La necesidad de un Plan Nacional de Competitividad
| Viernes 28 diciembre, 2012
Cada sector y ámbito de acción requiere la elaboración de planes concretos, con acciones estratégicas, cronogramas y responsables
La necesidad de un Plan Nacional de Competitividad
Algunos asocian competitividad con reformas y la visualizan como escusa para eliminar garantías laborales, ambientales y otros logros sociales, en cierto sentido buscan la competitividad espuria.
Para otros, esa palabra por sí misma es mala, ya que la ligan a baja en salarios, reformas neoclásicas y pérdida de sus condiciones laborales (espuria). Aspiran a mantener el estatu quo, no mejorar la productividad. Ambas percepciones han llevado a la inacción. En el caso de Costa Rica es necesaria la aplicación del concepto de “competitividad sistémica”, dentro los ámbitos de acción están:
El tradicional micro (eficiencia de las empresas). Aquí hay tareas urgentes para las Mipymes, se requieren políticas públicas proactivas y efectivas.
El meso (fomento tecnológico, formación profesional, infraestructura, fomento de exportaciones, políticas selectivas, fortalecimiento institucional). El fomento a las exportaciones ha mostrado insuficiencia, se requieren los otros componentes: formación de alta calidad orientada a las áreas de demanda y la innovación y desarrollo para la empresa nacional. El desarrollo de la infraestructura es urgente y deben buscarse diversas formas de solución.
Macro (política cambiaria, política de competencia, fiscal, monetaria y comercial, con contexto político y jurídico estable). Se ha avanzado, la sujeción de la política monetaria a las metas de inflación versus crecimiento es tema de discusión. El ámbito fiscal requiere modificaciones sustanciales, falta definición de la política cambiaria.
Nivel meta (valores socioculturales, gobernabilidad, capacidad para formular visiones y proyectos estratégicos, cohesión social, define patrones de organización social, económica y política). Pensar a largo plazo, nos hace falta y actuar en consonancia, para ello se requieren acuerdos nacionales multisectores y de partidos, para definir una estrategia de desarrollo de mediano y largo plazo, lo político es nuestro principal lastre.
Cada sector y ámbito de acción requiere la elaboración de planes de acción concretos, con acciones estratégicas, cronogramas y responsables. La integración del sector empresarial, organizaciones sociales y de la economía social, con el liderazgo y claridad de acción del gobierno es vital.
El gran ausente es un Plan Nacional de Competitividad, elaborado con la participación de los actores relacionados, su compromiso de trabajo y la ejecución de acciones en la búsqueda de la competitividad de largo plazo. Un plan que integre las instituciones, sectores, organizaciones y aspiraciones es el instrumento para que el talento humano, el buen uso de los recursos naturales y el desarrollo empresarial nacional puedan ser los medios para el mejoramiento y bienestar con equidad y sostenibilidad ambiental para el país a largo plazo. Para ello se requiere visión, empeño y liderazgo. ¿Dónde están?
Dr. Roberto Jiménez Gómez, economista
martin.j.g.2010@gmail.com