García entre sombras
Dinia Vargas dvargas@larepublica.net | Sábado 02 mayo, 2009
García entre sombras
El español ha tenido un comienzo de temporada bastante desteñido
Dinia Vargas
dvargas@larepublica.net
Este inicio de año la situación no ha sido nada agradable para el español Sergio García, quien poco a poco ha ido perdiendo las posibilidades de lograr los objetivos que tenía al comienzo de la temporada.
Era claro, como él lo expreso, que su deseo era seguir mejorando para tratar de llegar a la posición que ostenta Tiger Woods; sin embargo, los planes del español se han roto como un rompecabezas.
Primero no aprovechó la ausencia de Woods, quien por más de nueve meses estuvo fuera de los campos de golf debido a su lesión. Con el regreso del mejor jugador del mundo la situación para llegar a esa casilla de honor está más que complicada para el español.
A eso se le suma Phil Mickelson, quien después de que Woods volvió parece haber despertado del letargo en que estaba y más bien envió a García al tercer lugar del ranking mundial.
Tanto Woods como Phil ostentan un título en lo que va de 2009. El golfista de San Diego, segundo del mundo, ganó el Northern Trust Open y el de California, primero del escalafón mundial, se llevó el Arnold Palmer Invitational.
Esto contrasta completamente con las actuaciones que ha realizado hasta el momento el golfista castellonense, quien no ha podido levantar ni un solo trofeo en lo que va de la temporada.
Pero el verdadero dolor de cabeza de Sergio no es Tiger Woods, ni Phil Mickelson, son los torneos de Grand Slam.
Su sueño de tener “la posibilidad de ganar un grande”, como lo manifestó después de disputar el torneo de Castellón el año pasado, sigue igual al escapársele la primera oportunidad de la temporada.
La participación de García en Augusta fue decepcionante al ocupar el puesto 38 y los medios españoles no dudaron en criticar al golfista con frases como “García se hundió en la clasificación” y “otro grande que se le niega”.
Todavía a la agenda del año le quedan tres Grand Slam y muchos más eventos, donde el español tendrá que sacar su verdadera casta si desea brillar este año.
El español ha tenido un comienzo de temporada bastante desteñido
Dinia Vargas
dvargas@larepublica.net
Este inicio de año la situación no ha sido nada agradable para el español Sergio García, quien poco a poco ha ido perdiendo las posibilidades de lograr los objetivos que tenía al comienzo de la temporada.
Era claro, como él lo expreso, que su deseo era seguir mejorando para tratar de llegar a la posición que ostenta Tiger Woods; sin embargo, los planes del español se han roto como un rompecabezas.
Primero no aprovechó la ausencia de Woods, quien por más de nueve meses estuvo fuera de los campos de golf debido a su lesión. Con el regreso del mejor jugador del mundo la situación para llegar a esa casilla de honor está más que complicada para el español.
A eso se le suma Phil Mickelson, quien después de que Woods volvió parece haber despertado del letargo en que estaba y más bien envió a García al tercer lugar del ranking mundial.
Tanto Woods como Phil ostentan un título en lo que va de 2009. El golfista de San Diego, segundo del mundo, ganó el Northern Trust Open y el de California, primero del escalafón mundial, se llevó el Arnold Palmer Invitational.
Esto contrasta completamente con las actuaciones que ha realizado hasta el momento el golfista castellonense, quien no ha podido levantar ni un solo trofeo en lo que va de la temporada.
Pero el verdadero dolor de cabeza de Sergio no es Tiger Woods, ni Phil Mickelson, son los torneos de Grand Slam.
Su sueño de tener “la posibilidad de ganar un grande”, como lo manifestó después de disputar el torneo de Castellón el año pasado, sigue igual al escapársele la primera oportunidad de la temporada.
La participación de García en Augusta fue decepcionante al ocupar el puesto 38 y los medios españoles no dudaron en criticar al golfista con frases como “García se hundió en la clasificación” y “otro grande que se le niega”.
Todavía a la agenda del año le quedan tres Grand Slam y muchos más eventos, donde el español tendrá que sacar su verdadera casta si desea brillar este año.