Víctor Manuel Yglesias “Meme” y un grupo de amigos: Antonio Facio Ulloa, Jorge Castro y Gilberth Aubert.
“Al final fueron 13 señores los fundadores del Costa Rica Country Club. Pero sería Jaime Solera Bennett quien se encargaría de darle un impulso muy importante al golf, ayudando económicamente para que se terminara de construir”, concluyó López.
Ticos que estudiaban en el exterior fueron los encargados de traer el golf al país
Dinia Vargas
dvargas@larepublica.net
El golf tiene su larga historia en Costa Rica. Todo apunta a que los primeros intentos por jugar golf, que en realidad se puede describir como tirar unas bolas, se realizaron en la Sabana.
“Por varios años en la Sabana jugaron ingleses, americanos y un grupo muy pequeño de ticos, entre ellos mi padre, quien había aprendido a jugar en sus tiempos de estudiante en Londres”, recordó Arturo Montealegre.
Esos costarricenses que lograron estudiar en el extranjero fueron los encargados de traer este deporte al país. Lo que había en el parque era “como tres hoyos y lo que podían hacer era solo tirar unas bolas, ese lugar donde antes jugaban lo llamaron Costa Rica Golf Club y actualmente es el Costa Rica Tennis Club”, recordó Roberto López, profesional del Costa Rica Country Club.
Tanto para Montealegre, quien tuvo la oportunidad de escuchar las historias que le relataba su padre, como para López, quien es uno de los golfistas nacionales más interesados en conocer los inicios de este deporte en el país realizando sus propias investigaciones, el primer campo de golf que se construyó en Costa Rica fue gracias a la empresa bananera United Fruit Company.
“Con el tiempo, en los años 30 y 40, la United Fruit Company en sus diversas fincas le dio importancia a este deporte”, señaló Montealegre. Así en esos terrenos construyeron “campos de golf”, que fueron más que todo lugares para ir a tirar unas cuantas bolas, como en Limón, Batán y Coto.
Sin embargo, la primera cancha de verdad, con 18 hoyos, fue construida en Golfito. “El primer campo lo instalaron los americanos en las bananeras en Golfito, que era donde operaban los trabajadores estadounidenses que venían a encargase de puestos importantes, así que les construyeron el campo para que se entretuvieran. En ese entonces Golfito era el centro de actividad agrícola, estaba el aeropuerto, era como un mercado grande. Esta cancha recibió el nombre de Golfito Golf Club”, aseguró López.
Ya a inicios de los años 40 nació la idea de construir un campo en el Valle Central y fue así como nació el Costa Rica Country Club.
“El Country fue construido por un grupo muy reducido de personas. Tenían suficiente terreno para hacer un campo de 18 hoyos, pero el arranque fue muy difícil con muchos problemas económicos, por falta de socios, y ese grupo, que estaba formado por señores de gran influencia económica en su momento, tomó la decisión de que cada uno de ellos, solo podía tener una acción por familia inmediata. La idea de ellos era desarrollar el Country y no hacerse ricos (eran otras épocas, donde los señores eran muy rectos).
La propiedad, que tenía alrededor de 100 manzanas, se fue vendiendo poco a poco para poder seguir adelante con su locura de tener un campo de golf exclusivo, y no como pasaba en las fincas bananeras, donde también tuve la oportunidad de jugar golf, que se hacía en medio de casas, escuelas y bananales, entre otros”, manifestó Montealegre.
En su inicio, el Country solamente tuvo tres hoyos, con el tiempo fue creciendo y al final duró dos años en terminar de construirse y hacer realidad el proyecto del doctor Víctor Manuel Yglesias “Meme” y un grupo de amigos: Antonio Facio Ulloa, Jorge Castro y Gilberth Aubert.
“Al final fueron 13 señores los fundadores del Costa Rica Country Club. Pero sería Jaime Solera Bennett quien se encargaría de darle un impulso muy importante al golf, ayudando económicamente para que se terminara de construir”, concluyó López.