INVU: 54 AÑOS INCUMPLIENDO LA LEY
Diego Vargas Rodríguez redaccion@larepublica.net | Lunes 13 febrero, 2023
Diego Vargas Rodríguez
Diputado, Partido Liberal Progresista
En 54 años, el Instituto Nacional de Vivienda y Urbanismo (INVU) nunca ha elaborado el Plan Nacional de Desarrollo Urbano tal y como lo manda la Ley 4240 Ley de Planificación Urbana.
Esa omisión –negligencia, para ser más preciso- no es irrelevante; por el contrario, dicho plan constituye el instrumento formal a partir del cual el INVU debe ejercer sus funciones de revisión de los planes reguladores cantonales. Es decir, a la fecha, los planes reguladores se aprueban o rechazan sin que exista aún un marco normativo que sustente esas decisiones.
La Ley de Planificación Urbana se promulgó el 15 de noviembre de 1968. Es una ley bastante visionaria, que concibió el proceso macro de planificación urbana desde la perspectiva país, lo que implicaba la definición del ordenamiento territorial desde la visión del Estado para el desarrollo de las regiones y los cantones.
La ley establece la obligatoriedad de que el INVU cree una política pública de ordenamiento territorial acorde con las diferentes realidades del país: como la ciudad, las costas o las zonas rurales. Sin embargo, han pasado los años y la tarea continúa sin hacerse, lo cual conlleva una responsabilidad sobre quienes, durante décadas, nos han gobernado.
Recientemente, le remití un oficio a la Presidenta Ejecutiva del INVU y Ministra de Vivienda, Jéssica Martínez Porras, en la que puntualmente le consulté ¿en qué año se elaboró por parte del INVU el Plan Nacional de Desarrollo Urbano?
La respuesta que recibí es penosa; porque evidencia que ese Instituto no ha ido más allá de diferentes acciones poco concretas que en definitiva no corresponden a la elaboración de un verdadero Plan y que ha intentado erróneamente homogenizar instrumentos como el PRUGAM y el Plan GAM con el Plan Nacional de Desarrollo Urbano.
Como parte de los esfuerzos que demanda el país para establecer una ruta clara de desarrollo económico, social, cultural y ambiental, hoy resultan de primera importancia todas las actividades relativas a la planificación del territorio, considerando para tales efectos tanto la planificación nacional (políticas y directrices nacionales), como la de escala regional (ordenamiento intercantonal) y local (planificación urbana de los gobiernos locales).
Desde mi experiencia debo decir que de nada sirve la creación de un “Superministerio” de Territorio, Hábitat y Vivienda, como lo está proponiendo el Poder Ejecutivo con un nombre sexy, que fusiona al INVU, al BANHVI y al MIVAH si no se corrigen los nudos, la inoperancia y el incumplimiento de la ley que imperan en materia de planificación urbana.
Desde mi posición como diputado y mediante los medios legales a mi alcance exigiré que se redacte, apruebe y ponga en ejecución, de una vez por todas, la demanda establecida en la Ley 4240.
Es hora de que se acaben las islas de poder y los grupos que controlan para su beneficio la planificación urbana en el país. Es hora de que se cumpla la ley, se planifique y se orden los territorios, y para ello, es imperativo que se elabore el Plan Nacional de Desarrollo Urbano.