Idea esponjosa
Melissa González mgonzalezt@larepublica.net | Lunes 09 enero, 2012
Idea esponjosa
Cupcake House cuenta con dos locales ubicados en Paseo de las Flores y Terramall, pero este año habrá más aperturas
Hace dos años el sueño de contar con un negocio rentable en un centro comercial se le cumplió a Pablo Solera, un ingeniero en sistemas que luego de decidir poner un alto a su profesión y dejar de lado su primer intento como empresario con un catering service, apostó por una dulce idea.
Se trata de Cupcake House, que abrió sus puertas en el centro comercial Terramall y hace un año se expandió a Paseo de las Flores en Heredia.
El concepto, como su nombre lo indica, es vender los llamados “cupcakes”, unos quequitos, de diferentes sabores con llamativos lustres que los hacen lucir deliciosos.
Los productos estrella en su mayoría no cuentan con aditivos ni preservantes; sin embargo, con la incorporación de nuevos sabores ha tenido que utilizar en pocos casos saborizantes y alguno que otro colorante.
En cuanto a las recetas, todas son creación de Solera, que aunque no es chef, su creatividad y buen gusto ha sido del agrado de sus clientes.
“Cuando comencé quería saber cómo se hacía mi producto, así que empecé a hacer las recetas basado en libros; sin embargo, eran un desastre, pero luego de seis meses salieron bien y me di a la tarea de perfeccionarlos”, comentó.
Además de los famosos quequitos, Solera ha decidido innovar con algunas variaciones del producto, por ejemplo se incorporó un cupcake helado, que varía cada mes y medio.
Para Navidad el ingrediente era el turrón y ahora en verano son los trocitos de melocotón.
“Además de innovar, la idea es que la gente se acerque más temprano al negocio, ya que el cupcake es más para la tarde, pero con este producto la gente lo compra más temprano y aprovecha y se lleva una cajita de los tradicionales”.
Entre los sabores destacan fresa chocolate, banano pecanas, coco, moka, pie de limón y churchill.
Además en los locales se venden bebidas como café, chocolate y smoothies.
Actualmente Solera cuenta con una planta de producción en Tres Ríos.
Al momento estima que la inversión ronda los $100 mil, y entre los proyectos vislumbra la apertura de más locales, de hecho dentro de poco se reunirá con encargados de Multiplaza Escazú, y ya cuenta con un contrato para abrir en un nuevo Paseo de las Flores previsto para noviembre, y tiene al menos negociaciones con dos centros comerciales más.
Melissa González
mgonzalezt@larepublica.net
Cupcake House cuenta con dos locales ubicados en Paseo de las Flores y Terramall, pero este año habrá más aperturas
Hace dos años el sueño de contar con un negocio rentable en un centro comercial se le cumplió a Pablo Solera, un ingeniero en sistemas que luego de decidir poner un alto a su profesión y dejar de lado su primer intento como empresario con un catering service, apostó por una dulce idea.
Se trata de Cupcake House, que abrió sus puertas en el centro comercial Terramall y hace un año se expandió a Paseo de las Flores en Heredia.
El concepto, como su nombre lo indica, es vender los llamados “cupcakes”, unos quequitos, de diferentes sabores con llamativos lustres que los hacen lucir deliciosos.
Los productos estrella en su mayoría no cuentan con aditivos ni preservantes; sin embargo, con la incorporación de nuevos sabores ha tenido que utilizar en pocos casos saborizantes y alguno que otro colorante.
En cuanto a las recetas, todas son creación de Solera, que aunque no es chef, su creatividad y buen gusto ha sido del agrado de sus clientes.
“Cuando comencé quería saber cómo se hacía mi producto, así que empecé a hacer las recetas basado en libros; sin embargo, eran un desastre, pero luego de seis meses salieron bien y me di a la tarea de perfeccionarlos”, comentó.
Además de los famosos quequitos, Solera ha decidido innovar con algunas variaciones del producto, por ejemplo se incorporó un cupcake helado, que varía cada mes y medio.
Para Navidad el ingrediente era el turrón y ahora en verano son los trocitos de melocotón.
“Además de innovar, la idea es que la gente se acerque más temprano al negocio, ya que el cupcake es más para la tarde, pero con este producto la gente lo compra más temprano y aprovecha y se lleva una cajita de los tradicionales”.
Entre los sabores destacan fresa chocolate, banano pecanas, coco, moka, pie de limón y churchill.
Además en los locales se venden bebidas como café, chocolate y smoothies.
Actualmente Solera cuenta con una planta de producción en Tres Ríos.
Al momento estima que la inversión ronda los $100 mil, y entre los proyectos vislumbra la apertura de más locales, de hecho dentro de poco se reunirá con encargados de Multiplaza Escazú, y ya cuenta con un contrato para abrir en un nuevo Paseo de las Flores previsto para noviembre, y tiene al menos negociaciones con dos centros comerciales más.
Melissa González
mgonzalezt@larepublica.net